Una Espía Atormentada - En Proceso De Corrección

Prólogo

—Por favor, tomen asiento. —señala el Agente Bumer unas sillas delante de su escritorio—

—Nos dijeron que usted podría ayudarnos. ¿Es una agencia de guardaespaldas o del gobierno secreto? —pregunta el señor Sandoval— Tienen mucha seguridad tecnológica aquí. Sin mencionar que nos vendaron los ojos para traernos aquí.

—Bueno, eso es porque la ubicación de nuestra Agencia debe ser un secreto para los Perma... —se aclara la garganta— Disculpen, quiero decir que son personas con problemas que necesitan ser resueltos. Nuestros métodos podrian ser un poco nuevos y algo dificiles de entender, pero confíen en nosotros... —finge una sonrisa amigable— No hay nadie mejor que nosotros para resolver su mala situación actual.

—Lo entendemos, muchas gracias. —habla la señora Sandoval más tranquila—

—Pero antes que nada díganme, ¿Cómo se enteraron de nosotros y quién los trajo?

—Una chica que trabaja en mi empresa se nos acercó y nos dijo que conocía un lugar que podría ayudarnos con el problema de nuestro hijo. —responde el señor Sandoval— Tampoco se como se entero de nuestra situación...

—¿Cómo se llama?

—No nos quiso dar su nombre, solo dijo que trabajaba en el Área de Publicidad. Luego nos trajo aquí en un auto negro polarizado.

—Malcom. —llama a su asistente y él se acerca— Revise las cámaras de seguridad e identifique con quién vinieron los señores.

—Si señor. —asiente con la cabeza y se pone a revisarlo con unos visores de realidad virtual junto con unos guantes—

[Funciona como una computadora, para revisar archivos o documentos confidenciales sin correr el riesgo de que alguien más lo vea.]

—Ahora, ¿Porqué no me cuentan el problema que tiene su hijo?

—¿Son guardaespaldas?

—Somos algo mejor que eso. —sonríe ligeramente con malicia— Somos Agentes Secretos.

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Luego de unos minutos de explicación, habían llegado a un acuerdo.

—Queremos a los mejores Agentes, cabe aclarar que el dinero no es un problema. —resalta serio el señor Sandoval—

—Malcom, imprima el caso de los señores Sandoval y archive una copia de seguridad. —le indica a su asistente, quién estuvo escribiendo en su "computador" todo lo que hablaron—

—Si Agente Bumer. —se pone de pie—

—Antes de eso, ¿Averiguó con quién vinieron los señores?

—Si, ya revisé las cámaras de seguridad y confirmé su identidad. —le entrega un USB y le susurra en el oído— Fué la Agente Evans, quien se fué de misión hace tres meses.

—Mmm... —pensativo—

—¿Desea que me ponga en contacto con ella para que se reúna con usted?

—No es necesario, ha de estar ocupada protegiendo a su cliente. —habla en voz baja— Por ahora solo vaya y dígale a nuestro mejor Agente de L. F. (Linaje Femenino) que venga, le tengo un nuevo caso.

—Si Agente Bumer.

Pasados unos pocos minutos alguien toca la puerta tres veces, y sin esperar una respuesta, ingresa.

—...¿Quería verme? —pregunta Cassandra mirando al Agente Bumer—

Estaba un poco desconcertada de ver a dos humanos en su oficina, normalmente los haría esperar en la sala de al lado y le informaría en privado la misión a realizar.