SEGUNDA PARTE: PUEDES CONTAR CONMIGO

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Puedo traerte alegrías y tristezas; en la escuela creen que mi presencia es signo de inteligencia. Y me burlo de ti al abandonarte cuando más me necesitas. ¿Qué puedo ser? (respuesta al final del capítulo)

Al día siguiente, Edward se encontraba despierto y respondió con atención a las preguntas de la evaluación del Prof. Strange. Oswald estaba desayunando cuando Hugo lo interrumpió. –Sr. Cobblepot, mis exámenes revelan que su estado es recuperable y podría ser en menos tiempo del que esperaba, definitivamente, no es una actuación pero es conveniente que juzgue usted mismo su situación-

Oswald bebía un último sorbo de café, estaba de mejor humor, le sonrío complacido al Psiquiatra y calmadamente le comento -Entiendo, pero ¿es posible que tenga ideas impulsivas que resulten en un trato hostil hacia mí?, ¿cómo Lee cuando despertó?-

-No señor, su estado mental es calmado y cooperador, parece que no le perturbó el hecho de haber muerto y revivido; puede ir ahora mismo si lo desea. Está despierto- Oswald se incorporaba y sonriente tocó efusivamente el hombro derecho de Strange –¡bien hecho, sabía que podía lograrlo profesor!- Strange miraba a Oswald tratando de corresponder la sonrisa -Espero que mi disposición de servicio sea recordada en el futuro- Oswald se detuvo en seco por un segundo, Strange temía que hubiese caído en un exceso de confianza pero el Pingüino simplemente se giró para verlo, revelando todavía, una sonrisa en su cara –¡Por supuesto!-  y continuó su camino hacia la habitación de Edward.

Ed estaba recostado en la cama, aún con su torso desnudo, pues apenas le habían indicado a la enfermera que retirara los electrodos de su pecho. Estaba examinando la cicatriz en su abdomen cuando Oswald entró en la habitación –Buen día dormilón, ¿Cómo te sientes?- le dijo con una sonrisa en sus labios; Ed lo miraba asombrado porque estaba seguro de haber empleado esa frase en otra circunstancia, le tomó unos segundos recordar el contexto en el que se desarrolló esa escena pero en lo que rememoraba, su rostro se había encargado de corresponder a la sonrisa de Oswald.

-Oswald, me siento mucho mejor, gracias por preguntar- le decía mientras hacía un ademán con las manos para invitarlo a sentarse a su lado. Oswald caminó hacia su cama pero no se sentó en el espacio que Ed acababa de dejar para él en el colchón, sino que prefirió conservar su distancia permaneciendo en el sofá en el que otras noches había estado observándolo con la seguridad de que Edward no se enteraría de ello. 

El Pingüino le miraba distraídamente el tórax y el abdomen por unos milisegundos hasta que le pareció notar que Ed se percataba de su mirada por lo que rápidamente le pregunto –Ed... ¿Qué es lo que recuerdas?, ¿no hay nada que quieras reprocharme?- Ed se sentía confundido, estaba feliz de que Oswald estuviera con él; lo admiraba tanto y tenía el deseo de aprender lo más que pudiera de él. No tenía en mente nada que pudiese fomentar su disgusto por el pelinegro.  Miró hacia el techo tratando de pensar en una posible razón que justificara la pregunta de su amigo pero sonrío y le miro a los ojos –No... ¿debería?-

Oswald lo miraba con recelo, pretendiendo analizar cada gesto de su lenguaje no verbal ante la pregunta que le formularía -¿Recuerdas a Lee?- Ed cambió su expresión sonriente por una de disgusto y cuando habló, su voz revelaba el resentimiento que le tenía -Si... recuerdo a la Dra. Thompkins, la Reyna de los Narrows- Se burló exagerando con sus manos la expresión de quien hace una reverencia. –también recuerdo que tú me advertiste que solamente me estaba utilizando...- cerró la boca por un momento y miró a Oswald apretando sus labios para después dejar de sostenerle la mirada y enfocarla en sus puños apretados sobre la cama –Siento mucho no haberte hecho caso, estoy muy apenado contigo... y mírame ahora, ¡literalmente morí por ella!- Edward ahora señalaba la cicatriz en su abdomen y cerraba sus ojos suspirando con pesar. - ¡Que estúpido!- dijo con reproche para sí mismo golpeándose la frente con una de sus palmas.

NYGMOBBLEPOT EN TIERRA DE NADIEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora