Cuando No Lo Planie

¿Qué pasa conmigo?

Cuando salimos ya era de noche, los chicos estaban muy nerviosos no sabían de donde les podría salir los tipos que los estaban persiguiendo ni nosotras sabíamos que iba a pasar en las siguientes horas. Pero siendo sincera me intrigaba saber quiénes los perseguían por que llegaron heridos a la Floreria, pero prefiero mi vida antes que mi duda saliera de mi boca.

Cuando ya habíamos acabado de cerrar el chico llamado Erick se fue sin decir ninguna palabra, mi amiga me miraba con tristeza como si presintiera algo.

-no le des información sobre ti entendido- me susurro al momento que me abrazo. Yo solo asentí con la cabeza. Veo cómo se da la vuelta para irse, cuando siento una mano en mi brazo y me hace pegar un pequeño brinco había olvidado con quien me iba a ir y me tenso de un momento a otro. Volteo y la veo sus ojos tan bellos que tiene y me mira.

-para donde vamos preciosa- sonríe

-Vamos derecho a tomar un bus después del parque -bajo la mirada

-oye vamos no te hare nada que tú no quieras Vale te puedo decir Vale ¿no? Simplemente necesito que me ayudes por favor no me tengas miedo- se acerca a mi tomándome por la cintura y levanta mi barbilla

-como me puedes decir eso que no te tenga miedo si estoy consciente de que traes un arma en la espalda- digo en un susurro y vuelvo a bajar la mirada

-lo siento tienes razón intenta confiar en mi si un rato más tú te iras por tu lado y yo por el mío y no te hare daño lo prometo -dice y veo cómo se tensa y comienza alejarse de mi empezamos a caminar y me emparejo a él y ya casi llegábamos a la parada estábamos cruzando el parque, noto que la mira para todos lados con preocupación y eso a mí me da pendiente. Pasaban los minutos se detuvo en seco y me sujeta de la cintura jalando me hacia el haciendo que lo mire fijamente.

-discúlpame no intento nada malo solo que los tipos que nos estaban siguiendo están en la esquina no podemos pasar por ahí- volteo despistadamente sin separarme del hacia donde me ha indicado el y efectivamente esta una camioneta negra parada.

-están volteando hacia los lados- hago un movimiento para que el quede de espaldas a la camioneta.

- perdóname no debí haberte metido en este lio soy un idiota salve la vida de mi amigo, pero acabo de poner la tuya en riesgo- trago saliva baja la mirada y me sujeta más de la cintura, no me gustaba en el modo que estaba hablando y me comenzaba asustar no sabía que decirle me daba pena que dijera eso

-hagamos algo ya estamos aquí así que salgamos de este lio juntos- pego mi frente a la del sigue sin soltar mi cintura un freno nos hace separarnos y voltear y vemos como varios hombres bajan y se empiezan a separar no lo pienso dos veces lo tomo de la mano y lo que hago es cruzarnos la calle hacia las casas que están enfrente del parque no quería que lo lastimaran tenía que pensar que hacer para cuidarlo.

Me recargo en la pared y hago que se ponga frente a mí todavía el miraba hacia atrás para ver a donde se iban los tipos que se bajaron de la camioneta

-ha hora que hacemos nos acorralaron están en todos lados- hace una cara de angustia que ha cierto punto me dio risa y sin notarlo sonreí

- ¿qué te causa risa preciosa? -me toma de la cintura haciéndome pegar a él esto me pone nerviosa y dejo de sonreír, lo sujeto más a mi par hacerlo recargar me en la pared la pared estaba demasiada fría y al momento del rose hace que me dé un escalofrío muy intenso y haga que lo abrace por alguna razón el responde mi agarre.

-nada perdón es que cuando estas nervioso tu cara hace gestos muy graciosos

- ¿así? -intento mantener la risa por su comentario

-pensemos que hacer porque dos hombres vienen hacia acá -voltea a su espalda

-perdón por lo que hare, pero creo que es la única manera- sin más me toma entre sus manos mi rostro me besa despacio y delicadamente sigo el beso a compás de él baja sus manos a mi cintura y me pega más a él y me aprieta. Es mi primer beso qué diablos estoy haciendo regale mi primer beso a una persona que ni conozco genial solo estas cosas me pasan a mí.

veo como los dos hombres pasan a un costado de nosotros sin voltear, se separa de mí– perdón no vayas a pensar que me quise aprovechar del momento- baja la mirada sin soltarme de la cintura. Le tomo la barbilla y alzo para que me vea

-oye tranquilo solo fue un be...so tranquilo ahora intentemos salir de aquí- digo un poco nerviosa- salgamos de aquí ya falta poco. -dije segura de mi misma nos dirigimos hacia la para el de bus.

Enseguida de llegar a la parada del bus nos subimos al primero que paso, enseguida que nos sentamos me comencé a reír de la nada creo que los nervios no me están ayudando mucho en estos momentos

- ¿qué tienes? ¿porque te ríes? -sonríe levemente

-pues de todo lo que ha pasado en estas últimas horas es demasiado para mi creo que pude aguantar más de lo que yo suponía- sigo riendo

-ya tranquila por favor creo que los nervios te están traicionando- pasa su brazo sobre mis hombros

-Ya me voy a estar tranquila- le comento la duda me comía le tenía que preguntar tal vez se enojaría o no me contaría y me diría alguna grosería- ¿Por qué te perseguían? -suelto sin mirarlo, siento como se tensa al momento que acabo de decir y suelta un gran suspiro- no te puedo decir es algo difícil de explicar y si te dijera tal vez no podría volverte a ver y eso no me agrada ¿Qué te parece salir al cine otro día? - finalmente habla y levanta mi barbilla-

- ¿estás hablando enserio? -cuestiono lo que acaba de decir- no puedo creer que me estés diciendo esto de verdad tranquilo vamos por pasos mira ano te conozco no sé ni de dónde eres ni cuántos años tienes creo que nada más se tu nombre y si es que te llamas así- digo mirándolo a los ojos.

- A ver me llamo Alexander Salvatierra tengo 22 años me gusta comer cosas picosas el color negro me fascina andar en moto- hace una pequeña pausa- tengo una sola hermana es una rebelde sin causa al igual que yo, tiene 18 y es un dolor de cabeza espantarles a sus pretendientes mis padres murieron hace 8 años- baja la mirada y respira hondo

-ya es suficiente no necesito más información no era necesario que me contaras cosas tan intimas veo que te duele contar estas cosas- digo sujetando su barbilla, pero no logro sujetara ya que me quita la mano logro ver que limpia una lagrima – perdón no quise hacerte pasar un rato malo

-no te preocupes mejor me bajo aquí no quiero incomodarte más ya estamos muy lejos de donde me seguían así que adiós cuídate espero no volverte a ver -dice poniendo se dé pie y hace la seña al chofer que se bajara en la siguiente parada no sé cómo expresa lo que me pasa me saca de onda que me duela eso que ya no lo poder ver de nuevo eso duele mucho en mi pecho y no tengo idea porque veo cómo se baja y sin mirar atrás.

Pasaron 20 minutos para que llegara a mi parada y me baje para mi desgracia aparte que ya era de noche comencé a caminar a mi casa me sentía rara no sabía que me pasaba no sé porque esos malditos ojos negros, no podía dejar de pensar en él, en el beso me dio, el timbre de mi celular me saco de mis pensamientos.

-alo princesa ¡cómo estas!! -dijo un hombre al otro lado del teléfono me tense al descubrir quién me hablaba.