Final Feliz.

Tanto tiempo.

El marido de mi madre me esta intentando destruirme a punta de disparos, es inútil, rebotan en mi cuerpo cristalizado, algo curioso es que los disparos no se escuchan. Extiendo mi brazo hacia el, se estira en forma de cristal afilado y le atravieso el corazón, Wow, no sabia que podía hacer eso, mis poderes están creciendo.

Recuerdo ir en la camioneta con Barbara jugando con mi pelo cuando ella estaba hablando con Alva y oigo que dice:

"Nuestros poderes crecen en momentos de crisis."

¡Los vecinos!, el idiota esta en la puerta con mi brazo en el corazón. Lo jalo rápido a la sala de mi casa donde cae completamente muerto, un charco de sangre se hace. ¡Mi ropa!, no me di cuenta, estoy bañado en sangre de todos en esta casa.

-¡Pamela!, ¡Rápido tienes que venir a mi casa!, ¡Es una puta emergencia!-Le chille a Pamela en el teléfono. 

Esperando que llegue Pamela, me asomo a la cocina y al ver a mi madre muerta con sus ojos viendo al techo, no sentí tristeza, mas bien, un sentimiento muy parecido a la incomodidad. Me siento a un lado de ella y le tomo la mano esperando a mi salvadora. Ojala que en este momento también hubiera llegado aquel muchacho del otro día que revivió a Juane de un golpe.

Oigo el timbre, corro hacia la puerta y es Pamela.

-Con una mierda, ¿A quien mataste?-Me pregunta, pero no le contesto, solo la hago pasar. 

Pamela Yatra

Cuando llego a casa de Ylene y se abre la puerta, lo primero que veo es a Ylene exaltado con su ropa llena de sangre. Es un idiota.

Lo regañe un poco y me lleva a la cocina, madre de dios, que asquerosidad.

-No te pases de idiota.-Le dije con una cara de asco, no hice ningún comentario del  muerto de la sala.

-Los niños no importan, quiero a esa mujer, es mi madre.-Dijo un poco trabado, la mujer estaba casi seca.

Esto nunca lo comento, pero cuando una persona pierde alguna parte de su cuerpo, en este caso la sangre, uso mas energía de la normal. Pero Dios, esta mujer esta casi vacía.

-Te ayudo a esconder el cuerpo.-Le dije en sarcasmo.

Me miro incrédulo con lo que le dije, no es un buen momento para broma, cambio mi expresión a una seria y coloco mi mano derecha en su abdomen y la otra en su cabeza. Lo tengo que logras ¡Tu puedes Pamela!, necesito inspiración.

Aun recuerdo cuando reviví a alguien por primera vez.

Tenia..., No lo recuerdo pero era muy pequeña, 5 ó 6 a lo mucho, Era el funeral de mi abuelo, mis padres me habían llevado, muchos dicen que la muerte es confusa para los niños, en mi caso, yo no entendía por que había tanta gente llorando y vestida de negro, pero tampoco es como que me importara mucho el asunto. Al final mi padre me levanto y me dijo que le diera un beso en la frente a mi abuelo, ahora que lo pienso, es un rollo muy enfermo poner a tu hija a besar un cadáver. Cuando le di el beso en la frente, sentí como si le hubiera escupido y por una fuerza mayor a mi, inhale profundo, mi padre al bajarme de sus brazos, oí muchos gritos, muchas señoras corriendo y chillando "Ay diosito santo", mi tia Charlotte me tomo del brazo y me saco de la funeraria, pero antes alcance a ver como mi abuelo al que había besado en la frente hace unos segundos estaba de pie. 

Fui una niña que veía mucha televisión, sabia que había sido yo quien volvió a la vida a ese anciano. Una temporada mis padres no estaban mucho en casa por que estaban con mi abuelo, fue ahí donde aproveche para practicar mis poderes, empezaba con liebres y ratas del vecindario, el gato de mi vecina Lulú, al cual le lloro tanto al ver que le corte el cuello y fue a acusarme con su madre, tonta no fui, lo reviví en segundos y Lulú quedo como una mentirosa.