Victoria se encontraba en el lavado con Adrián entre las piernas, mientras ella estaba con la falda subida hasta la cintura, Adrián estaba con una mano desabrochando su pantalón y con otra separando la tanga de Victoria de su cuerpo, cuando estaba por penetrarla tocaron la puerta.
Victoria y Adrián se miraron sorprendidos separándose rápidamente.
- ¿Quién es?- gritó Victoria.
- Yo mamá, Paloma- dijo Paloma detrás de la puerta.
- Ya voy, dame un minuto por favor- dijo Victoria acomodándose la ropa.
- ¿Qué hacemos?- dice Adrián.
- Escóndete- dijo Victoria terminando de arreglarse.
- Hola mamá, ¿te sientes bien?- preguntó Paloma mirando a Victoria salir del baño y cerrar el mismo.
- Si hija, me dieron pequeñas nauseas pero todo bien- dijo Victoria llevando a Paloma hacia la mesa.
Victoria y Paloma caminaron hacia la mesa donde se encontraba Eduardo completamente solo.
- ¿Cómo estás?- dijo Eduardo mirando a Victoria.
- Bien, tuve nauseas y me fui al baño, perdón. ¿Y Adrián?- preguntó Victoria como si no lo hubiera visto.
- Se fue a hablar por teléfono fuera del restaurant- dijo Eduardo tomando su copa de vino.
En eso viene Adrián sudando de igual forma que se encontraba Victoria, por lo que procedió a sentarse.
- Que calor que hace aquí- dijo Adrián sentándose.
- Yo no tengo calor- dijo Eduardo mirándolo serio.
- Yo si- dijo Victoria muy acalorada.
La cena siguió su curso pero ya la hora había entrado muy noche cuando decidieron los cuatro retirarse.
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Han pasado varias semanas en las que Victoria había tomado la decisión de distanciarse de Adrián, Eduardo había notado el distanciamiento pero no le tomó tanta importancia.
Adrián se encontraba afuera de la Universidad de Paloma esperándola con un ramo grande de rosas rojas y un peluche, Paloma iba bajando las escaleras de la universidad.
- Mira Paloma ese hombre con aquel ramo de flores, que suerte que tiene la chava a la que esté esperando- dijo Maltilda amiga de Paloma.
- Adrián- dijo Paloma sonriendo y corriendo hacia él.
- Princesa, te amo- dijo Adrian para luego besarla y abrazarla.
Paloma sonreía mientras toda la universidad aplaudía por el hermoso detalle que había tenido Adrián con ella.
Victoria iba saliendo de su oficina cuando cruzó mirada con Adrián pero ambos siguieron con su camino, ella caminó hacia la oficina de Eduardo abriendo la puerta cuando llegó a la misma.
- Amor, ya es tarde ¿Vamos a la casa?- dijo Victoria sonriendo en el umbral de la puerta.
- Lo siento Victoria, me quedaré un rato más trabajando- dijo Eduardo sin tomar importancia.
- Esta bien, con permiso- dijo Victoria yéndose con lágrimas en los ojos.
Eduardo había estado muy raro esas últimas semanas y Victoria no podía entenderlo, cuando ella cerró la puerta el celular de Eduardo sonó.
Gia:
<Hola Eduardo>
Eduardo:
<Hola Gia>
Gia:
<Hace mucho tiempo quiero hablar contigo>
Eduardo apagó el celular pensando mucho y sintiéndose culpable por aquella noche que pasó con Gia, desde ese día ella lo había seguido buscando.
- ¿Qué querrá Gia?- dijo Eduardo entre pensamientos.
Victoria había llegado a su casa encontrándose con Paloma durmiendo, le pareció raro pues siempre se la pasaba con Adrián, ella se sentía sola hacía semanas que Eduardo no la tocaba, sólo llegaba y se echaba a dormir. Su matrimonio poco a poco iba enfriándose.
Victoria se duchó y se acostó a dormir como todos los días lloraba en silencio, eran las 10pm era relativamente temprano pero el haber llorado por horas la dejó exhausta, sólo el sonido de su teléfono la hizo despertar.
Adrián:
<Hola Victoria>
Victoria:
<¿Qué deseas?
Adrián:
<Necesito verte>
Victoria:
....
Adrián:
<No me ignores por favor, no lo sigas haciendo como en las últimas semanas>
Victoria:
<¿Qué quieres de mi?>
Adrián:
<Quiero verte>
Victoria:
<Te espero en el café central, voy para allá>
Victoria se cambió, arregló y tomó su auto para irse al encuentro con Adrián. Cuando ella llegó se sentó en una de las mesas cuando sintió una brisa detrás de ella.
- Temí que no vinieras- dijo Adrián como susurro provocando que la piel de Victoria se erizara.
- Lo cierto es que aún no sé si debería estar aquí- respondió Victoria mirando fijamente a Adrián.
- Te necesito Victoria- dijo Adrián tocándole la mejilla.
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*¿QUÉ RESPONDERÁ VICTORIA?*
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SE SOLICITA UN AMOR
RomanceLa vida puede cambiarte en un minuto y eso lo sabe muy bien la señora Victoria Balvanera, dueña de la agencias de publicidad más importantes de México. Lleva un matrimonio sólido con su esposo Jose Angel Arriaga y con su única hija Flavia, pero todo...