STALKER ●Jimin and You●+21

♤9♤

Llegó la hora...
No sabía si de verdad tenia que ir. Por un lado, no quería, ya que si Haneul acababa descubriendo lo más minimo, acabaría en un hospital... Pero por otro lado... Tenía un impulso que me obligaba a asistir a aquella función, o lo que quisiera que fuera aquello...
Me llevé dos horas en casa de Samatha duchandome, maquillandome, peinandome, y vistiendome...

Cuando me miré al espejo, y supe que iba a ir allí... Me vi incluso guapa... Estaba contenta, y se me habia olvidado todo lo referente a Haneul.

(...)

Estaba en la puerta...
Jamás me he sentido tan observada... tenía que pasar con un vestido de gala entre decenas de personas vestidas con vaqueros y camisetas con cervezas y cócteles en las manos...

Intenté pasar lo más rápido que pude. En cuanto llegué a la puerta de la sala VIP, el portero me reconoció, y me dejó entrar sin necesidad de decirle nada...
Esta vez iba sola, lo que me hacia sentir más insegura aún...

Cuando entré a la sala del otro día... Estaba completamente vacía...

Las luces estaban encendidas, pero no habia ni un alma...

No podía estar equivocada... Era aquí. Estaba segura. Quizás habré llegado temprano...

Me acerqué a la mesa donde me senté ayer... Y cuando miré al escenario, me encontré con dos sillas, colocadas una en frente de la otra...

Me senté en el mismo lugar que la otra vez, y cogí mi móvil... No tenía ni un solo mensaje. Qué raro. Pensé que a estas alturas, Irene y Samantha iban a bombardearme con preguntas...

Cuando devolví mi mirada hacia arriba, me encontré con el chico que me hizo dar un respingo sobre mi asiento del susto que me dió...

--Coño... Qué susto...- dije avergonzada.

Iba extremadamente guapo... Llevaba unos pantalones de traje negros, una camisa celeste, y un chalequillo ajustado negro tambien.

--Buenas noches.- dijo Jimin, buscando mi mano para besarla en gesto de saludo.

--Bu..buenas noch..noches.- tartamudeé, sus labios estaban tan suaves al contacto con mis manos...

--Estás preciosa.

Sin soltar mi mano, me invitó a ponerme de pie, y me dió una vuelta para ver mi vestido al completo...

Le dí las gracias lo más fluído que pude, y me di cuenta de que lo estaba observando más de la cuenta, así que eché mi vista al suelo.

--¿He llegado temprano?- pregunté mirando sus zapatos negros.

--No. - con sus dedos agarró mi barbilla y echó mi cara hacia arriba, haciendo que nuestros ojos se conectaran en una sola mirada.- Has llegado a la hora justa. - sonrió acariciando mi cara para quitar su mano de la misma.

--Entonces... ¿p..por qué no hay... nadie?- dije mirando a mi alrededor.

--La función se ha pospuesto. - apretó los labios- Hasta dentro de dos horas no comenzará.

--¿Dos horas?- dije soprendida- Me podrias haber avisado... -bromeé como pude.

--Necesitaba verte.- volvió a conectar sus ojos con los mios.- Ven aquí.

Entrelazo su mano con la mia, y tiró de ella, hasta guiarme al escenario... tuvo especial cuidado con que no me pisara el vestido, dejandome subir primero mientras el se colocaba a mi lado para vigilar que eso no pasara...

Cuando estuve encima de aquellas tablas... Me sentí tan pequeña en medio de tan grande espacio...

Él, que estaba detrás de mí, apoyó su mano en mi espalda, poniendo mis sentidos alerta, y me empujó hasta las sillas...