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-A la 1:00pm tiene la reunión con el equipo de diseño, a las 3:00pm tiene la reunión con el señor Choi y el equipo de producción del drama para ver los derechos de autor y la adaptación final del guión seguido de eso… - suspiré frustrado mientras escuchaba a Hakyeon leer mi agenda de la tarde.

Solo faltaban 2 días, 2 días para nuestra boda y podía decir sin temor a equivocarme que nunca habíamos estado tan distantes uno del otro. Sentía como si se hubieran invertido los papeles, ahora era Hakyeon el de los comentarios cortantes, y aunque nunca llegó a ofenderme, sentía mi pecho apretado cada vez que ignoraba mis palabras o apartaba la mirada de mí.

Pero yo… no me rendía.

-Terminaré a eso de las 6pm verdad? – sin mirarme él asintió y yo solo suspiré sabiendo de la evidente negativa a mis próximas palabras – te gustaría dar un paseo… solos… tú y yo?

-Debe asistir con Taeyeon a algún lugar? – me miró inquisitivo. Negué con la cabeza.

-No, no, solo un paseo contigo... Hakyeon – por un momento pensé que iba a aceptar al ver sus orbes marrones dudosos sobre los míos y luego…

-Si no es algo que se requiera en nuestro trato prefiero evitarlo, si eso es todo, con su permiso señor Jung – hizo una venía mientras mi frustración llegaba a su límite.

-Hakyeon lo mínimo que puedes hacer es llamarme por mi nombre, pensé que ya habíamos hablado de esto. – detuvo su andar quedando de espalda a mí.

-Creo que ese fue nuestro primer error… señor Jung- fruncí el ceño y él se volteó– no establecer límites en esto – nos señaló a ambos – desde el primer momento. Con su permiso.

Sentí la puerta cerrarse y no pude evitar suspirar frustrado.

Por qué demonios Hakyeon era tan cabezotas???

Ayer no me dirigió la palabra en todo el viaje. Cuando llegamos al apartamento se encerró en su cuarto y tuve miedo de abandonar la sala con temor de que se marchara a su piso cuando no estuviera mirando. Por suerte no lo hizo, pero hasta ahí llegó mi suerte.

No quiso desayunar conmigo. Lo invité a almorzar y me rechazó, ahora lo invitaba a salir y volvía a hacerlo.

Qué había pasado en Changwoon para que pasaramos de estar casi en una relación de verdad a de nuevo solo ser un secretario y su jefe?

Me sentía confundido.

No podía, tal ves para para él era fácil, pero… yo no podía hacer de cuentas que nada había pasado entre nosotros y continuar como antes.

Sí, sé que esas eran mis intenciones en un principio pero… jamás estuvo en mis planes enamorarme, y mucho menos de Hakyeon.

Cómo él podía tratarme con frialdad, cuando yo no podía sacar de mi mente su hermosa sonrisa?
Sus hermosos ojos mirándome con pasión cuando lo tuve en mis brazos?

Acaso Hakyeon fingió todo?

Pasé todas las reuniones en un estado semiconsciente, en el que trataba de prestar atención a los clientes y a la vez mi mente intentaba analizar cada momento pasado con Hakyeon desde que comenzó esta locura a la que lo arrastré.

Está locura en la que dije que Hakyeon había cambiado… pero… yo también lo hice… mis sentimientos lo hicieron.

Pensé que… quizás todo había comenzado cuando le propuse ser mi “prometida”… pero tal vez las cosas empezaron un poco antes…

Tal vez fue cuando lo vi por primera vez vestido de mujer… no puedo negar que me impresionó, pero sobre todo fue el momento en el que me admití que no importaba si estaba vestido como chica, Hakyeon era un hombre hermoso.

I hate you BossDonde viven las historias. Descúbrelo ahora