Capitulo 5.-

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Grito y forcejeo con él  pero es inútil. Tiene mucha más fuerza que yo. Me tapa la boca.

-Sshh preciosa nos van a oír- ríe

Le muerdo la mano y esto hace que se separe de mí. Me mira divertido por lo que acabo de hacer. No tengo tiempo para reaccionar. Ya le tengo encima otra vez.

-Déjame – le suplico ya agotada.

Me inclina la cabeza hacia un lado para tener vía libre a mi cuello. Su cuerpo desnudo se pega aún más a mi  ropa mojada. Abandona mi cuello y sube hasta mi cara. Roza mi barbilla con sus dientes y me da un beso rápido en la comisura de los labios. Su respiración se acelera. Sé que me está mirando,pero no lo veo ya que tengo los ojos cerrados con fuerza. Vuelvo a notar sus labios sobre mi mejilla. Empiezo a temblar. El agua sigue cayendo por encima de nuestras cabezas. “Enma, contrólate” me repito una y otra vez. Comienzo a llorar. Cierro lo más fuerte que puedo los ojos para aislarme de todo.

 -Eh… ¿Qué pasa?-

Logan se aleja de mí y apaga el grifo de la ducha. Vuelve a acercarse y me acaricia las mejillas. Noto como el maquillaje se corre por mi cara.

-¿Por qué me haces esto?- musito

Logro mirarle a los ojos. Están llenos de preocupación. Ni siquiera yo sé por qué he reaccionado así pero todo esto me confunde. Me abraza.

-Lo siento- susurra en mi oído.

Soy incapaz de contestarle.  “¿Lo siento? ¿En serio lo sientes? ¡Si nos estás torturando!” mi subconsciente tiene ganas de pelear pero yo estoy agotada, confundida y furiosa.

-Primero lo de la discoteca, luego lo de Sam y ahora esto ¿Qué va a ser lo siguiente? –

Mi voz se eleva a medida que termino la frase. Saco fuerzas y lo empujo. Me escapo de su alcance.

-Por cierto, sigo esperando mi móvil-

Salgo de las duchas lo más rápido posible. Todos los hombres del gimnasio me miran asombrados. No sé si es por mi valentía o porque voy calada. Por suerte mi ropa es oscura y no se transparenta nada.

-Enma espera-

Oigo a Logan dando tumbos por detrás de mí. No para de gritar mi nombre. Salgo a la calle evitándole pero consigue alcanzarme. Lleva únicamente una toalla atada a la cintura. A todas las mujeres que pasan  por la calle se les cae la baba pero el parece no darse cuenta. Pongo los ojos en blanco.

-Olvídame. Tú con Sam y yo con Ethan ¿Entiendes? –

El niega con la cabeza y me suelta. Me meto en mi coche y me voy de allí. Nunca lograre entenderle.

Son las 8. Ethan y Sam todavía no han vuelto. Después de darme una larga ducha me he sentado en el jardín de la parte trasera de la casa a leer. Mi ropa está colgada en la barandilla. Aun chorrea. Recuerdo esos grandes ojos grises mirándome con preocupación. Intento librarme de mis pensamientos. No quiero pensar en él. Oh no. Me voy a quedar sin trabajo. Joe no tiene sucesores y ya es bastante mayor. A lo mejor cierra por eso. No sé. Tengo que buscarme algo.

El timbre de la casa me sobresalta. Me he quedado dormida en el jardín. No se por cuánto tiempo. La persona que llama no desiste. El sonido retumba en mi cabeza. “Ya voy” pienso. Abro la puerta pero la cierro.

-Enma – grita Logan desde fuera – Ábreme-

Me quedo unos segundos  mirando la puerta. Dejo de escucharle.

-Vamos, sé que estás  ahí – gruñe

¿Por qué me grita? Yo soy la que debo estar enfadada no él. Comienza a golpear la puerta. ¿Por qué no me voy? Podría irme, seguir a lo mío pero no. Me quedo mirando la puerta.

-¡Enma joder! –

¿Acaso no te cansas nunca Moore? Podemos estar así toda la noche. Me asomo al salón. El reloj marca las 9:30. Qué raro que no hayan llegado Ethan y Sam. ¿Les habrá pasado algo?

Claro,como no tengo forma de comunicarme no sé si quiera si siguen vivos. Borro ese pensamiento de mi cabeza. No quiero imaginarme una vida sin mi mejor amiga. Los golpes de la puerta me traen de vuelta a la realidad. Abro la puerta.

- ¿¡Qué quieres!? –

Yo también se gritar. Me mira incrédulo. Resopla y pone los ojos en blanco. ¿Ahora te callas? Como no recibo respuesta cierro la puerta de nuevo. Antes de poder hacerlo interpone su cuerpo.

-Ni se te ocurra-

Lo que me faltaba por escuchar. Le cojo de la pechera y le meto dentro de casa. Me asombro hasta yo misma. No sé de donde he sacado las fuerzas para hacerlo. A lo mejor ha sido la siesta que este idiota ha interrumpido.  Con mi mano libre soy un portazo. Wow.  El ruido es tan fuerte que parece que se me va a caer la casa encima. Logan me mira perplejo, asombrado por lo que he hecho. Sus mirada esta clavada en la mía. Intenta disimular una sonrisa. Le estampo contra la pared.  “Se está dejando” mi subconsciente niega con la cabeza.

-¿Cómo? ¡Estoy en mi puta casa!- le grito.

¿Qué se cree? ¿Qué me intimida?

-Ahora yo también.- Sonríe.

Estoy a punto de perder completamente la paciencia. Doy un paso para atrás. Niego con la cabeza y me voy a la cocina. Él se queda un momento parado pero enseguida me sigue. De una de las estanterías cojo una de las botellas de alcohol que Sam compró. Nunca bebo pero ahora siento la necesidad de hacerlo. Abro la botella y doy un trago. Joder. Esto está asqueroso. Logan me mira y arquea una ceja. “Disimula Enma por lo que más quieras” mi subconsciente me lo suplica de rodillas. Tiene razón. No puedo quedar mal en este momento. Me hago la dura y doy un largo trago a la botella. Quien me mandaría a mí hacerlo. Creo que voy a vomitar. Recupero la compostura rápidamente.

-No sabes la vergüenza que me has hecho pasar.-

-Anda mira, si dar golpes a las puertas ajenas no es lo único que sabes hacer. También hablas.

Mi subconsciente me aplaude. “Sigue así” Me entra la risa tonta.

-Enma…- gruñe

Le estoy enfadando. Esto se pone interesante. Se pasa las manos por el pelo. Resopla. Abre la boca para hablar pero la vuelve a cerrar. Doy otro trago a la botella. Mi cuerpo ya se está acostumbrando a esto.

-¿Quieres parar?- me grita y me arranca la botella de las manos.

Me quedo petrificada, por un momento pienso que me va a pegar. No sé si es por el alcohol o por el deseo acumulado pero necesito besarle. Pasa  su lengua por el labio inferior rozando el piercing. No me había dado cuenta de que le tenía tan cerca. Le cojo la cara con las dos manos, me pongo de puntillas y le beso.

-Uf,creía que nunca lo harías- sonríe satisfactoriamente.

Un ruido que proviene de sus pantalones provoca que nos separemos. Es mi móvil. Logan me lo da y se encoje de hombros.

-Hola-

-Nena,esta noche no iremos…se han complicado las cosas-

Ethan parece angustiado.

-¿Todo bien?- pregunto

-Si,tranquila. Hasta mañana nena.- cuelga

Dejo el teléfono en la encimera de la cocina.

-¿Y?- pregunta- Lleva llamándote todo el día.

-Ya vienen- miento.

Sé que si le digo la verdad esta conversación acabaría en mi cama. 

Shades.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora