La prometida de mi primer amor [ Miku x Neru ]

Capítulo 15: Hora de remediarlo

~Narradora Neru~

Hace unos pocos días Nero me habló para algo supuestamente importante, cosa que en parte fue y pude ayudar a que se hiciera realidad gracias a la recolección de firmas, pues él quería apoyar la idea de Iroha, necesitaban tener la completa aprobación del director del instituto, así fue como los tres ideamos varias cosas para convencerlo y lo logramos, hoy es el gran día de traer mascotas y justo guardo una sorpresa muy especial que se me ocurrió.

Ahora mismo regreso del salón de mí hermano, le dejé a cargo a nuestros dos gatos, él tenía muchas ganas de presumirlos a nuestra clase.

Voy hacia la oficina del consejo para encontrarme con las chicas, al abrir la puerta me encontré con Miku volteando con algo de molestia.

— Iroha... Debiste de avisarme antes, hoy es el día de las audiciones, serán en el gimnasio.

— Senpai, no sabía que necesitaba consultar con usted también sobre la fecha, sólo avisé a Gumi porque ella es la presidente del consejo.

— Y gracias por hacerlo, niña gato, ahora mi conejito me acompaña el día de hoy.— Gumi acariciaba a su mascota que tenía sobre sus piernas.

Demonios, había olvidado el tema de las audiciones, justo eran ahora ¿Qué rayos acabo de hacer?

— Eh... Hatsune...— Reí con muchos nervios.— En realidad también ayudé con este pequeño evento, fue mi culpa por no acordarme que sería el mismo día en el que tú ya tenías planeado algo.

— Oh...— Suspiró.— Dime que no se metieron en el gimnasio por favor.

— Se programó que las mascotas se cuidarían en el patio, sin embargo no se prohibió su entrada en el gimnasio.

—... Iré a revisar.— La peli-turquesa caminó lentamente hacia la salida.

De repente noté que Iroha empezó a respirar muy agitada.

— Por poco y creí que me mataría, sé que senpai puede reaccionar de una manera bruta y no lo hizo.

— Sí... Tienes suerte de gustarle a Hatsune, sino las hubiera regañado, eso me hubiera divertido, lástima.— Mencionó Gumi.

— Senpai número dos, concuerdo con la señorita presidenta Gumi, de hecho es muy hermoso que por ti no reaccionó mal.

— ¿Gustarle? Tal vez, aunque ese término puede sonar raro, pero qué bueno que le caigo bien... Iré a seguirla y llevaré una escoba, un recogedor y muchas bolsas de plástico por si acaso.

Salí de inmediato para dirigirme al cuarto de limpieza a recoger lo que había dicho y poco después ir rápidamente al gimnasio, no creo que pueda ser tanto el desastre.

Entré y retiro lo dicho, había perros corriendo por todos lados, junto a olores no muy agradables, y ahí me encontré a Miku hablando con Ruby.

— O sea, la idea era que el equipo de soccer pudiera hacer deportes junto a nuestros perritos, no hubiéramos venido si nos hubieran avisado antes.

— Ya veo, sin embargo fue todo un imprevisto para mí.— Cruzó los brazos.

— My queen, si gustas podemos ayudar en la limpieza de una vez.