One-shots anime

Ojos Azules ||Yato||

Siempre me cruzaba con aquellos ojos azules, pero siempre al voltearme a buscar a su portador, no había nadie, muchas veces me di por loca.

Es que eran tan raros y atrayentes, sentía como una calidez en mi pecho, muy difícil de explicar, cada vez que los veía me nacía una necesidad intensa de ir tras ellos, pero al momento de voltear y ver que no existían, aquella sensación también desaparecía. Era como si una chispa o un mecanismo se activará y algo muy importante se relacionará con ellos.

Algo que necesito recordar, no, lo debería de recordar , yo lo se, no estoy loca, mi cuerpo sabe que los necesita, pero al momento de que volteó todo esos sentimientos desaparecen como aquellos ojos.

En algunos momentos no me acuerdo de lo que había echo unos años atrás, no me cuerdo de cosas sucedidas en meses enteros. Aunque no le doy muchas vueltas al asunto, será que fueron cosas sin importancia.

Aveces doy vueltas por mi habitación, acariciendo con mi dedos muchos objetos que no se como llegaron al lugar. Los más destacados son un par de muñecos que se posan en mi cama, tienen un olor característicamente dulce y me encanta dormir abrazados a ellos, me transmiten una sensación muy agradable.

(......)

Después de despedirme de mis amigas seguí mi camino con normalidad.

Varias personas transitaban a esta hora. No tenía prisa caminaba a mi ritmo.

Sentí mis manos muy frías y comencé a estornudar, maldeci por no hacerle caso a mi mamá y no traer una bufanda, tampoco un buen abrigo. Camine más rápido a casa, necesitaba llegar mas rápido, veía a varios lados mientras caminaba en la misma dirección.

Mis ojos por instinto se posaron en un joven que no estaba muy lejos de mi, vestua un chandal de color negro; también usaba un viejo pañuelo celeste claro alrededor del cuello y lleva un par de botas color marrón que le cubren hasta las rodillas. Mis ojos por una extraña razón no podía parar de verlo y yo no podía parar de pensar en quien era, porque se ma hacia extrañamente familiar y a la vez totalmente desconocido. Cada vez estaba más cerca de él, me sentía una total acosadora.

Al poco tiempo me di cuenta que lo estaba siguiendo totalmente, ya me había salido del camino que me llevaba a mi casa ahora solo lo seguía, no podía parar necesitaba repuesta, agarré con más fuerza mi maleta y seguí detrás de él, empecé a notar que las personas disminuía, era cuestión de tiempo para que me descubriera. Los nervios empezaron a aumentar, pero no podía detenerme, no ahora.

Lo seguí asta un parque con muy pocas personas, "Que bonito parque, esta muy cerca de mi casa, me pregunto porque nunca había venido" en ese pequeño momento donde me distraía con aquel lago, el chico se detuvo y yo choque con el.

Los colores empezaron a subir por mi rostr, me sentía muy avergonzada, además de seguiré también me tropiezo con el.

-L-lo si-siento.- Apenas pude balbucear por los nervios mientras me inclinaba y sentía todos los colores subir por mi rostro.

-Descuida.- Dijo mientras reía. Su voz, su voz yo la conozco.

Subí mi rostro avergonzada, y me tope con aquellos ojos azules, que veían directamente mi alma, quede perpleja, estática, procesando todo, con mi boca ligeramente abierta por el asombro. Son ellos, son aquellos ojos azules.

Su mirada clavada en mi mientras sonreía, reflejaba, ¿nostalgia? ¿tristeza? "¿Qué clase de mirada es esa para un desconocido?"  Una ligera brisa corrió por el lugar, parecía congelada la escena. Su puño estaba cerrado con fuerza mientras yo apretaba mi maletín de la misma forma.

"¿Por qué me siento así?"

"¿Por qué me duele el pecho?"

"¿Por qué me pican los ojos?"

"¿Por qué tengo tantas ganas de abrazarlo?"

"¿Por qué mi cuerpo lo conoce pero mi mente no se acuerda"?

"¿Por qué mi cuerpo reaccionó y mi mente sigue estática?"

"¿Por qué no me aparta?"

"Soy una desconocida"

"Yo no lo conozco, el no me conoce, porque nos estamos abrazando como si nuestras vidas dependiera de ellos"

Yo me mantenía aferrada a su cuello mientras me abrazaba por debajo de mi hombros.

Cerraba con fuerza mis ojos, deseando recordar, quería recordar, necesitaba recordar. Ya no podía mas algunas lágrimas bajaron por mis mejillas, estar así con el era una combinación de emociones, sentía tanta felicidad, pero a la vez me sentía tan miserable, no podía recordarlo.

Y sin más un pequeño estornudo se me escapo. Literalmente estaba congelada.

-Estas muy caliente.- Dijo el en un susurro mientras tocaba mi frente.

-Por favor, ¿Quién eres y por qué me haces tanta falta?- Dije mientras agarraba sus manos desesperada, un adorable sonrojo se colo en sus mejillas. Hay fue cuando mi cuerpo sin ninguna explicación dejo de responderme, mi cabeza comenzó a dar vueltas, no ahora no, la agarre con fuerza mientras lo veía a el con angustia.

-Oscuridad-