El día comenzaba en la isla, y en la casa de una eriza rosa que dormía plácidamente sobre el hombro del chico con el que estaba unida por unas esposas despertaba, tranquila y discreta abría sus ojos y lo primero que veía es un pecho color piel y unos brazos azules, subió un poco más la mirada y ahí estaba él, dormido cómodamente.
Amy se acomodaba bien en su cama para quedar más cerca de su cara y poder admirar como el chico respiraba tranquilo mientras dormía, Amy no se cansaba de mirarlo y sonreír de la alegría por tenerlo ahí a su lado.
Amy: *habla en su mente* "No me importaría quedarme para siempre encadenada contigo"
La eriza acercaba su mano libre a la cara del erizo y acariciaba suavemente cada facción de su rostro, a veces se preguntaba si era solo un raro pero emocionante sueño el que estaba viviendo desde que Tails los esposo a ambos.
Amy: "Quisiera despertarme así todos los días"
Se acercó tranquilamente al rostro del chico y le dejo un beso en las mejillas, Sonic comenzaba a moverse un poco y suspirar, luego lentamente abría los ojos encontrándose con Amy a su lado.
Sonic: Hola.
Amy: Buenos días.
Sonic: ¿Llevas mucho tiempo despierta?
Amy: Solo unos minutos nada más.
Sonic: Esta bien *se pone mirando hacia el cielo* Cielos...
Amy: ¿Qué pasa?
Sonic: *le sonríe* No había dormido tan cómodamente en mi vida.
Amy: *le sonríe también* Jeje... ¿Es un colchón muy cómodo no crees?
Sonic: *se acerca a ella* No lo decía por el colchón.
Sonic tomo la cabeza de la eriza por atrás y la atrajo hacia el para darle el beso de buenos días, tranquilo pero apasionado y durando un minuto la dejo para verla sonriendo como una niña en navidad.
Amy: *se ríe un momento y luego lo abraza subiéndose encima de él* Sonic te quiero mucho.
Sonic: *la abraza también* Lo se... Yo...
Sonic quería decirlo, pero no era la duda lo que no le dejaba decirlo, era solo la timidez y que estaba acostumbrado a ser duro y no mostrar ni mucho menos decir sus sentimientos, pero si quería decirle lo que estaba seguro de que sentía por la chica rosa.
Amy: ¿Si? *le pregunta sonriendo*
Sonic: *mira a otro lado enrojecido* Ven aquí.
La toma de las mejillas para besarla de nuevo, no duro mucho pues solo era para despertar de la mejor forma, la eriza quería escuchar lo que Sonic iba a decir, pero lo conocía lo suficiente para saber que no era de decir lo que sentía, aunque presentía muy bien lo que iba a decir y quería oírlo, no lo iba a apurar.
Amy: Vamos a desayunar, tengo hambre.
Sonic: Si está bien.
Ambos se levantaron de la cama algo forzados ya que sus cuerpos querían seguir en la posición en la que estaban, pero a duras penas se salieron de la cama, pero antes de ir a la cocina de la eriza, ella quería vestirse.
Amy: ¿Oye te importaría voltearte para poder vestirme?
Sonic: Claro, no hay problema *le da la espalda* Solo ten cuidado donde pones mi mano *se ríe un momento*
Amy: *se ríe igual* Descuida, la tendré.
La eriza sacaba su ropa de uno de los muebles de la habitación, luego se quitaba su piyama y como era de esperar, la mano de Sonic que se movía con la de ella pasaba a sentir varias partes del cuerpo de ella, solo eran unos leves roses, pero con su mano descubierta acariciando la piel tan suave de ella le hacía querer tenerla de nuevo entre sus brazos como cuando estuvieron en la ducha.
ESTÁS LEYENDO
SonamyBoom - Esposados
RomanceSonic y Amy pelean todo el tiempo porque Sonic es muy coqueto y Amy muy mandona y celosa, pero Tails los esposa para que aprendan a llevarse bien, en medio de ese transcurso ocurre algo inesperado.