O B S E S S E D. [No nos cortes | Saúl]

TRES

La pequeña Sofia tomó la carta entre sus manos al igual que la flor y se dispuso a leerla, esta vez sin miedo alguno. Entró a la casa, seguida por su amigo y abrió la carta como si su vida dependiera de ello.

"He visto como leíste la carta, te noté un poco asustada y he decidido
algo preciosa Sofia. Podrás contestarme estas cartas Que te
parece? Pero claro, hay condiciones si tú quieres que yo lea esas cartas
responda a tus preguntas. Quiero que tengas en cuenta que, aunque
permanezcas afuera esperando a que recoja tu carta y así saber quién
soy no vas a verme, asi que trata de hacer las cosas bien pequeña
Deberás dejar la carta o papel, lo que sea En el pequeño masetero que
tienes colocado en la entrada. Cuando la dejes, la recogeré lo más rápido
que pueda y te contestar
Espero que la rosa te haya gustado, al azul es tu color favorito.
Estaré viendo qué haces Sofia. Te amo.

Con cariño, tú admirador SR."

Sofia estaba decidida, iba a escribirle una carta junto a Yeisson e
iba a esperar su respuesta.

-No deberías contestarle, está loco. Mira si coge más confianza y nos mata. Loca.

-Yeisson la empujó levemente-Además, No tiene nada que hacer? Ha estado esperando a que leas la puta carta para
verte la cara.

-Quizás así pueda conocerlo. Y denunciarlo.

-rodó los ojos-Apóyame Ambos se sentaron en la mesa con una hoja blanca y una pluma de tinta azul para comenzar a escribir;Cómo debería empezar? -le preguntó a su amigo.

-Hey, acaso te llamas Homero Simpson. -bromeó el muchacho

-Yeisson, esto es serio. -río-

Sofia comenzó a escribir sobre el papel, lo más prolijo y entendible
que pudo. Sus manos sudorosas y temblorosas le dificultaban esa tarea
un poco

-Hey. Decidí escribirte esto porque quiero saber por qué haces esto
¿Acaso te he hecho algo malo SR? Quiero saberlo. Quiero saber quién
eres, o por lo menos tu nombre ¿Te conozco?, ¿Cuantos años tienes?
¿Cómo puedo fiarme de que realmente no me harás daño? No te denuncié y no tengo pensado hacerlo si ese es el inconveniente por mostrarte Gracias por leer, Sofia."

-Ponle un sobre bonito como los de él -insistió Yeisson

-No tengo sobres bonitos como los de él.- la muchacha rodó sus ojos

-Dame algún papel de color y yo lo hago. -le sonio- Pues, entonces espérame -sonrió y se levantó para ir a buscar el gran metro de papel violeta que conservaba para emergencias. Cortó un trozo con la tijera y se lo llevó a Yeisson con un pequeño pegamento en barra.

-Haz lo tuyo.-ordenó la muchacha mientras doblaba delicadamente
la carta para meterla en el sobre una vez Yeisson terminara de hacerlo Rápidamente el muchacho terminó el sobre y Sofia colocó la carta dentro, preparada y ansiosa para ponerla donde aquella persona le indicó

Ambos caminaron hacia la puerta principal y se dirigieron hacia la
entrada, depositando la carta donde les habían indicado. No sin antes
mirar para todos los lados posibles.

Volvieron adentro ansiosos, esperando una respuesta inmediata

¿Crees que tarde mucho-preguntó un inquieto Yeisson-

No lo sé. Nosotros tardamos 20 minutos solo por el contratiempo del sobre.

Quizás él tarde menos. -la castaña comenzó a hacer cuentas
mentales de lo que tardaría aquella persona en contestar

-Sofi, ya van 15 minutos estoy desesperado.

-se quejó el muchacho

-Ten paciencia. -le respondió

Algo golpeó suavemente su puerta por lo que ambos corrieron hacia Y ahí efectivamente estaba una de las cartas azules

Sofia tomó la carta y regreso adentro con su amigo a leerla

" Bien Sofia. No me has hecho nada malo, ¿Acaso tendrías que hacerlo
para que te ame? No te preocupes por eso pequeña. Me conoces y
hemos hablado, no intentes recordarlo porque no podrás hacerlo, no
podrás recordarme. Tengo diecinueve años y debes fiarte porque no
puedo hacerle daño a la mujer que amo. Por cierto, dile a tu amigo
el sobre estuvo genial y tu letra es la más hermosa que he visto Sofi He
Con cariño; Tú admirador SR"

-Bien, es un tanto joven. Me agrada-pronunció el muchacho

-Lo dices solo porque alabó tu sobre. -la muchacha le dio un zape

- ¡Le responderás-pregunto curioso
No, hoy no lo haré. Quizás mañana. -la castaña se dejó caer en la silla

Te haré unos 20 sobres. bromeó
Yeisson, creo que acabo de descubrir el por qué mi cama tenía ese perfume que te dije que me gustaba. El de hombre que creí que era tuyo. -Sofia miró a Yeisson

Yeisson comenzó a hacer movimientos como si estuviese convulsionando.
Eso pasó hace bastantes meses atrás Sofia. Quizás sea verdad que
no tenga intenciones de dañarte. -el muchacho se dejó caer en una
silla al igual que su amiga
-Pero eso no quita que sea un enfermo. Te llevaré a casa conmigo un tiempo

-No lo sé, pero, me aterra la idea de saber que él ha estado entrando y
saliendo de mi casa a su antojo conmigo dentro o fuera de ella. Me siento desprotegida -Sofia suspiró pensando en lo que podría pasarle

-Entiendo, pero si no te ha hecho daño en todo este tiempo, ¿Por qué
ahora lo haría? -preguntó el muchacho

-No lo sé Yeisson, tú fíjate que él decidió mostrarse luego de mucho tiempo
la castaña agarró el puente de su nariz

Has ignorado lo que dije

Está bien, si iré un tiempo contigo. -suspiro- Ninguno de los entendía bien aquella situación. Era la primera vez que
les pasaba, por lo que no sabían cómo deberían reaccionar. ¿Le notificarían a la policía? No, no lo harían por miedo a que, si lo hacían, su. "admirador" se enfadara y ella finalmente corriera peligro.