Capitulo 5

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- _______ sé que estás ahí.- Jin volvió a golpear al cabo de un rato. Jimin la tenía abrazada posesivamente.-  Ábreme preciosa, quiero verte.- Volvió a golpear.

 -¿Qué hacemos?- Susurró _______ nerviosa. Jimin parecía tranquilo mientras la miraba fijamente.- Amor, suéltame.- Trató de soltarse.- Jimin suéltame y escóndete en el baño.- Mordió su labio mientras escuchaba que los golpes en la puerta no cesaban.

 -No.- Dijo firmemente Jimin y una sonrisa se asomaba en sus labios.

 -Jimin, por favor.- Susurró de nuevo imprimiéndole a su voz firmeza. Lo miró suplicante pero él seguía sonriendo.- Jin no se va a ir hasta que abra la maldita puerta.- Dijo con frustración, no quería verlo, pero él era demasiado insistente.

 -No me voy a esconder... No estoy haciendo nada malo.- Él se encogió de hombros.

 -Jimin...- Dijo ella de nuevo al borde del desespero, Jin no paraba de golpear la puerta.

 -Amor, ábreme.- Grito Jin desde el otro lado.

 -Si abres, él se va a dar cuenta.- Jimin dirigió la mirada hacía la puerta fugazmente y luego la miro. Ella levantó una ceja y le puso los ojos en blanco.- ¿Qué?  No me mires así.- La tomó del mentón para que lo viera pero ella volteó la cara.- Tengo razón.- Se defendió él.-Traes el pelo enredado y tienes cara de recién follada.- Dijo suavemente pero no pudo ocultar el humor en su voz. Claro que le divertía, estaba más que feliz que ella estuviera con él en ese momento y no con Jin.

 -¡Jimin!- Susurró escandalizada... Pero también estaba al borde de la risa. Le gustaba el Jimin travieso y que le decía ese tipo de cosas. Una carcajada por poco sale de su boca sonoramente. Jimin la besó rápidamente antes de que se escuchara.

 -Además Jin ha bebido.- Continuo él con su boca pegada a la de ella.

 -_________ ¡Abre la puerta! ¡JODER, QUIERO VERTE!- Jin golpeaba más fuerte. _______ llegó a pensar en que rompería en cualquier momento la madera.- ¡ABRÉ!- Jimin sonrió ampliamente mientras la miraba con intensidad.

 Eso era peligroso, prohibido... y excitante. Jimin al parecer leyó sus pensamientos porque empezó a tocarla y a incitarla con caricias íntimas, mientras su lengua se abría paso en su boca. En el pasillo se escuchó otra voz, pero _______ no podía saber quién era ni que decía.

 -Shhhh.- Puso su dedo sobre sus labios. Se separó de Jimin y agudizó su oído.

 -¡Solo quiero ver a mi novia! ¿Es eso un delito?- Jin se escuchaba irritado.- ¡_______, abre ya!

 -Hijo, cálmate.- _______ escuchó atentamente el poco sonido de aquella voz que conversaba con Jin. Fue suficiente para reconocerla... Era Haneul, su madre. Su habitación estaba a cuatro puertas de la de ella, mientras que la de Jin estaba dos pisos arriba.- _______ estaba muy cansada con lo del viaje, me pidió que le diera de mis pastillas para dormir y no se levantará hasta mañana, ni un terremoto la levantará. Tú también necesitas descansar.- Jimin soltó una risita y _______ le dio un suave codazo.

 -Auuu.- Protestó y _______ lo fulminó con la mirada.

 -Se ve que hay una luz prendida.- A pesar de que Jin estaba tomado, era muy observador, pensó amargamente Jimin. Sacó los tendidos de la cama que estaban arrugados debajo de sus cuerpos para cubrirse. Se sentó y la acunó entre sus brazos bajo las sabanas.- ¡ABRÉ _______!- Gritó a todo pulmón.

 -Que insistente.- Bufó Jimin realmente molesto, estaba por salir y callarlo. _______  sonrió. Su Jimin era todo un celoso.

 -_______ la debió dejar prendida.- Dijo tiernamente Haneul. _______ sabía lo mucho que su madre apreciaba a Jin.

El padrino de la boda (Jimin y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora