Recuperándote (2° temp APUR) (Editando)

Capítulo 16

Al llegar a España estoy súper cansada, llamo a mi padre para decirle que hemos llegado y que si puede llamar a los demás ya que con el cansancio no me apetece llamar a nadie más, solo meterme en la cama y descansar del viaje, después de recibir el mensaje de Bonnie a mitad de recorrido donde estaban todas las fotos de estos últimos días no he dormido casi nada pensando en todo lo que ha ocurrido durante esta semana, y aunque lo he intentado incluso me he ido al dormitorio del avión con Eric para descansar, él ha conseguido dormirse un rato pero yo no he sido capaz de dormir nada y he estado lo que quedaba de viaje leyendo.

Una vez en casa no paro ni a quitarme la chaqueta, subo directamente a mi dormitorio, me pongo el pijama y me acuesto. Pero de repente siento unas manos en mis caderas, brinco asustada ya que se supone que estoy sola, tengo miedo hasta de girar la cabeza y mirar quien es.

-Tranquila Sheila, no te haré nada, soy Eric.

-Imbécil, me habías asustado, pensaba que estaba sola en casa, que hoy dormías en casa de tus padres ¿como has entrado? -digo mientras bostezo.

-Fácil, por la puerta principal, justo por detrás tuya, te la has dejado abierta al entrar. Menos mal que he sido yo, imagínate si llega a ser un ladrón. Y a lo de irme a dormir, al final he decidido que prefería quedarme contigo aquí, y así tampoco dormías sola.

-Ha sido sin querer, estoy demasiado cansada para pensar con claridad, además estoy acostumbrada a que normalmente vienes por detrás de mí y cierras tú al entrar. Y gracias por quedarte.

-Pues descansa, mañana salimos a las 8:00 hacia Alemania. Vamos a la cama.

-Joder Eric lo que te gusta madrugar,¿no puede ser un poco más tarde?-Eric arquea una ceja- Vale. Buenas noches amor.

-Buenas noches princesa. Y cuida ese vocabulario. ¿Por que siempre que vas a hablar mal lo haces en español? -me río y ahora soy yo quien arquea la ceja- Mejor no me lo expliques. Vamos a dormir.

Me dejo caer sobre la cama con Eric a mi lado y me quedo dormida casi al instante, mi cuerpo y mente pedían calma y mi cama con urgencia, echaba de menos dormir en ella. Y sobretodo echaba de menos estar en mi casa, en el más absoluto silencio, siempre que duermo con Yaiza significa que nos den las tantas despiertas además de que es súper ruidosa. Adoro a mi cuñada pero no es la mejor compañera para dormir, en eso se parece a Karla y Ada, son incapaces de juntarse una noche y no montar una fiesta de pijamas o ponerse a cotillear sobre cualquier cosa. Y me duermo con ese pensamiento, con la imagen de mis mejores amigas hablando aquellas noches.

Narra Timothy.

Cuando llego a casa, busco a mi primo, supuse que estaría en la habitación y no me confundí, ya que se encuentra tumbado en su cama leyendo, supongo que estaría estudiando. Al entrar cierro la puerta de la habitación y me siento con él en la cama.

-¿Qué haces? Sheila ya se ha ido.

-Estudiar. Y... ¿Qué tal ha ido todo?

-Bien para ella, pero... Izan escúchame atentamente y no te alteres.

-¿Qué pasa? ¿Qué te ha dicho? ¿Ha preguntado por mí? Al final se ha arrepentido y se ha quedado, sabía que me quería, no puede vivir...

-Eh, Izan espera, no es nada de eso, todo lo contrario, Sheila pide que la olvides, que la dejes en paz, que no quiere saber nada más de ti. Quiere olvidarte y pide que tú hagas lo mismo. Ella es feliz con ese hombre y no volverá contigo. Lo siento.

-¿Estás seguro? - asiento más que seguro de lo que he visto y oído- Pues yo no la creo. Se que solo intenta tapar el vacío que yo la dejé, sigue enamorada de mí, lo he notado, he tenido una relación con ella durante casi dos años, se que no puede olvidarme. Y aunque lo quiera no lo conseguirá.