Monstruo

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El gen salvaje:
Ren

Monstruo

Capítulo veintiuno

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Capítulo veintiuno

Desperté en el incómodo sillón junto a la ventana en la habitación de Ren,quien seguía inconsciente. La doctora Monroe dijo que era algo normal debido al estrés al que fue expuesto los últimos días. Ren necesitaba descansar su cuerpo y su mente para sanar completamente,aunque yo dudaba que algún día pudiera recuperarse del trauma al que fue sometido en el laboratorio totalmente.

Me envolví en la manta que cubría mi cuerpo y me levanté, no recordaba haberla tomado la noche anterior,yo también estaba agotada física y emocionalmente, así que no supe en que momento me quedé dormida,seguramente Parker se encargó de cubrirme con ella.

La temperatura ambiente en el hospital era fría por aquello de los gérmenes y las bacterias. Y ese ambiente gélido a altas horas de la madrugada me dieron ganas de ir al baño,pero antes de hacerlo algo llamó mi atención por la ventana,un taxi amarillo se había detenido, algo normal,lo extraño es que la ventana de la habitación de Ren daba hacia la parte trasera del hospital, lo que tampoco era extraño:

Tango.

Llevaba el cabello suelto y ropa normal,pero era ella, estaba huyendo. Lo que también me pareció lo normal,después de todo era una asesina a sueldo,una mercenaria contratada por mi padre para hacer desaparecer cualquier cosa que lo incriminara,¿Qué pensaría de que una de esas cosas era yo,su hija? Las autoridades seguramente tendrían mucho que preguntarle. Pero eso no era lo interesante.

Lo que me pareció extraño,fue la persona que subió del otro lado. El chico lagarto iba vestido como enfermero. No sólo le estaba ayudando a escapar.

¡Zane,iba a huir con ella!

Alcancé a verlos discutir por la ventanilla trasera,no parecía que Tango estuviera de acuerdo en llevarlo con ella. ¿Debería avisar a Parker? Se supone que Ren,Zane y los chicos irían a Verdonia junto con el resto de los experimentos recuperados de los otros laboratorios,pero al parecer el chico lagarto tenía otros planes.

Para cuando decidí que hacer, el taxi ya se había puesto en marcha,ninguno de los dos volvió a bajar de él.

Salí de la habitación fingiendo no haber visto nada. ¡¿Tango escapó?! ¡¿El chico lagarto no está?! Sí, fingiría sorpresa.

Ni Parker,ni su impresionante amigo madár se encontraban en el pasillo,solo me topé con un par de enfermeras que hacían sus rondas mientras me dirigía hacia el baño.

El gen salvaje: RenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora