-Pero entiende que no es lo mismo que siento contigo... Cuando tú me besas ya no importa nada más, solo quiero tenerte, no quiero despegarme de ti...- se fue acercando poco a poco a mí.- enserio, yo Te amo.
Y lo dijo con tanta sinceridad que me quede helada.
Cuando lo mire a los ojos se me fueron las palabras, ambos estábamos deseando lo mismo, nos comían las ganas de estar juntos.
Sin previo aviso me lance a él y comenzó el juego.
El me tomo de la cintura y siguió aquel beso, lo estaba besando como nunca lo había hecho.
Introdujo su lengua en mi boca y comenzamos a intercambiar saliva, nuestras lenguas se buscaban entre sí, chocaban y era tan delicioso.
James me cargo a la altura de su abdomen, instintivamente enrolle las piernas alrededor de él, me sentó en una barda...
Seguíamos besándonos, y el comenzaba a acariciar mi pierna, metiendo suavemente su mano por debajo de mi falda.
Este momento se comenzaba a tornar salvaje.
Yo lo tomaba de la cabeza, como pidiéndole que no se despegara de mí.
James comenzó a desabrochar mi sweater, cuando lo dejo caer decidí parar...
-Espera- lo aleje de mí. - esto es demasiado- me baje de aquella barda y recogí la prenda.
-Tienes razón, aquí no podemos hacer nada.
-Ni aquí, ni en ningún otro lugar.- hablaba mientras acomodaba mi atuendo.
-Sabes que lo deseas igual que yo, deseas estar conmigo...
-Talvez pero yo no soy plato de segunda mesa- Trate de caminar pero él me tomo del brazo.
-¿De que estas hablando? Yo no estoy saliendo con nadie.
-¿Y Jessica? ¿Qué es de ti?
-Jessica no es nada entiéndelo...Si, sé que me has visto con ella, pero yo no estoy buscando nada.
-Pues lo siento pero yo creí que eran novios y gracias a eso yo ya estoy comprometida...-trataba de soltarme de el pero me tenía pegada a su cuerpo.
-No hables como si te fueras a casar, es algo que puedes romper y vamos a ser felices juntos- comenzaba a sonreír y a acercarse a mi rostro.
Comenzó a besarme tiernamente.
A mi también me encantaba cuando me besaba, nunca había sentido algo semejante. Yo seguía el beso pero por dentro sabía que estaba haciendo mal, muy mal.
-Dije que basta- me despegue y agache la cabeza.
-¿Y porque sigues mis besos Zierold?-se mordía los labios y a la vez sonreía
Comencé a sonrojarme y a ponerme nerviosa.
-Me voy de aquí.- di media vuelta y me fui acomodando la falda.
(...)
Llegue al salón y cuando entre todos me miraron muy extraños.
Me senté a un lado de Logan.
-¿Que te dijo el director Maslow?- dijo en forma de broma.
-¡Shhhh! Cállate.
Solo comenzó a reír y seguimos la clase.
(...)
En la salida me percaté de que Amanda me estaba esperando. Corrí rápido al auto y abrí la puerta.
-Hola.- dije agitada, aún estaba pensando en lo que sucedió.
Amanda estaba retocando su maquillaje, guardo el rímel para mirarme.
-¿Que estas tramando? ¿Porque estas tan asustada?
-Nada... por favor ni siquiera estoy asustada.
Pasaron unos minutos en silencio y ella solo me miraba desconcertada.
Deje caer la cabeza sobre el tablero del auto y comencé a hablar.
-Amanda, me siento como una zorra.
-¿Qué hiciste?- abrió los ojos más de lo normal.