11 🌫 Puedes quedarte.

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Cuando SeokJin da un paso dentro de la casa de NamJoon, luego de cuatro semanas fuera, es recibido por los brazos de la madre de este, después los de su padre. —Jin, te echamos mucho de menos.

—Que bueno que has vuelto —dice el padre  de Nam con una amplia sonrisa —. Es una lastima que no pasaras el fin de año en la ciudad.

—Sí, yo en verdad olvide por completo avisar sobre eso, lo siento —se disculpa el chico con algo de pena ya que, prácticamente, no se despidió adecuadamente de los padres de su novio.

—No te preocupes —dice la mujer agitando su mano para restarle importancia al asunto—, lo importante es que ya estas aquí.

—Ven, vamos a comer —dice el hombre colocándole una mano en el hombro mientras empiezan a caminar hacia el comedor—. ¿Cómo te fue?

Por un momento Jin casi olvida que NamJoon también esta ahí ya que los padres del chico y SeokJin se han enfrascado en una charla por varios minutos. Cuando NamJoon se sienta a su lado y roza sus dedos con la mano de Jin es cuando el chico le voltea a ver.

Los padres de NamJoon continúan hablando sobre algún tema sin mucha relevancia mientras Jin y NamJoon juguetean con sus dedos entrelazados por debajo de la mesa durante gran parte de la comida.

—Vamos a ir a mi habitación —avisa NamJoon después de que los cuatro han estado hablando por un largo rato después de terminar de comer.

—Esta bien, cariño.

—Disfruten del día —dice el padre de NamJoon para después continuar hablando con su esposa.

Ambos chicos caminan con calma hasta la habitación de menor, cuando entran Jin se queda de pie en medio del lugar mientras NamJoon cierra la puerta detrás de él.

Jin se da la vuelta para preguntarle a Nam qué es lo que harán durante el resto de la tarde pero antes de que pueda decir algo NamJoon ya lo tiene entre sus brazos. —Yo también te eche de menos, Nam —dice Jin devolviéndole el abrazo mientras sonríe ligeramente.

Los minutos pasan y NamJoon no parece querer soltar a SeokJin. —No es que quiera que me sueltes pero mis piernas se están cansando —comenta Jin en voz baja.

Así que NamJoon empieza a dar pequeños pasos hacia la cama sin soltarlo, cuando están justo a un lado se deja caer junto con Jin ya que siguen abrazados.
Jin ríe ligeramente. —Creo que entiendo.

Cuando, minutos después, NamJoon suelta a Jin es solo para subir sus manos hasta su rostro y pasar a besarlo detenidamente por varios minutos más.

Durante tres semanas habían estado hablando por llamadas y algunos mensajes de texto hasta que recordaron las video llamadas y decidieron implementarlas. Pero eso había sido hasta la ultima semana y, al parecer, para NamJoon no han sido suficiente. Jin lo comprende ya que para él tampoco lo fueron.




🌫🌫🌫





—NamJoon. —El chico levanta su mirada del tablero de ajedrez frente a él. —Mis amigos y yo solemos ir a la feria de invierno la tercera semana  de enero, ¿quieres venir?

—No lo sé, yo también voy con mis amigos.

—¿En serio? Bueno, entonces ve con ellos —dice Jin tratando de mover alguna pieza sobre el tablero aunque sabe que la partida para él esta perdida.

—Bien.

No pasan más de cinco minutos cuando NamJoon vuelve a ganar y Jin suelta un suspiro de resignación. Cuando se trata de ajedrez NamJoon siempre le gana, ni siquiera sabe porque lo han estado jugando tantas veces ese día si ya saben cual será el resultado.

Pasos adecuados para iniciar una relación | NamJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora