Capitulo 3.-

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Abro los ojos, me incorporo y doy un trago al vaso de la mesita de noche. Solo era una pesadilla. Estoy sudando. Debería aprovechar a darme una ducha ahora. Entro al baño. No me paro a mirarme en el espejo. Directamente me quito la ropa. Enciendo el grifo y dejo que el agua se caliente. Lentamente me meto en la ducha. Permanezco bastantes minutos debajo del grifo sin moverme. Esto realmente me relaja. Pasada una media hora salgo del baño. Mientras escojo la ropa que me pondré me cepillo el pelo. No me lo seco asique me lo dejo suelto. Si, esto es perfecto. Me miro al espejo . Llevo puestos unos vaqueros negros y una blusa celeste. Bajo las escaleras distraída desenrollando mis auriculares. Paso de largo por el salón.

-Bueno días – grito para que,esté donde esté Sam, me escuche.

Dos voces me responden al unisón. Oh no. Es Logan, estoy segura. Sigo mi camino hasta la cocina. No tengo hambre pero me obligo a comer. Escojo una manzana ,la lavo y la doy un mordisco. Umm. Enciendo el móvil y me pongo los auriculares. Una de mis canciones favoritas suena en repetición. “Muy buena manera de empezar el día” mi subconsciente me mira asombrada por lo bien que llevo la resaca. Sonrió. Me fijo en el reloj de la cocina. Sam estará a punto de irse a su primera entrevista de trabajo. Sí, la adinerada Samanta Parker buscando trabajo. Irónico. Yo por suerte ya tenía trabajo antes de mudarnos. Al pasar por delante del salón no les veo. Se han ido ya. Vuelvo a mi cuarto para darme un último repaso e ir a trabajar.

Me queda menos de una hora para salir del trabajo. Me paso los días rodeada de libros. Desde reliquias antiguas hasta lo más actual. Gente de todos los lugares del mundo viene a esta tienda para comprar libros.

-Enma- Joe,mi jefe, me llama desde el almacén.

-Voy enseguida –

Me dirijo al almacén.

-Ha llegado esto – señala un montón de cajas - ¿Te importa colocarlos?- sonríe

Queda menos de una hora para que mi turno se acabe. Mi móvil suena.

-Hola – digo dulcemente

-Hola-

Ethan parece nervioso. ¿Por qué me llamas?

-¿Haces algo esta noche?-

La verdad es que no pero no me apetece salir. ¿Qué le digo?

-Vente a casa y cenamos- propongo

¿Qué? Debería pensar las cosas antes de decirlas. ¿Qué estoy haciendo? Yo no quiero a Ethan. ¿O sí? Me ruborizo al recordar cómo iba ayer vestido. Estaba guapísimo. ¿Y el beso? El beso fue fantástico. Los dos. Sonrió. Si le quiero. Recuerdo el comportamiento de Logan. La sonrisa se me borra de la cara. ¿Debería estar enfadada? Lo estoy. No tengo ninguna gana de verle. Seguro que Sam le invita a cenar. Suspiro. Rezo por que no sea así.

-¿Vienes a buscarme?-

Esta mañana me vine andando y no me apetece andar hasta casa aunque no está muy lejos.

-¡Claro!-

Su tono de voz ha dado un cambio radical. Ya no parece nervioso sino entusiasmado.

-A las siete. No tardes.- sé que no tardara.

-Vale, adiós.- puedo notar que sonríe. Yo también lo hago.

-Adiós.- Cuelgo.

Ya está aquí. Me despido de Joe y salgo escopetada de la tienda. Ethan me espera apoyado en su precioso coche negro. Wow parece carísimo. Lo es. Me lanzo a él y le abrazo con fuerza. Ethan parece sorprendido pero como siempre me entierra entre sus brazos. Me levanta la barbilla para poder verme la cara. Aprovecho a darle un rápido y casto beso en los labios. Él parece contento con mis actos. Sonríe. Caballerosamente me abre la puerta del copiloto y yo entro. Corriendo va hacía la puerta del conductor y se mete en el coche. De camino a casa prácticamente no hablamos. ¿Qué me pasa? Nunca había sido tan tímida. De vez en cuando le miro, va concentrado en la carretera pero sabe que lo observo. Apoya la mano en mi rodilla y le da un suave apretón. Me ruborizo. Llegamos a casa. Parece que no hay nadie.

-Oh, ¡Vístete ya! – La risa de Sam se escucha por toda la casa.

Sam sale de su habitación. Su expresión cambia al vernos ¿Está intentando disimular? La brillan los ojos y una sonrisa pícara domina su cara. ¿Qué la resultara tan divertido? Su gran melena rubia está  alborotada. Sonrío al verla. Seguiría siendo atractiva hasta vestida con un saco de patatas. Baja las escaleras corriendo, me abraza y acto seguido se lanza a por su hermano. Él está igual de sorprendido que yo pero no dice nada. Me giro y veo a Logan en el piso de arriba apoyado en la barandilla de las escaleras. Oh dios. Está despeinado, no lleva camiseta y todavía lleva los pantalones desabrochados. Deja de mirar a Sam y a Ethan y por fin me mira a mí. Se encoje de hombros. ¿Qué? “Será cabrón” mi subconsciente le apunta con una pistola. Intento relajarme pero las ganas de subir y darle un bofetón aumentan por cada segundo que pasa. ¿Cómo se ha atrevido? ¿Con mi mejor amiga? Ahora sí que estoy furiosa. No me lo puedo creer. ¿Este chico es tonto o lo hace aposta? Engancho a Ethan del brazo y voy  casi arrastrándole escaleras arriba hacia mi cuarto.

-Eh, amor. ¿Pasa algo?- Ethan me mira divertido.

Le empujo a la cama. Él se ríe. ¿Por qué te ríes? Esto no tiene nada de divertido.

-Wow  Enma, eres directa. Cuando dijiste “Ven a casa y cenamos” no imaginaba que incluía tanto.

¿Qué? No pensaba acostarme con él. ¿O sí? No, hoy no. No quiero hacerlo por venganza. Cierro la puerta con un buen golpe. “Imagínate lo que quieras cabrón” dije mentalmente refiriéndome a Logan. Si quiere que juguemos, vamos a jugar. Lentamente me desabrocho el botón del pantalón. Dejo que caigan por mis piernas. Levanto un pie y luego otro para salir de ellos. Ethan me mira. Sus ojos azules se oscurecen cada vez que me muevo. Me quito la blusa y camino hasta el armario. Me agacho y abro el último cajón consciente de que Ethan no me quita la vista de encima. Cojo una camiseta ancha gris y la tiro a la cama. Me acerco a él y le quito la camiseta. Me siento a horcajadas encima de él. Le empujo un poco para que nos deje caer a los dos a la cama. Su respiración se acelera. Busco sus labios y me pierdo en un largo y profundo beso. Le beso cada centímetro de su cuello. El acaricia mi espalda. Subo mis manos hasta su pelo y enredo mis dedos en él. Nuestras miradas se encuentran y volvemos a caer en un beso largo.Esta vez más desesperado que antes. Ese cosquilleo que mi cuerpo ya conoce vuelve. El deseo crece dentro de mí. Sus dedos hábiles desabrochan mi sujetador.

-Ya está la cena ¡WOW!  Lo siento-

Mi sangre hierve de rabia.

-¡Joder!- grito

Logan ríe. ¿Que lo sientes? ¡Si lo has hecho aposta! Ethan se lleva las manos a la cara y se la tapa. Oh no.

-Lo siento- le susurro al oído.

Shades.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora