Capítulo 9.

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La noche era oscura y fría, aquel presentimiento de que nada saldría bien llenaba cada rincón de la ciudad, más callada y vacía de lo normal

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La noche era oscura y fría, aquel presentimiento de que nada saldría bien llenaba cada rincón de la ciudad, más callada y vacía de lo normal. La gente parecía notar cuando las noches eran un vivo ejemplo de la oscuridad en su totalidad. Pero éran jóvenes, a los jóvenes no les importaba.

Todos los adolescentes salían, más aún después de las doce en busca de diversión en la noche jóven como sus cuerpos, pero su diversión era distinta a la de cualquiera, no inocente como la de un niño o responsable como la de un adulto, les gustaba aquél sentimiento de que algo malo podría pasar, esa adrenalina que corría por sus venas cuando estaba cerca, el peligro.

El peligro era la más dulce diversión para los adolescentes que recorrían las oscuras calles en la noche de Halloween, una infantil tradición para algunos en la que intercambiaban dulces, una noche de travesuras para los adolescentes imprudentes y rebeldes y la libertad para los demonios ansiosos por robar cuerpos y devorar almas. Una noche de locura, aún más para los amantes del satanismo que buscaban gatos negros para entregarlos como ofrendas a su preciado rey, o peor aún, niños y jóvenes que caían en sus trampas y jamás se volvía a saber de ellos.

Taehyung era diferente del resto, no creía nada de esas cosas, para él eran cuentos contados por abuelos para asustar a sus nietos. Prefería quedarse en su casa disfrutando de las típicas maratones de Halloween en los distintos canales de televisión, acompañado de dulces o palomitas.

Pero esa noche de Halloween, jueves, 31 de octubre de 1991 sería distinta para él.

Su madre y padrastro habían salido a una fiesta de Halloween mientras que la casa era toda suya, disfrutaba de estar sólo, para Taehyung no era un problema, al principio. Mientras miraba la película de esas tres brujas, los niños y el gato negro parlante por milésima vez sintió un escalofrío recorrer su cuerpo erizando cada vello, empezaba a asustarse y creer en la mínima posibilidad de que las brujas llegaran por él después de que había dicho que nada de eso era real, pero se tranquilizó cuando vió la ventana abierta y el viento entrando por medio de ella, era sólo una fría ventisca que lo había hecho pensar en tales cosas. La cerró e iba a volver a tomar asiento en el sofá cuando el timbre sonó, observó su reloj de mano viendo que era medianoche, las doce en punto. Rodó los ojos a sabiendas de que de seguro eran idiotas molestando pero volvieron a tocar el timbre obligándolo a dejar su lugar y atender.

Cuando abrió la puerta se sorprendió al ver a Rosé al otro lado, vestida de Caperucita roja con una larga capa y una canasta, pero en lugar de dulces llevaba pinturas y una lata de una conocida bebida alcohólica, Taehyung la miró extrañado pero Rosé tiró de su brazo con una leve fuerza abrazándolo para luego acercarlo más hacia afuera y cerrar la puerta a sus espaldas.

¿Qué haces?

No pensabas quedarte aquí ¿O sí? Preguntó la pelirroja.

𝐏 𝐑 𝐄 𝐘 ꗃ  ︳⌗𝐊𝐓.𓂅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora