LAYLA

SEIS

Estaba esperando a que regresará Jace, para saber que plan tenía.
Mientras, observaba la habitación para ver si podía haber algo que en algún futuro lo necesitara.
En eso me llama la atención un cuadro, en ese cuadro había una especie de guerra, entre unos que eran del bando blanco y los otros del bando rojo, en el final del cuadro se ve una pareja, ella roja y él blanco, en eso están llorando.
Entonces toco el cuadro y me transporta dentro de el. Fui directa a la pareja y contemple que la mujer estaba llorando igual que el hombre, los dos se juntaban en un beso y se mataban mutuamente. Tenían una espada y los dos la clavaron en el corazón del otro. No sabía que había creado la guerra ni como acabo, pero sabía que el amor supera la adversidad.
Salí del cuadro porque una especie de alarma, me advertía que algo andaba mal. Esperaba que viniera Jace, y de pronto se abrió la puerta y mucha gente con trajes de color negro, con armas y chaleco antibalas me apuntaban. No entendía nada, pero sabía que me había metido en un gran lío sin pretenderlo.
Me cargaron dos hombre, como si fuera una pluma o un cristal. Yo gritaba, pedía ayuda, vi que en algunas puertas se vio el intento de intentar abrir la puerta pero estaban cerradas.
-Tranquila -dijo alguien en mi mente, entonces comprendí que era alguien que me intentaba ayudar, utilizando la telequinesis. Sabia que se llamaba así porque en casi todas las películas que veía iba sobre poderes y uno de ellos era la telequinesis.
-Ayudame -le conteste.
-¿Tu también puedes hablar por aquí?
-¿Puedo? -conteste alucinando.
-Si -dijo la voz alucinando, no sabia si era hombre o mujer ya que en la voz no se podía saber.

**5 minutos antes, en la sala de control**

En la sala de control esta lleno, de especies de brújulas, las cuales tiene un radar, para descubrir gente indeseada,en ese radar saldrá un punto rojo, el cual marcara la posición de ese poder. Hay tantas brújulas, que ya no las saben identificar, así que las brújulas de color blanco, son las que controlan todo el laboratorio, cada habitación, cada rincón. En cambio los de color gris son los que están en afueras de los muros del laboratorio. Puedes estar tranquilo en esa habitación, así que no solía haber mucha gente. Mientras dos cazadores disfrutaban como querían, empezó a sonar una brújula, una blanca. Había peligro. Ninguno se dio cuenta porque se lo estaban pasando realmente bien, pero sabían que en algún momento deberían acabar, con esa aventura, pero se sentían tan a gusto. Por suerte para esos cazadores se dieron cuenta que sonaban justo cuando entraba el supremo, así que se pudieron apartar y hacer ver que no pasaba nada. El supremo confiaba en sus dos cazadores que estaban ahí, así que no sospechaba de ellos. Ella vio lo de la brújula y casi mata a los dos cazadores por no avisarla. Pidieron ayuda, y fueron muchos a ver donde estaban usando sus poderes. Llegaron a la puerta 175, con toda la seguridad del mundo abrieron la puerta, y encontraron a una niña, pequeña no tendría mas de seis años, estaba en su cama dormida tranquilamente. Se habían equivocado de puerta. Significaba que la persona que ocupaba los poderes había hecho que se equivocaran de puerta y no supieran donde estaba. ¿Lo había hecho a propósito o no? Fueron abriendo las puertas, hasta que entraron en la puerta 179, la de Layla. La vieron mirando un cuadro, así que ella era la culpable. No era fácil llevársela, no paraba de moverse y decir cosas sin sentido, vieron algunos intentos de abrir la puerta de algunas habitaciones pero lo tenían prohibido e imposible, los indeseados. De repente, la chica que se habían llevado, paro de luchar y dejó que se la llevaran. ¿Era ella o fue una emboscadas?
La arrastraban por el suelo, y al final le pusieron una bolsa para que no pudiera ver donde se la llevaban. La debían de dormir, así que utilizaron el pañuelo con una droga bastante común en el mundo de los secuestros, así la pudieron dormir y llevársela como un saco de patatas.