Capítulo 10: Una incómoda decisión

201 12 3
                                    


El gran comité estaba en silencio y eso le parecía raro a Isabel, ya que por las personalidades de cada uno era difícil que no hubieran caído en una discusión.

— A ver — Elena tomó la palabra, tras el monólogo del capitán de la guardia de Corona. — Así que Varian nos mintió y en realidad no era de Arendelle.

— Eso era de esperar — interrumpió Esteban. — Por algo mandé una carta a Arendelle para asegurarme.

— Y Arendelle avisó a Corona — informó el guardia.

— Todo tiene su sentido — dijo Elena. — Sí, tiene sentido. Mucho sentido...

— En fin — suspiró el guardia. — Nos podemos llevar a Varian mañana por la mañana y así vuestro reino no sufrirá más daños.

El corazón de Isabel dio un vuelco. ¿Qué se lo iban a llevar?

— Eh... sí, estoy de acuerdo — asintió Elena.

— Aún así sabéis que siempre tenéis el apoyo de Avalor — añadió Luisa.

— Eh... ¡sí! — exclamó Isabel y todos la miraron. — Esto... como ha dicho mi abuela, Corona siempre tendrá el apoyo de Avalor y por ello, yo, avaloriana de corazón quisiera decir unas palabras en nombre de Varian, de Corona... ya que he sido la persona más cercana a Varian estos últimos tres días... — Como nadie dijo nada, Isabel suspiró y prosiguió. — Varian ha tenido dificultades, tal vez si le ayudáramos podría entrar en razón.

El guardia estalló en risas.

— Usted no conoce a Varian, ¿cierto? — preguntó.

— Yo...

— ¿Quién este a favor de que Varian se vaya mañana a Corona? — preguntó Elena.

— Abuelo, por favor no levantaras la mano, ¿verdad? — dijo Isabel, mirándolo con tristeza.

— Isabel, ha sido muy valiente por tu parte defenderle así, querida, pero, ¿cómo piensas ayudarle? — preguntó su abuelo. — No se puede cambiar a todo el mundo.

Y acto seguido levantó su mano.

— ¿Abuela? — se desesperó Isabel. — Tú siempre quieres buscar el lado positivo de las cosas y sabes más que nadie que las personas también tienen ese lado.

— Estas en lo cierto, Isabel, pero no voy a dejar que siga aquí, sin darte cuenta, te está haciendo daño — se excusó su abuela, levantando la mano también.

— Naomi, por favor — suplicó Isabel. — Sabes que Varian necesita esa ayuda.

— Yo... lo siento, Isabel — Naomi levantó una mano temblorosa.

— Primo...

Él levantó la mano sin dar explicaciones.

— Elena... — Isabel sabía que aunque su hermana votara lo contrario al resto del comité perderían igualmente, pero aún así quería que alguien le entendiera y esa era siempre su hermana; sin embargo, al igual que los demás alzó la mano.

El guardia de Corona dio una palmada.

— Está hecho, saldremos mañana para el amanecer — dijo, se levantó y salió de allí.

Isabel cerró los ojos y brotaron lágrimas, haciendo que toda su familia se acercara a ella.

— Isabel — dijo Elena, mientras le abrazaba. — ¿Qué te pasa?

Isabel correspondió al abrazo de su hermana y mientras se limpiaba las lágrimas, sollozó:

— ¿Por qué pensé que podía hacer cambiar de idea a Varian?

Sus abuelos se prepararon para contestar, pero Isabel siguió hablando.

— ¿Por qué pensé que podría hacer algo grande? ¿Cambiar la forma de pensar a un chico que está muy perdido en el camino? ¿Por qué pensé que podría guiarle? ¿Por qué soy tan estúpida? Tanto que me puedo creer que puedo solucionarlo todo fácilmente como si fuera un simple ejercicio de física.

— Porque confiabas en ti — respondió Elena.

— ¿Y debería seguir confiando en mí? — preguntó Isabel.

— Sigue tu instinto — respondió Elena, agachándose a la altura de su hermana menor. — Siempre funciona.

— Bueno — Esteban se agachó también. — Eso no es del todo cierto. — Bajó la voz para que solo Isabel pudiera oírle. — Elena siempre se mete en líos haciendo eso.

Isabel no pudo evitar soltar una risita y Esteban sonrió con satisfacción al hacer reír a su prima en un momento de tristeza para ella.

— Voy a despedirme de Varian — anunció.

Y salió de la habitación, antes de que alguien pudiera decirle algo más.  

Hay Química (Crossover Elena de Avalor y Enredados otra vez)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora