Miraculous: Fictober 2018

Incógnito

Desde que Plagg y Tikki descubrieron que sus portadores estaban más cerca de lo que ellos pensaban, encontraron fácil la forma de escabullirse de ellos.
Por lo general, se reunían más cerca de la casa de Marinette que de la de Adrien, puesto que Plagg era mucho mejor para moverse entre las sombras, de incognito, se manejaba mejor que Tikki, ella pensaba mucho, Plagg solo seguía su instinto.
Esa vez, se habían reunido con el objetivo de planificar los siguientes movimientos. Nada deseaban más que poder rescatar a Nooroo y a Duusu de las manos de los villanos.  Ellos, como los Kwamis originarios de la creación y la destrucción, sentían una gran responsabilidad por la seguridad de todos sus compañeros. Y verlos siendo usados para el mal, provocaba un gran dolor para ellos que no podían mostrarle a sus elegidos.
Y ahora que estaban activos todos los miraculous principales, tenían que tener más cuidado.
—¿Crees que la chica eligió bien a sus compañeros? —preguntó Plagg, mirando la brillante luna sobre ellos.
—Sé que ella ha actuado bien, el maestro Fu así lo creía también a la hora de elegirla —Tikki también miró la luna con melancolía—. Confiemos en que el buen juicio de Marinette nos dé las herramientas para poder rescatar a nuestros hermanos.
—Verás que lo lograremos, terroncito de azúcar —dijo Plagg, apoyando su cabeza oscura contra la roja de motas negras—. Tengamos fe de que esta vez será la definitiva. Venceremos.
—Gracias, calcetín apestoso —dijo la pequeña, cerrando sus ojos celestes para tratar de calmarse—. Tenemos que ganar. Por Duusu y Nooroo, tenemos que hacerlo.
Y mientras la batalla contra Hawk Moth y Mayura continuaba, ambos Kwamis seguirían reuniéndose por las noches, para darse las fuerzas necesarias para seguir luchando.