Cuando sé que estás dormida.

Capítulo 19.

"Buenos días. Tenemos algo pendiente."

Alicia sonríe al abrir los ojos y leer el mensaje de Álvaro. Adora a ese chico. Y la excita muchísimo. Le encantaba la simple idea de tener sexo oral con él, pero también le daba miedo. No quería decepcionarle, estaba segura de que Álvaro ya había hecho todo eso antes con chicas mucho mejores que ella.

Se levanta de la cama y le responde a Álvaro proponiéndole verse esa misma tarde. Después llama a Carlos para preguntarle qué tal la noche, pero no es Carlos quien descuelga.

-¿Alicia? -Se oye al otro lado del teléfono. -Carlos no está, soy Javi.

-¿Dónde está Carlos?

-Está en la cama... Con mi hermano.

-Ah, vale vale. Dile que me llame en cuanto pueda.

-Espera. -Javi detiene a Alicia antes de que cuelgue. -Me gustaría hablar contigo. Sé que anoche no lo hice bien, pero creo que podríamos ser buenos amigos. ¿Un café esta tarde?

-He quedado con mi novio. -Dijo Alicia cortante.

-¿Mañana? 

-Está bien. -Alicia suspira. -Pero no intentes nada raro, ¿de acuerdo?

-Genial, hasta mañana. 

Alicia se levanta y toma una ducha. Es domingo, el único día que no está sola en casa, así que come con sus padres y pasan un rato charlando. Su madre le pregunta por Álvaro y le propone invitarle algún día a comer para conocerle. Por supuesto Alicia se niega en rotundo, se moriría de vergüenza.

Después de comer vuelve a su habitación y ve que tiene unas llamadas perdidas de Álvaro.

-¡Hola cariño! -Dice Álvaro al descolgar el teléfono.

-¿Que querías? -Dice Alicia.

-Decirte que te quiero. 

-¿Para eso me llamas? 

-Se supone que somos nosotros los que no somos románticos, ¿quién es el chico aquí?

Alicia ríe.

-Perdona. Te quiero mucho.

-Así mejor. -Álvaro ríe y Alicia se estremece al oír su risa. -Han venido unos amigos de visita, y he pensado que podríamos salir los cuatro mañana a cenar.

-Pero al día siguiente hay instituto... 

-No acabaremos tarde, lo prometo. 

-Está bien. ¿Nos vemos más tarde? 

-Eso era otra de las cosas que te quería decir. Ha venido mi madre a casa a comer, así que nuestro asunto pendiente tendrá que esperar.

-Tranquilo, si será por tiempo.

Un rato después ambos se despiden y Alicia se queda leyendo en su habitación hasta que su madre la avisa de que tiene visita. Es Carlos.

Los chicos pasan la tarde hablando. Carlos le cuenta a Alicia todo lo que le han regalado, qué tal fue la fiesta y que anoche fue su primera vez con Blas.

Mientras hablaban, el teléfono de Alicia sonó, pero se trataba de un número oculto. No sabía muy bien si responder o no, así que siguió el consejo de Carlos y lo dejó sonar.

Pero por la noche, antes de irse a dormir, volvieron a llamarla. Alicia decide descolgar esta vez.

-¿Sí?

-¿Tú eres la que se está follando a Álvaro?

-¿Qué? -Alicia se quedó paralizada. Era una voz de mujer, tendría unos ventidós años.

-Vamos niñata. Como no lo dejes en paz vamos a acabar muy mal.

Alicia colgó asustada y apagó el teléfono. Decidió ignorar aquella llamada y se quedó dormida un rato después de meterse en la cama.