Hard to Love (Zachary Levi)

Capitulo 20

-I love this place, but it's haunted without you. My tired heart is beating so slow
Our hearts sing less
Than we wanted
We wanted
Our hearts sing 'cause
We do not know- Coloqué la plumilla de la guitarra entre mis labios escribiendo los ritmos en una hoja vieja de papél.

El reloj marcaba las 2 de la mañana y aún seguía en el balcón del apartamento observando los altos edificios que cubrían la ciudad ante las montañas. Me habían llamado de la disquera días atrás mientras trataba de arreglar mis sentimientos por Bill.

Zachary parecía comenzar a desaparecer de mi mente cada vez que iba a dormir, los constantes ánimos de Alexandra y Carl se habían desvanecido con cada intento y comenzaron a llamar día con día para saber si me encontraba bien.

Bill había comenzado a salir conmigo de una manera diferente y verdaderamente adoraba pasar largos ratos junto a él bajo los árboles del parque Robbin, comenzaba a aprender tantas cosas curiosas de él que había dejado pasar, similar a cuando Zachary me contaba mágicas historias tras de cosas tan simples como las corazas o el collar que me había regalado esa noche en la que lloré tanto por él.

Mamá y papá estaban nuevamente emocionados por conocer al chico sueco del que tanto les había hablado las últimas semanas, aun que sabía que realmente lo único que les importaba era conocer al hombre que probablemente intentaría arreglar el lugar vacío de Zachary y que dejaría de llorar por él en cada cumpleaños que la pasaba sola en casa de mis padres.

Había utilizado el mismo vestido que arreglé para mi las veces que fueron necesarias para sentirme satisfecha con el alto gasto. Ahora estaba completamente deshecho del deslizante por culpa de las noches bochornosas entre Mr. Gulliver y yo.

-Abre la boca- Dije con firmeza sin poder contener mi sonrisa al verle obedecerme tan dulcemente e introduje una considerable papá con ketchup en su boca para después darle un largo beso para relamer de mis labios la poca salsa que quedo en mi
-Siempre te obedezco en todo, corazón- Guiñó su ojo haciendome sonrojar y apoyé mis codos contra la mesa roja de aquel restaurante retro de los años 50's, adoraba ir junto a Bill a ese lugar
-Admite que te encanta algunas veces- Reí e imitó mi acto para quedar mas cerca el uno del otro
-Creo que siempre- Rodé los ojos tratando de contener lo avergonzada que seguramente me veía y deslizé un poco de ketchup sobre mis labios, no tardo en comprender
-Creo que...tienes un poco de salsa de tomate por aquí- Tomó mis mejillas entre sus manos y me besó de nueva cuenta, sus labios eran tan suaves y carnosos y aun que lo adoraba, ningunos encajaban tan perfectos con los míos como los de Zachary. Nunca lo hicieron. Nuestros ritmos eran dulces y románticos mientras los de Bill se tornaban  ardientes y sofocantes, sobre todo en la cama.

Mordí su labio inferior antes de poder separarme de él o terminaríamos la situación en el lugar menos indicado.
-¿Quieres ir a casa?- Rascó su cuello convencido y yo por supuesto, no iba a negarme ante aquello.

Su mano estuvo contra la mía en todo el camino a casa, su forma de caminar y de vestir era tan elegante y lo admiraba, por supuesto que lo admiraba desde el principio que fue tan amable conmigo en ese ascensor.

-Bill- Apreté un poco su mano acercando mi cuerpo al de él
-¿Si, linda?-
Besó el dorso de mi mano, era bastante alto así que reí por ello.
-Me llamaron de la disquera- Dije sin terminar la frase a lo que él hizo un leve sonido dando a entender que estaba poniendo atención en cada palabra que yo le decía -Y quieren que vaya a firmar con ellos en un par de días para lanzar un disco en solitario de cada una de mis canciones- Apreté mas su agarre por la emoción y sonrió amortiguadamente.
-Me alegro mucho por eso, Elise- Sentí su paso un poco mas rapido contra toda la gente que iba y venía en el centro de Los Angeles -Estás llena de talento, lo supe desde que te vi en ese ascensor-
-¿En verdad? ¿Por qué?- Deseaba que me respondiera
-Tarareabas una canción de John Denver-
-Oh- Recordé, Anne's song -Si, era una de mis favoritas- Sonreí y él pareció no escuchar por que no recibí respuesta de vuelta, iba centrada viendo las nubes que comenzaban acumularse en el cielo en pleno verano y entonces creí que quizá en un par de horas, cuando la lluvia decidiera caer y mojar las amplias y llamativas calles de Los Angeles, seguramente haría tanto calor que la gente encendería los termostatos en la azotea del edificio dónde mi apartamento y así, un ruido estruendoso no dejaría concentrarme en lo que restaba de la noche.
-Ouch- Me quejé al sentir un fuerte golpe contra mi hombro derecho que me hizo chocar contra la persona que iba tan apresurada al igual que nosotros, todo por ser tan distraída como siempre y estar pensando en los termostatos mientras Bill aceleraba el paso.

Me avergoncé por que el cinturón inservible de mi bolso que dije meses atrás que lo retiraría, se enrredó con los audífonos de la persona siguiente que también había chocado conmigo. Bill se detuvó y yo nisiquiera levanté la mirada mas que tratar de arreglar aquella situación embarazosa.
-Lo siento- Mis dedos temblaron al intentar desenlazar aquello y mi boca no podía dejar de disculparse con palabras tontas que seguramente a aquella persona nisiquiera le importaba por que tenía prisa igual que yo al parecer.
-¿Bee?- Esa simple pregunta me hizo no querer mirar frente a mi.

Con el único factor que llamara por mi segundo nombre fue suficiente para saber que era él.

Su cabello era entre oscuro y con leves rastros de mechones blancos ahora y enseguida me dí cuenta que no se había retocado el cabello desde sus grabaciones de Shazam.

-Zachary- Pude decir al final del día sin esperarlo.

Por primera vez no me sentía estúpida por que su asombro era igual que el mío, me avergonzaba por lo poco linda que me encontraba esa mañana probablemente, me enredó en un abrazo que me dejó estática largos segundos.

Su perfume había cambiado junto a su cabello y su forma de sonreir. Pero no sus dulces y cálidos abrazos, sus brazos se situaron en las mismas curvaturas de mi cuerpo mientras Bill y la mujer que le acompañaba se mantuvieron en un incomodo silencio que no fue importante para nosotros.

Había anhelado tanto tenerlo entre mis brazos y no quería perderlo de nuevo.

Cerré mis ojos sintiendo su mano adentrarse en el bolsillo de mi chaqueta marrón para separarnos después a causa de él.

Ahora sonreía tomando a la mujer de la cintura acercándola un poco a él.
-Bee- Inclinó su cabeza en despedida antes de marcharse dejándome sola de nuevo junto a Bill.

Sola junto a Bill.

Al llegar a casa nuestros planes se quebraron por la vaga excusa que le dí al castaño antes de cerrar la puerta del apartamento y tomar entre mis manos lo que Zachary había situado en mi bolsillo.

Su tarjeta de presentación que mantenía su numero impreso en la parte inferior.

Nota: Espero con todo mi corazón que en verdad les esté gustando:c disculpen que no he podido seguir si algunas leen otra de mis historias con Zachary/ Shazam, pero pronto las continuaré, les agradezco mucho sus comentarios y votos realmente me hacen seguir con esta historia y se los agradecería❤