Confusiones Reales (Temporada 2) (Yuri)

Un sueño

¡Holaaaa!

Bueno, quiero dedicar este capítulo a NekoNekoYael que me pidió que lo hiciera.

Me da muchísimo gusto que te esté gustando tanto como para pedir que te dedique un capítulo.

¡Espero que te guste!

ヾ(＠⌒ー⌒＠)ノ

Era imposible permanecer ahi, intentando conciliar el sueño.

La Dulce Reina, que hasta ese momento había sido la fuerte de las dos, se zafó cuidadosamente de los brazos de Marceline que la cubrían.

Silenciosamente, bajó de la improvisada cama y tomó un atuendo al azar.

Rápidamente se vistió y salió de la pequeña tienda de campaña en la que descansaba su amada.

Caminó sin rumbo durante unos minutos, perdida en sus pensamientos hasta que escuchó que alguien la llamaba.

-Bonniebel.

-¿Eh? ¿Quién es? ¿Ka-Karoe?

-Oh, Bonnie, cariño. Me has reconocido la voz- le dijo con un deje de alegría- No me has olvidado.

-Claro que no te he olvidado, Karoe. Pero déjame decirte de una vez, que no te perdonaré JAMÁS por haberte llevado a mi bebé.

-¿Cómo? ¿Qué yo me he llevado a quién? ¿Has tenido un bebé?

-No hagas como si no lo supieras, Karoe. La única persona que pudo haberse llevado a Hikari eres tú. No hay nadie en el reino, o incluso en todo Ooo que quisiera hacernos daño.

-Valla, valla. Tu rapidez para deducir cosas es increíble. Ya que lo sabes, no voy a negártelo.

-Pues que bien. Ahora dime dónde esta mi hija.

-Ohh... ¿Sólo quieres recuperar a una?

-¿Q-Qué? ¿Es cierto entonces? ¿También tienes a Mei?

-Hahaha, vaya, Bonnie. ¿Lo dudabas? ¿No era extraño que la bebe que tenía mas posibilidades, muriera?

-¡Claro que era extraño! Pero eso no importa ahora. Sólo dime en dónde las tienes -le exigió, perdiendo la paciencia- Dime dónde estan, Karoe, y tal vez te deje vivir.

-Ah, Bonnie, no necesito que me "perdones" la vida. Pero, sólo porque en verdad te quiero, te daré una pista...

-No, no, no. -le interrumpió- No me darás ninguna pista. Me vas a decir en donde tienes a mis bebés.

-Así que... No quieres una pista y yo no voy a revelarte en dónde están. Creo que nos quedaremos igual que como llegamos.

Adiós, Bonnie.

Acto seguido, la Reina despertó, bañada en sudor, con la preocupada mirada de Marceline en ella.

-¿Estás bien, cariño?

-No, Marcie. Mei no está muerta, ¡Finn tuvo razón! Karoe las tiene, soñé con ella, me iba a dar una pista pero... Ahh soy tan tonta -le explicó entre sollozos- Marcie... Soy una idiota.

-Shhh. No digas eso. Ya sabemos que ella las tiene y que está cerca de aquí.
Por la mañana, llamaremos a Finn y la atraparemos. Tranquila, princesa. La vamos a encontrar.