♤33.1♤

63 7 0
                                    

Hoy nos esperaba un día de arduo trabajo...
Jimin se despertó demasiado temprano para prepararse... Estaba nervioso... Así que decidí remolonear un poco en la cama para que no se muriese después de trabajar...

--Jimin... - susurré en con mi cabeza enterrada en la almohada.

--Dime.- dijo dando vueltas al rededor de la cama.

--Abrázame... - En su cara se dibujó una sonrisa tierna, que relajó la tensión en su cara...- Por favor.- supliqué.

Me miró de nuevo... sacó las manos de sus bolsillos y soltó un suspiro antes de tirarse junto a mí en la cama...

Colocó una de sus piernas sobre mi pelvis, y abrazó la parte alta de mi vientre, justo debajo de mis pechos, y así aferrarme a su cuerpo, dandome algun que otro besito en los cachetes. Lo miré, y le besé en sus labios, hinchados por haber dormido tan poco... Juntó su nariz con la mía, y ambos cerramos los ojos... La conexión entre nosotros era notable.

--Te quiero mucho, ____...- susurró.

--Yo sí que te quiero...- respondí apretando sus brazos contra mí, y dandole de nuevo un beso...

(...)

Al poco rato tuvimos que levantarnos para irnos... Nos pusimos ropa cómoda y cogimos algo por si necesitábamos cambiarnos la ropa sucia.
Jimin llevaba un chándal negro, y debajo de la sudadera abierta tenía puesta una camiseta de baloncesto sin mangas de color blanca con los detalles negros...
Yo me decanté por unas mayas grises y una sudadera rosa que, cómo no, Jimin me prestó.

Salimos dispuestos a adelantar todo lo posible.
Al llegar, cogimos las herramientas, y tiramos todo lo necesario. Las estanterías las quitamos, las mesas y sillas las guardamos para restaurarlas y ponerlas fuera.

Las horas pasaban rápido, y una vez limpiamos todo, Jimin se puso a montar los armarios y las estantería que irían en las paredes mientras yo comenzaba a visualizar cómo y por dónde empezar la restauración de aquella barra tan grande.

Quería cambiar tantas cosas que no sabía cual de ellas hacer primero... Tenía pensado poner toda la encimera con un barniz aviolatado para que el mármol se viera más brillante y con reflejos violetas... y pintar el resto de la barra de blanco o verde azulado muy muy claro, para añadirle toques sutiles en tonos plateados y violetas... Quizá como si fuera un patrón de flores sobre el fondo... Como un cerezo, pero morado... Sí, eso haré al final... Así que empezaré por quitar toda la pintura antigua y tratar la madera...

Cogí un par de lijas y comencé a alisar todo aquello, quitando la pintura antigua y cualquier imperfeccion que los años hubieran causado a la madera...

Las horas pasaban, y el sol iba cubriendo cada vez más el suelo de aquella plazoleta... Hacía un calor horrible, y sentí que necesitaba parar unos minutoa para descansar mis brazos y ponerme mas fresquita, tomandome un buen trago dw agua fría...

Jimin estaba sentado en el suelo, mirandome beber de aquella botella mientras mi ropa se pegaba a mi piel por el sudor...

--¿Qué miras?- dije al terminar de beber...

--No miro nada... Te admiro, que es diferente.

--Ya claro... -me apoyé en una mesa para mirar cuánto me quedaba por hacer- Pues no admires tanto, y mueve laa manitas.- me chuleé.

Él se levantó, vino caminando hacia mí, con la piel brillante del calor, moviendo sus hombros al ritmo de sus pies para que su paso fuera más intimidante... Su cuello rebosaba en venas deseosas de relajarse...
Y yo... simplemente me bloqueé.

STALKER ●Jimin and You●+21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora