Superhumans

Capítulo 23

Capítulo 23

En casa de Rachel, esta puso la televisión.

- Creo que debemos irnos, y dejar a Aarón descansar –Dijo Sam.

- Podéis quedaros si queréis, hay sitio –Dijo Rachel.

- No, tranquila –Dijo Connor-. Tenemos donde ir. No queremos molestar

- No molestáis, en serio –Dijo Rachel.

- Te llamaré ¿vale, peque? –Dijo Sam a Aarón, antes de darle un gran abrazo.

- Le cazaremos, te lo juro –Dijo Connor a Aarón, antes de darle un beso en la cabeza.

En ese momento, la pareja salió por la puerta. Rachel miró a Aarón.

- ¿Quieres que te prepare algo de comer? –Preguntó Rachel.

Pero Aarón no contestó, puesto que algo en el televisor captó su atención.

- Gracias a un chivatazo anónimo, las autoridades han recibido la ubicación de uno de los Superhumanos más buscados –Dijo el presentador del telediario-. En breves sabremos más sobre la operación que están realizando para capturar a Joel.

- ¿Qué? ¿Vienen hacia aquí? –Preguntó Aarón.

- Dios mío, tenéis que iros de aquí –Dijo Rachel.

Rachel entró corriendo en el cuarto, y despertó a Joel para que se vistiera corriendo.

- No quiero correr más –Dijo Aarón para sí mismo en el salón-. Estoy harto. No tengo superpoderes, pero voy a luchar con la misma fuerza que como si los tuviera...

En el hospital, Alex se encontraba en la habitación de Oliver, al cual le estaban atendiendo un par de enfermeras, entonces Alex aprovechó la oportunidad para salir un momento del cuarto.

- Tengo que avisar de esto –Se dijo Alex para sí mismo-. Pero ¿a quién aviso? Solo tengo el teléfono de Derek, Lydia y Dylan. Como que Derek no, odia a los amigos de Joel. Y Lydia...nunca me he llevado demasiado bien con ella, ni ha tenido relación con Oliver. Pues llamaré a Dylan, lo mismo él puede contactar con Paige y Joel.

Alex marcó el número de Dylan, y esperó a que este lo cogiera.

- ¿Sí? ¿Alex? –Preguntó Dylan al otro lado del teléfono.

- Sí, soy yo –Contestó Alex-. Dylan...Oliver ha despertado del coma. Avisa a sus amigos.

Al otro lado del teléfono, Dylan se quedaba boquiabierto, y colgó sin darse cuenta.

- Ey ¿qué te pasa? –Preguntó Paige preocupada.

- Oliver...ha despertado.

Paige se quedó callada, no supo qué decir.

- Eh, vosotros –Dijo un hombre que pasaba por allí-. Sois esos monstruos de la tele a que sí.

- No sé de qué habla, señor –Dijo Paige intentando disimular.

- Sí, son ellos, les reconozco muy bien –Dijo otra señora que por allí pasaba.

De pronto, un montón de personas hicieron un corrillo alrededor de los dos, sin dejarlos a donde ir.

- ¿Qué pretenden hacer? –Preguntó Dylan.

- Lo que la policía no es capaz de hacer, por lo inútiles que son –Dijo un hombre-. Capturaros.

- Mejor mándemelos al otro barrio –Dijo un anciano agitando su garrota-. Así se acabarán los problemas en esta ciudad.

Dylan se alejó de Paige e incendió sus brazos.