Capítulo 19.

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Había despertado temprano, como cada mañana desayunó y se preparó para asistir a clases, aquél tormentoso lugar en el que no encontraba más que aburrimiento, odiaba el ambiente y odiaba aún más a las personas, tan patéticas. Ellos creían que lo más importante era la popularidad, incluso habían grupos sociales, Taehyung no pertenecía a ninguno, el simplemente era nadie, pero no tenía ningún problema con eso. Prefería ser nadie antes que ser uno más de esos adolescentes inmaduros, preocupados por el qué dirán todo el tiempo. Con esos pensamientos negativos se vistió de negro, su color favorito y fue directo a la casa de su padrastro. La última vez había dejado sus útiles escolares en la sala y los necesitaría claramente.

Cuando llegó se encontró con la casa vacía, como de costumbre. De seguro su hermana estaba durmiendo así que prefirió no molestar, de todos modos la vería en la escuela en unas horas. Sabía de su cita de anoche con el chico de sus sueños, estaba feliz por ella. Quizás estaría cansada, de seguro se habían divertido juntos, cenando en algún lugar de esos que consideraban caros, como si fueran una princesa y su príncipe, era lo que ella siempre había soñado. Era lo que ella merecía.

Con una sonrisa volvió a tomar sus cosas y se fué directamente hacia aquél infierno que lo esperaba con las puertas abiertas. Cuando llegó vió a la mayoría de estudiantes cuchicheando y observando algo en sus celulares, simplemente le restó importancia, era lo típico. Chismes que se difundían, pasando de boca en boca como si fuera una botella de agua entre deshidratados, muertos de sed por aquellas noticias. La gente no sabía disfrutar de su propia vida sin observar la de alguien más, Taehyung odiaba eso de la gente y lo peor era que no era algo que solo pasaba en su instituto, se había cambiado múltiples veces, siempre era igual.

Entró a su primera clase, tratando de prestar atención al nuevo tema de matemáticas, debía intentar mejorar sus notas en aquella materia. Él no tenía problema con los ejercicios, era bueno en matemáticas. Pero se distraía muy fácilmente y con frecuencia, ese era su gran problema. Así que estaba haciendo su mayor esfuerzo pero le costaba aún más ésta vez, sus compañeros de clase no dejaban se susurrar, se estaba hartando.

Entonces llegó la gota que colmó el vaso. La clase estaba cerca de terminar y con ello la parte más importante del nuevo tema, fue entonces cuando sintió el papel golpeándolo en la nuca, se volteó pero repentinamente todos estaban callados, observándolo. Sintió ese pánico, odiaba tener atención, él estaba satisfecho con ser una sombra más. Observó el pequeño papel en el suelo y sólo por curiosidad lo levantó.

Al abrirlo se encontró con un corto mensaje sin sentido.

"Buen video."

¿De qué se trataba? Él no había grabado ningún vídeo, y si lo hiciera no lo compartiría con esas personas ignorantes que no eran dignas de admirar su forma de capturar el arte en imágenes, por supuesto que no.

Sus pensamientos se esfumaron cuando la campana sonó fuertemente avisando a todos los estudiantes que había llegado la hora del recreo o como a Taehyung le gustaba llamarle "La hora del tráfico de chismes" pues en esa hora todos hablaban sobre lo último que habían escuchado de alguna persona de la escuela, era habitual.

Guardó sus cosas y caminó fuera del aula, cuando iba por los pasillos notó las frías miradas sobre él, observándolo como si fuera el único en aquel mundo mediocre. Hablaban y hablaban y él no sabía lo que decían pero escuchaba las voces, escuchaba un nombre "Rosé".

Con el ceño fruncido se limitó a avanzar hacia la cafetería en busca de su hermana, pero antes de que pudiera llegar a la mesa en la que siempre se encontraban unos fuertes brazos lo tomaron y empujaron contra la pared.

-No sabía que tu hermanita era tan...sexy. Tampoco sabía que hacía esa clase de cosas, supe de los rumores pero esto es increíble.

-¿De qué hablas?- Preguntó alarmado.

𝐏 𝐑 𝐄 𝐘 ꗃ  ︳⌗𝐊𝐓.𓂅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora