REDEMTION

CAPÍTULO 11 "AMENAZA"

Estoy en el elevador, llevo las sábanas conmigo totalmente enrolladas y con ellas la virginidad de Mikasa...

Tsk... perdí el control de nuevo, yo... realmente estoy mal.

La puerta abrió y salí, tengo que pasar enfrente de recepción por desgracia... pero ese no iba a ser mi mayor problema. Escuche una voz familiar.

No puede ser. ¿A qué diablos vino?

-Lo siento, no estoy autorizada para dar información del personal.
-Somos amigos. ¿Podría responderme al menos la última pregunta?
-Uff Levi no sale con nadie.
-Uhmm ya veo. ¿Y no sabe desde cuándo?
-Yo diría que desde siempre pero por favor esos datos son muy personales, le digo que salga ahora mismo o llamaré a seguridad.
-Ay perdón.

¿Esperar o quedarme aquí?

-Hey Levi hasta que te veo.

Estúpida Hange.

-¿Eh? ¿No dijo que Levi no estaba?
-Pues... ya llegó.
-¿A dónde llevas todo eso?
-Que te importa.
-Levi, Levi, Levi....
-Oh no sabía que tenías novia.
-¿No tienes trabajo que hacer?
-Ah que amargado, me voy.

Petra llegó hasta mí y comenzó a molestar.

-Uff estaba por irme.
-¿A qué veniste?
-Levi... sé que iniciamos mal las cosas pero quiero ganarme tu afecto, en verdad, sin embargo no sé mucho de ti y quería invitarte a salir... vine porque no tengo tu número o dirección... sólo recordé que dijiste que trabajas aquí.
-Deja de seguirme, es molesto.
-Perdóname... debía hacerlo.
-Da igual pero ya vete, mi jefe puede llegar.
-¿Me acompañas a la entrada?
-Da igual, ven.

Ya casi logro sacarla... sólo espero que no pase nada en recepción.

-Oye Levi, el paciente de la sección B, no está medicado aún.
-Sí, lo siento, me tiró las pastillas cuando intenté dárselas.
-Ya veo, sigue intentando y por cierto ¿A dónde llevas eso?
-Está sucio por eso lo lavare y respecto a los medicamentos dile a Mike que me preparé otra dosis.
-Está bien, descuida Levi, después de eso ya puedes tomar tu hora libre.
-Gracias Nanaba.

Ella tomó el teléfono y llamó, mientras yo llevaba a Petra a la puerta.

-Oh espera Levi...
-¿Sí?
-¿Tambien quieres dosis para Mikasa?

Me quedé helado... Petra no es tan tonta para no relacionar su nombre.

-¿Eh? No.
-Está bien, ya me encargo.

Salimos del hospital y de inmediato me cuestionó sobre lo anterior.

-Nunca había escuchado ese nombre, excepto por ti ese día... esto sólo me hace pensar una cosa. ¿Levi estás enamorado de una de las locas de este manicomio?
-¡No es nada de eso!
-No me tomes el pelo, escuché bien y ahora quiero una explicación.
-No debo darte explicaciones a ti.
-Desde ahora si.... o hablaré de tu amada Mikasa.
-Cierra la boca. ¿Quieres?
-No, Levi... mejor bésame, esa enferma nunca va a salir de aquí pero mírame a mí...
-¿Qué?
-Para hacerlo divertido, desde ahora en adelante harás lo que yo te pida, sin excusas, ni pretextos...
-Eres rara mujer.
-Sé que esto sólo es el inicio para nosotros.
-Sólo en tu cabeza, ahora déjame ir.
-Lo dije todo enserio... decir que sales con tu propia paciente te dejará muy mal ante la ley pero podría olvidarlo si aceptas salir conmigo hoy.
-Tsk... está bien.
-No puedes borrar lo que escuché así que ahora hazme caso y olvidaré lo que ví y escuche hoy, estás mal Levi, muy mal.
-Guarda silencio, sólo dime en donde te veo.
-En mi casa, obviamente
-Tsk.
-Te esperaré ansiosa.

Maldita Petra me estaba buscando y ahora que le di el momento exacto para vengarse de mí, lo hará. ¿Por qué tuvo que pasarme esto a mí? No... puede ser que arruine todo... la odio... no sé que hacer.

No puedo tener ni un sólo día tranquilo, aquí. Ahora no sé qué me espera según la amenaza de Petra, maldición.