Tu cuerpo ♡ sasusaku

Vamos a repetirlo

Un pequeño maratón chamas :)
Ay les va...

Sasuke repartía húmedos besos en el cuello de la ojijade, lamidas y succiones.

—Ya estate quieto — se queja, alejándolo de ella

— Podemos aprovechar que no tienen clases para hacerlo otra vez — dice  aventando  una mirada  lujuriosa.

—No

— Quieres eso o que te corte, y sabes que lo haré las dos cosas como quiera.

—Pues entonces para que preguntas — bufo la ojijade

La ojijade se levantó, fue hasta la cocina agarro un vaso se sirvió agua. Y empezó a beberlo lentamente, ignorando al azabache que se postraba alado de ella.

— Ya Sakura, sabes lo que tienes que hace — le tiro el vaso con agua — me molesta que hagas tus berrinches. Tu sabes para qué  te compre, así que puedo hacer lo que se me dé la gana con tu cuerpo.
Recuerda el contrato.

—Pues ya, que esperas...

El azabache la tomo de la cintura, apretando con sus manos ese lugar, para después sentarla en su regazo. Para continuar lo que no había terminado, repartiendo besos, en la parte de su cuello. Sasuke sin duda amaba ese lugar, se entretenía un montón en esa parte, le gustaba como la ojijade quedaba marcada con las mordidas que el le daba, solo el y nadie más. Le encanta el color que después se formaba en esa piel de porcelana.

— empieza a moverte — dijo en susurro el azabache

La pelirosa acato las órdenes, empezando un vaivén lento, frotándose en el miembro del azabache.

El azabache saco unas esposas y ató sus las manos de la pelirosa sus manos atadas en la parte baja de su espalda.

— Me gusta verte, así, no podrás moverte

La pelirosa sólo bajo su vista avergonzada.

Esta vez el tacto fue piel con piel. El azabache se encargaba de dar pequeños apretones y estimulaciones mientras luchaba con los botones de la pelirosa con la mano libre, cada vez que libraba un pedazo de piel repartía besos junto a pequeñas marcas por la piel pálida. La respiración de la ojijade parecía cada vez más entrecortada apretando sus dientes.

Sasuke sonreía malvadamente, la cargo y la llevo a la cama para acostarla, ante ello y para cuando llegó al vientre dejando pequeños lamentones. Volteo ver hacia arriba, viendo los ojos llorosos y la boca entreabierta de la pelirosa.

— Se siente bien cariño — dijo   Sasuke, con esa sonrisa traviesa otra. Sakura no hablo, estaba tan apenada.

Con ambas manos quito las bragas de la pelirosa, sin dejar de atacar tanra piel como podía, entre sus muslos, bajo y pasó lentamente su lengua en la  entrepierna de la ojijade, haciendo chillar a esta.

— No te tapes la cara — regaño — Volteame a ver Sakura — pasó su lengua en la parte sensible de la pelirosa.
— Voy a entrar cerezo, quiero ver en ti esas expresiones de dolor.

Cuando Sakura sintió que retiraba completamente sus bragas su respiración se empezó acelerar, su corazón empezó a latir al cien. No pudo evitar soltar un sonoro gemido a la vez que cerraba sus ojos y hechaba la cabeza hacia atrás al sentir la calidez que le inundaba ya que Sasuke se había introducido en la pelirosa en una sola estocada. Todavía dolía, pero un placer inimaginable.

—Y-ya ya.. Sas-  — susurro apenas audible la primera pelirosa.

Antes de haberse acostumbrado al miembro del azabache, este se empezó a mover tan rápido, dando embestidas frenéticas.

— F-fantastico — dijo el azabache viendo con los ojos bien abiertos a la ojijade, con una sonrisa tan grande en sus labios nunca imaginó que hacer sexo sería tan satisfactorio. Sin duda lo haría las veces que quisiera, nunca se cansaría de ver esas hermosas expresiones.

Sasuke libera las manos de la pelirosa, inmediatamente ella cruza sus brazos alrededor del cuello de este, aferrándose a él, mientras esconde su rostro en el cuello del azabache callando sus gemidos.
El azabache presiona más la cintura de la chica aún embistiendo en ella.

Su moviendo se vuelve más brusco y le provoca descargas eléctricas en todo el cuerpo.

— Vamos c-cariño u-un.. poco más — Pide Sasuke lamiendo el lóbulo de la oreja de esta.

— Mmg aaah Ahhh — el gemido logra escapar de su boca de la pelirosa la cual quería ser silenciosa, al darse cuenta de sonido vergonzoso que escapó de sus labios, aprienta sus dientes.

— Q-uiero e-scucharé....mgh

Vuelven esa embestidas frenéticas, cada vez que daba estocadas, gloriosos jadeos  salían de la boca de la ojijade haciendo enloquecer a Sasuke.

El azabache deja escapar un ronquido de satisfacción al correrse en el interior de la pelirosa.

Y al instante Sakura puede sentir como un líquido caliente de Sasuke se vuelca en sus interior.
Sasuke atrapa los labios de la pelirosa dando un beso ardiente, ambos caen rendidos en la cama. Bueno rendidos sólo por parte de la pelirosa.

— Q-quiero dormir — suspira la pelirosa aún con la respiración agitada.

— Vamos a repetirlo, esto no se acaba aquí — dice sasuke subiendo arriba de la pelirosa, pegando sus frentes sudorosas
Volviendo atrapar los labios de la ojijade.

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