Pasó la primera noche en la nueva casa para la nueva familia y Harry agradeció que su pequeña hubiese tenido miedo en dormir sola, y pudo usarlo como excusa para no tener que dormir con Louis. Había amanecido un hermoso día en Nueva York; Samantha se sentía feliz mientras veía a sus padres tomando el desayuno, Harry tenía que fingir una sonrisa cada vez que su hija lo miraba, en cambio Louis, no tenía porqué hacerlo; esto era lo que quería.
– Estuve verificando acerca de la escuela para Sam.. – Comenzó hablar Louis llamando la atención de Harry y la pequeña –, ya empezó el semestre y no la pueden aceptar, así que Sam puede tomar clases aquí en casa.
– Entonces tu poder no sirvió de nada..– Comentó Harry tomando de su té –, ¿que acaso no respetan al maravilloso alcalde de Nueva York? – Preguntó con sarcasmo.
– No frente a Sam, Harry. De hecho cariño, ¿porqué no prepararas una mochila? Vendrás conmigo hoy a la oficina.
– ¡Si!
– Ella celebró y salió del comedor – Una, no creo que sea prudente que la lleves contigo, te verán con ella y apuesto a que tu padre estará ahí.
– Escucha Harry, no sé cuantas veces tendré que decirte que a nuestra hija no le pasará nada estando conmigo, mi padre ya no estará en la oficina, al momento de enterarme de lo que hizo lo eché fuera como socio...
– Pero apuesto a que no como padre.. – Interrumpió Harry –, prométeme que no la perderás de vista ni un minuto, Tomlinson. No dejarás que hable con nadie qué no sea de tu extrema confianza, le empacaré la comida que necesita al igual que sus jugos, y que tome agua.. – Harry se levantó –, no llegues tarde con ella, tiene su siesta a las cinco así que es mejor que este a esa hora aquí. Que no coma nada que no sea lo que le empaque... – Harry siguió hacía la cocina y tomó un pequeño bulto para las cosas, Louis se levantó para seguirlo –, recuerda que es vegetariana, que nadie comente acerca de ningún maltrato o muerte hacia algún animal, eso la hace sentir mal y comienza a llorar. Préstale atención y no la ignores, no la dejes sola como te dije, amárrala cerca de ti si es necesario. ¿Me estás oyendo?
– Harry, no le pasará nada, confía en mí.
– Harry suspiró y detuvo lo que hacía – Es que... no me acostumbro a estar sin ella. Me aburriré todo el día aquí.
– Puedes venir con nosotros si quieres.
Harry miró a Louis completamente incrédulo, Louis por un momento sintió un poco de esperanza.
– ¿Quieres que empiece el show? – Harry se cruzó de brazos – ¿Que nos vean todos como una linda familia?
– Louis bufó – ¿Será que dejarás el maldito sarcasmo en algún momento? No podemos discutir cada vez que se te de la gana, nuestro hija también está aquí y puede escucharnos. ¿Crees que eso no la hará sentir mal también?
– ¿Y de quien es la culpa? Ambos estábamos bien antes de que llegaras a cambiarlo todo. Y obviamente no iré contigo. Es mejor que estés pendiente a ella todo el momento, por alguna extraña razón confía demasiado en ti... no querrás decepcionarla ¿o si?
Le dijo Harry antes de marcharse y pasarle la mochila que había preparado para la pequeña. Louis suspiró recobrando paciencia, la necesitaría estando en el mismo techo que Harry.
– Ya estoy lista.
Sam se había asomado y fue a despedirse de Harry.
– Pórtate bien ¿sí? – Harry bajó a su altura – Preparé una mochila para que comas, no te separes de tu padre en ningún momento y no hables con extraños ¿de acuerdo? – Ella asintió – Te amo mucho ¿sabes? Eres inteligente y confío en ti.

ESTÁS LEYENDO
The Mayor Heiress
FanficHarry le deja saber a Louis acerca de la decisión que tomó. Louis no renunciará tan fácil ni a su trabajo ni a su familia. | Segunda parte de The Mayor Lover |