9 razones por las que Clint es el mejor tío y 3 por las que no

Pietro

Razón 3:

Los mutantes solo llegaron una día con la escusa de que quieran tener una buena relación con la iniciativa vengadores que se estaba formando en New York. Nada tenía que ver con que nesesitaban un poco de ayuda con los dos pequeños y el futuro bebé que cierto profesor X esperaba.

Erik y Charles conversaban tranquilamente con los vengadores. Habían traído a dos pequeños con ellos, ambos de cuatro años según dijeron, la pequeña Wanda estaba tranquilamente dormida en el sofá, pero Pietro... El pequeño se dedicaba a correr por toda la torre, con la justificación que quería conocerla completamente, lo negativo esque su recorrido solo duró menos de unos minutos. Y volvía con sus padres, irritado al mutante que controlaba el metal con su vocecita repitiendo la misma oración una y otra vez.

-estoy aburrido, estoy aburrido- repetía como si fuera oxígeno que nesesitaban respirar.

-cariño, estamos ocupados, duerme igual que Wanda- pidió Charles con un tono calmado y amoroso.

Pietro ignoro olímpicamente a uno de sus padres y continuó con su mantra.

-¡Callate ya! - Erik explotó, mirando furioso al niño, el cual sabía muy bien como era su padre. Así que tomando más aire hasta inflar sus mejillas, tan solo se quedo callado un par de segundos.

-¡Estoy aburrido! - grito de la forma más potente y aguda que pudo, dejando salir todo el aire que contuvo. Tanto los vengadores como los mutantes estaba estresados por el berrinche que ya se estaba pasando del límite de la paciencia.

-ven- llamó Clint al pequeño. Todas las miradas se posaron en el arquero, incluyendo los ojos azul cielo de Pietro - conozco un lugar en el que no te vas a aburrir-

Pietro barrio con la mirada al rubio. Lo pensó un momento para luego acercarse al arquero y ser guiado por uno de los pasillos de la torre.

-no me agrada- rápidamente intervino Erik con un tono que delataba celos.

Charles le dio un leve golpe en el pecho - por dios Erik, es un niño, no es tiempo de que te enceles porque vaya a jugar a otro cuarto- El mutante bufo y todos sonrieron discretamente.

Ya sin los berrinches del velocista mini, el tiempo dejó de parecer una eternidad y se movió con la rapidez nesesario para hacer la tarde amena. Los primeros rayos de la noche pintaron el cielo y los mutantes se prepararon para irse.

-vamos por Pietro- indicó Charles, intentando levantarse con su enorme barriga de embarazo.

-no se molesten- hawkeye llegó con el pequeño dormido en brazos - creo que así les gusta más ¿no? -

-lamento si te causa molestia - rápidamente se disculpo el profesor.

Barton negó - se porto muy bien, es un buen niño-

Erik le arrebato a su hijo y le gruño en un tono bajo.

Charles miro asombrado a Pietro - ¿como lo lograste? Es un martirio hacerlo dormir-

Clint levanto los hombros - lo lleve a la sala de entrenamientos y lo deje hacer lo que quiera, luego de un rato parecía tener sueño así que le conté una historia y se durmio- explico con una relajación máxima que dejó a los padres del niño sorprendidos.

Pietro se removió incomo, abriendo sus ojos mientras se los rascaba con su manito. Erik tomó en brazos a los mellizos como pudo y todos fueron a la pista de aterrizaje en el techo de la torre, donde un Jet con una X aún lado esperaba a la pareja.

Tanto vengadores como mutantes se despidieron y la familia de 4 integrantes subio al Jet.

Ya adentro Pietro parecía despertar. Charles se acerco y acaricio sus cabellos. Un pequeño destello azulado se fijo en Charles y con pequeños movimientos de su manita le indico que se acercara.

Charles se acerco y su hijo le susurro al oído, muy despacito un secreto que le pidio que lo guarde bajo una promesa de corazón.

-papi, quiero casarme con Clint- había murmurando.

Por ser el único en tenerme paciencia.