Por fin, por fin había llegado el gran día, el viaje escolar al bosque ya había llegado luego del primer semestre difícil, en especial para el rubio que tuvo que explicar muchas cosas, como que Mei era una amiga de la infancia con la cual siempre jugaba, y claro que el supuesto beso que le dio a Momo fue en la frente y no en los labios, y que ese día del ataque iba a tener una reunión con Yu y Mei para hablar como lo solían hacer de pequeños.
Con el rumor de que Naruto no estaba en un relación formal, y quien dio el beso fue Mei, quien claro declaro que aunque no eran novios, ella no se iba a rendir. Y con eso declaro la guerra a todas aquellas chicas que estaban interesadas en el shinobi, y como estaba libre eso significaba que todas tenían las de perder o ganar. Pero bueno, eso realmente era algo que poco le importaba a Naruto, grave error sin duda alguna.
Pero volviendo al presente, todos los estudiantes de la clas estaban en el parqueo de la academia, preparándose para subir a los buses, todo tranquilo hasta ahora sino fuera porque todos los chicos miraban a una bella diosa, una hermosa mujer de cabellera blanca larga que casi rozaba con el suelo, bellos ojos perlados y una piel de porcelana, esa no era otra más que Kaguya, quien usaba una camisa blanca ajustada que dejaba a la vista sus grandes pechos, además de llevar una pantaloneta café ajustada remarcando su figura más que perfecta, además de llevar sandalias ninjas similares a tacones. (Como las de Tsunade).
Todos los chicos miraban embobados a la peliblanca, era demasiado hermosa, y se preguntaran ¿Por qué Kaguya está allí? Y la respuesta es sencilla. Al parecer a los maestros les pareció buena idea contratar por una semana a la diosa, una semana para que entrenara a todos esos chicos de la clase A que perdieron ante Naruto, claro que al principio el rubio se negó y le dijo a la diosa que rechazara, pero luego le dijeron a la peliblanca que le pagarían mucho dinero, algo que realmente no necesitaban, pero la diosa acepto, así que con eso dicho, el Uzumaki solo acepto eso, y ahora tenía que soportar ver como todos esos chicos miraban con lujuria a la diosa que se encontraba junto al pelinegro, incluso el siempre serio y aburrido de Aizawa miraba de vez en cuando a la madre de su alumno, pero ella no era la única que los acompañaba, ya que Midnight se unió al viaje porque supuestamente ella era la tutora legal del rubio cuando estaba en la escuela, e incluso ella debía admitir que la mujer era bella.
—La madre de Uzumaki-kun llama mucho la atención— comento Uraraka.
—Sí, demasiado— dijeron todas las chicas con celos al ver el cuerpo de la mujer.
—Vaya, pero que tenemos aquí, pero si son los débiles de la clase A, oigan. Escuche que muchos de ustedes perdieron y ahora necesitan tomar clases suplementarios ¿Es eso verdad? ¡¿Acaso la clase A no era mejor que la B?! ¡¿No eran ustedes los más fuertes?! — dijo Monoma apareciendo de repente mientras miraba a todos los chicos de la clase A, Kendo apareció al lado del chico para darle un golpe en la cabeza dejándolo inconsciente.
—Lo siento por eso chicos, hablare más tarde con él— dijo la pelinaranja con una sonrisa de disculpa.
—No, no te preocupes por eso, ya estamos acostumbrados— dijo Momo tratando de no tener alguna pelea con el resto de chicos de la clase B.
—No se preocupen, no le hagan caso a Monoma— dijo una de las chicas de la clase B.
—Bien, muchas cosas sucedieron en el festival deportivo, de cualquier forma, felicidades equipo A— dijo otra chica de la clase B de cabellera negra con una gran sonrisa, quien de cierta manera se parecía a Aizawa.
—Ustedes también hicieron un buen trabajo, lograron darle pelea a unos cuantos de nosotros— dijo el rubio uniéndose a la conversación con serenidad.
—Naruto-san tiene razón, todos ustedes también dieron lo mejor de sí, y algunos de nosotros tuvimos problemas— apoyo Momo con una sonrisa, al momento que todas las chicas de la clase A se sorprendían porque la pelinegra llamo por su nombre de pila al oji-azul.
