《Maldito Destino》 [PAUSADA]

Capítulo 2.

-Hoy no hay luna llena hermanito - dije burlesca.

-Voy a salir a dar una vuelta por los alrededores del lago, pretendo ir a comer algo - habló en mi mente.

Lo miré de soslayo y entré rápidamente a la casa, bajé al sótano y me quité mi ropa antes de transformarme rápidamente. Salí corriendo y Rik ya estaba esperándome.

-Supongo que voy contigo -

-Tendrás que seguirme el paso - dijo antes de salir corriendo.

Le perseguí hasta que llegamos a la parte más alejada, ambos nos detuvimos y nos dedicamos cada uno a lo suyo. Luego de alimentarme de un ciervo y dos conejos me acosté a la orilla del lago esperando que Rik apareciera. Siempre habíamos planeado esto, salir a cazar convertidos en animales. Recuerdo que cuando descubrimos que podíamos transformarnos en cualquier animal probamos de todo.

-¿Perdida en tus pensamientos, Kassy? -
Giré la cabeza hacia la izquierda y pude ver a Rik llegar junto a mí para acostarse también.

-Eso creo. Pensé que este día nunca llegaría ¿Sabes? - dije mientras miraba el lago como si fuese la cosa más interesante del mundo.

-También pensé que este día no llegaría... Estaremos bien - dijo Rik antes de colocar su pata cerca de mí.

-Lo sé - dije antes de levantarme y empezar el camino hacia casa.

Cuando llegué entré al sótano y volví a mi forma humana antes de ponerme la ropa y subir a la sala. Vi a Rik entrar a la casa y bajar al sótano antes de subir ya vestido.

-Creo que es hora de elegir una habitación en esta casa, después de todo, es un nuevo comienzo para nosotros - dijo subiendo las escaleras a toda velocidad por lo que le seguí de manera casi inconsciente.

-Pido la que tiene vista al lago - dije antes de adentrarme en esa y tirarme en la cama.

-Bien, me quedo con la que tiene vista a la entrada - dijo antes de bajar por las escaleras.

Escuché como movían varias cosas en el sótano y cerraban algo.

-¿Qué haces Rik? - murmuré a sabiendas de que él me escuchaba.

-Guardo mi ropa para trasladarme al cuarto de arriba, deberías hacer lo mismo - dijo con cierta gracia en su voz.

Bufé antes de levantarme de mala gana. Cuando tuve todo en su sitio entré a la ducha que conectaba a mi cuarto con uno que se usaba para las personas que hospedábamos, me despojé de la ropa que cargaba y me adentré en la ducha. Me quedé bajo el chorro de agua esperando y luego me coloqué el shampoo y la loción. Amaba el olor a fresco que quedaba flotando a mí alrededor luego de ducharme. Salí y busqué entre la ropa algo para estar en casa. Saqué un calentador gris que me llegaba hasta bajo las rodillas y un buzo azul marino.

Estuve tentada a acostarme pero el sonido del piano era demasiado bueno como para no tomarlo en cuenta, bajé las escaleras y vi a Rik con su pijama de calentador negro largo y camiseta blanca holgada, estaba metido en la melodía ya que notó que estaba ahí cuando apoyé los brazos en la parte plana del instrumento.

-Qué bueno que bajaste - dijo antes de cesar los movimientos sobre las teclas del piano y fijó su mirada en la mía. Quería decirme algo importante, lo conocía demasiado como para no notarlo a la primera - Mañana va a llegar un amigo que acaba de convertirse hace un año, logró contactarse conmigo gracias a un hechicero que le ayudó, necesita un lugar para quedarse - explicó mi hermano.

¿Otro vampiro? No me había puesto a pensar que tal vez algún día podíamos hacer contacto con otros como nosotros. En mi mente éramos Frederik y yo, juntos por la eternidad, no me había planteado que habían más pasando por lo mismo.