¿Ash tiene un fetiche por los pezones?
Que raro suena eso, pero en esta historia muchas cosas pueden pasar.
Anécdotas contadas por nuestros dos personajes favoritos de Banana Fish.
Algo de drama y mucha comedia.
Disfrútenlo!
-¡¡¡No me jodas!!! ¡¡¡do not fuck with me!!!-Gritó Ash, soltando pequeñas y míseras lágrimas.
-¿Nani?-Dijo Eiji, volteando su cabeza a exactamente 90 grados.
Inmediatamente el japonés paró de agarrar al rubio del rubio, y se puso rojo como tomate.
-Sign ... ¿Qué tal?... ¿Cómo te va la vida en China?-Dijo el pelinegro estúpidamente.
-Idiota, estamos en Nueva York.-Dijo un poco enojado Ash, dándole un pequeño golpe en la cabeza.
-¿Qué se supone que hacían?-Dijo Sign muy nervioso. Era la misma sensación de un pequeño niño, viendo a sus padres jugando "Twister"
Ash estaba atontado, era el jefe de una pandilla, quizás de la más poderosa de Nueva York. Y tenía a otro jefe frente a frente, en las mismas condiciones físicas. Ambos estaban duros. ¡Ajá, victoria!
-La pregunta aquí es, ¿Por qué estás así, come mocos? ¿Acaso te excito lo que hizo Eiji?-Preguntó Ash, muy astutamente.
-Sí-respondió Sign a la velocidad de la luz, el tono de su voz había cambiado por completo - Y no te lo voy a negar.
Eiji ya no estaba rojo, estaba azul, como si le quitarán la respiración.
-¡Únete!-Dijo el rubio muy alegremente.
-Ok, está bien.
-¡Alto!, ¿Qué van a hacer? .... ¿Por qué hace las cosas sin pensar?.-Dijo el japonés.
-Ambos son asiáticos, así que probaremos las manos chinas y japonesas. ¡Un concurso!-Ash dijo muy ansioso.
Eiji estaba demasiado excitado, tanto que la vergüenza se le fue por completo,le pareció interesante el juego.
-Ya que Eiji se encuentra con el torso desnudo, ¿por qué yo no?-Dijo Sign, sacándose la casaca azul y después su polo. Lo hizo lentamente, para que Ash lo apreciara.
-Sácate los guantes, lastimarás al rubio- Eiji advirtió a Sign.
-No puedo lastimar a Ash con mis guantes.-dijo Sign algo confundido.
-¡Ese rubio no!, ¡Ese!-Alzó la voz el japonés, señalando el pene erecto de Ash.- Ash es mi calabacín.
-¡Ok, que empiece el juego! -Dijo emocionado Ash.
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