capítulo 3

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Hoy quedé con Lily para ir de compras. Llevó diez minutos esperándola en la parada del autobús.
Mi celular sonó y un mensaje en la pantalla apareció.

Desconocido:

Creo que nos veremos muy pronto.

Hace unos días un número desconocido me envió un mensaje, supuse que era alguien de la fiesta de Evan. No le di mucha importancia y le respondí que soy lesbiana que no me interesa. No lo bloquee porque desde entonces no me había enviado otro mensaje. Hasta ahora. Ni siquiera sé si es bueno o malo. De todas formas si es un maldito maniaco o psicópata no le conviene meterse conmigo.

-lamento la tardanza, te juro que salí a la hora- llegó mi amiga corriendo luego me dio un beso en la mejilla y se sentó.

-si claro- sonreí.

-mira que suerte ahí viene el autobús.

Ambas nos levantamos y este paró, Así que nos subimos. El recorrido hacía el centro comercial no es tan largo y bueno tampoco tan corto como para caminar.

-adivina quien me invito a salir- dijo Lily emocionada.

-el chico del bar- la miré.

-su nombre es Paul y saldremos el viernes- me mostró tu teléfono.

Habían pasado solo 3 días desde la fiesta de Evan y ellos habían hablado más que yo con Lily en toda mi vida.

-vaya- abri los ojos- es muy hablador.

-es perfecto, te juro que es mi alma gemela- suspiró exagerada.

-también tengo algo que mostrarte- le pase mi celular y ella vio el mensaje.

-oh por dios, es Evan- Asintió- debe ser Evan.

negué con la cabeza.

-no es él. Busqué su número en el grupo de la escuela y no es él, ni nadie del grupo.

-quizás no es de la escuela, habían muchos chicos que no lo eran.

Me quedé pensándolo unos segundos. Quizás solo quizás, será posible que sea el idiota amigo de Evan. El que pille besándose con una chica.
El autobús freno y me distrajo de mis pensamientos. Lily y yo nos bajamos y entramos al centro comercial.

Primero fuimos a una tienda de zapatos, nos probamos casi todas las muestras y al final no compramos ninguno. Fuimos a ver accesorios, Lily se compro unos lentes negros y yo un collar doble. Luego nos probamos jeans y blusas. Más tarde fuimos a comer, pedimos una promoción en el McDonald’s. Aún nos sobrara dinero así que decidimos ir a ver una película. La fila no era tan larga, nos tomo un tiempo decidirnos por la peli y al final terminamos escogiendo la maldición de la casa Winchester.
Aún faltaban 20 minutos para que la película comenzara así que decidimos ir a comprar cabritas. Hicimos el tiempo y cuando entregamos nuestras entradas dos rostros familiares notaron nuestras presencias.

Evan y el idiota de su amigo estaban delante de nosotras. Rogué para que no se acercaran y dios me escucho. La chica que estaba recibiendo las entradas se las pidió así que ellos entraron.

-creo que deberíamos ver otra película- le comenté a Lily.

-¿porque?.

Lily no se había percatado de ambos chicos.

-escuche a un chico decir que es aburrida.

Habían solo tres personas delante de nosotras.

-bueno tendremos que confirmarlo- miro hacia el frente.

Dos personas.

-tengo que orinar.

-luego vas, ya vamos a entrar- tomo mi brazo.

BipolarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora