FIN

1.3K 120 21
                                    

Si bien saben, "MÍ CALABACÍN" es una historia que guarda algunas anécdotas de nuestros personajes, así que esta parte es el final de una.

-----------------------------------------------------

-Yo también, ¿Empezamos?.

- Claro mi calabacín, quiero tu llave dorada en mi cerradura.

-Oni-chan, eres todo un loquillo.-Ash estaba mostrando una sonrisa depravada.

-Mi calabacín, qué tal si nos vamos a nuestra habitación.
El baño me incómoda.

-Ok, ¿Puedes levantarme?.-Eiji cogió de los brazos a Ash y lo levantó, ambos salieron del baño que olía a semen.

Para dirigirse a su cómodo cuarto.

-Parece que recuperaste fuerzas, me alegra- Sonrió el japonés.

-Sí, pero todavía tengo mucha energía guardada.
Y tú eres mi motivo.

Llegaron a su cuarto y lo cerraron con llave.
Las ventanas fueron cubiertas por algunas sábanas.

Y ambos empezaron a desvestirse.

-Es mi primera vez-dijo Ash, algo avergonzado.

-Si lo sé, siempre eras la cerradura. -Eiji mencionó con pena.

Ash, empezó a lagrimear al recordar aquellos oscuros y macabros momentos.

-Mi calabacín, no llores.
Este momento es único y digno, tu y yo hemos nacido para estar y vivir juntos.
Ahora realizaremos algo que demuestra nuestra pasión y el amor que nos tenemos.

Nos sabes lo mucho que te amo, mi calabacín.-

Ash, ante tal hermosa y cariñosa confesión, se dejó llevar por el momentos.

Iba a mencionar las dos palabras que nunca nadie le había dicho o alguna vez confesado.
Ese ser tan pequeño y tierno, le movió el corazón y lo hizo latir de nuevo.

- Te amo.- Dijo el rubio directamente al japonés que empezó a ruborizarse también.

Se besaron y se dejaron caer en el ambiente.

Ambos se recostaron en la cómoda cama y el rubio empezó a ponerse muy ansioso.

-Eiji, tengo miedo.

-Ash, ten seguridad y ten en cuenta que te quiero, que te quiero adentro.

-Oni-chan, eres muy pervertido.

Aquellas palabras de Eiji, le dieron más confianza a Ash.

Se encontraban en una posición muy peculiar, el rubio sudaba frío.

Pero, al ver tan majestuoso cuerpo del japonés, no lo dudó y la metió.

-Ah.. mierda.. está tan apretado.
-Ash, se sentía muy excitado.

Eiji, pensó que hubiera sido mejor con lubricante y condón, pero no tenía ninguno de los dos. Estaba llorando, le ardía a montones, era su primera vez.

El rubio del rubio conoció la cueva japonés y nunca se había sentido tan asfixiado.

-Ash, me duele.

-Eiji, tanto que me insistias, no quiero que te arrepientes.
¡Toma!- Ash empezó a sacarlo y meterlo, ahora con mayor facilidad,el japonés se estaba arrepintiendo cada segundo de su provocación.

No sabía que la tuviera tan grande, otra vez.

Ash, no controló sus impulsos y presionó más la cerradura de Eiji, que poco a poco fue cediendo a su llave.

Al cabo de segundos, Eiji de acostumbró y empezó a disfrutarlo.

-Diablos, se siente tan bien...-mencionó Eiji en pleno acto.

-Eiji, a qué no sabías que me sé todas las poses de la Kamasutra.

-Ahh...ah.. kkamasu..tra?

-Joder, ahora verás a lo que me refiero.

Ash empezó a cambiar de posición con Eiji sin despegarse de él.

-Esta es una de mis favoritas.

Ash, estaba encima de Eiji, viendo así el sudoroso y sonrojado rostro del japonés.

-Esto.. ess.. demasia..do.-Eiji se sentía demasiado exaltado, comenzó a ver todo de cabeza.

-Eiji, enserio me encantas.
Así que por ti, aumentaré la velocidad.

-Ahh..ah.. Aún.. ttti..ene..es .. más?.

-Me sobra, ya verás.

-Mi calabacín, ya no puedo.

-Eiji, parece que tú cerradura dice lo contrario.
Se abre con facilidad ante mi llave dorada de oro fino.

-Ah..Ash.. sigue sigue-El uke japonés, empezó a agarrar fuertemente la sábana que era negra.

-Eiji... Te quiero seguir dando.. espero que tengas para la segunda vuelta.

-Ahh.. ahh.. ¿Qué..?-Eiji estaba en otro universo llamado el hermoso torso de el chico calabazas.

Eiji se quedó perplejo ante lo que veía, ese torso estaba tallado por los mismísimos dioses de Grecia.

-Ah.. Eiji, creo que me vengo.

-Ashu... Déjalo todo adentro.

En aquel momento de clímax, no podía pasar absolutamente nada que pudiera arruinar el momento, todo estaba fríamente calculado.

Ambos se miraron y se mordieron los labios al mismo tiempo, pero, pasó lo que ninguna fujoshi, quiere en su momento de hard zukulentho.

Estallaron las ventanas y se desplomaron en el suelo, todo los vidrios felizmente no cayeron sobre ellos.

Fueron cinco disparos que intraquilizaron a Ash y Eiji.

Parece que empezó un ataque.

Pero, a eso los jóvenes le valió.
Y seguían, hasta que la llave libere su oxido.

-Eiji, estoy a punto de.. -El rubio no pudo contenerse y soltó su semen dentro del Eiji, quién se encontraba sin aliento.

Ambos respiraban exaltados.

Y volvieron en sí, observaron desde su ventaja al Yut Lung con Blanca, mirandolos desde un retrovisor, ambos estaban rojos como un tómate, al ver a Ash y Eiji a punto de terminar.

Ash, solo sonrió quisquilloso y le sacó el dedo del medio a ambos.

Ash, solo sonrió quisquilloso y le sacó el dedo del medio a ambos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


MI CALABACÍN [BF]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora