Capítulo 4

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Narra Joel

Me despierto miro la hora y eran las 8:40, rápidamente me levanto, me doy un baño y bajo a desayunar. Trate de hacer todo lo más rápido posible y como ya tenía que irme, decidí ir a avisarle a los chicos.

–Chicos.

Al despertarse nuevamente les hablo.

–Debo irme a trabajar, ustedes quédense hagan lo que quiera. Pueden ir abajo a la sala donde están las maquinitas, el pool, la ruleta o si se van no sé.
–Nos quedamos, ahora seguiremos durmiendo Joel. Nos hubiese dejado una carta o un mensaje y no habernos despertado. –me reprochan, junto a una pequeña risa
–Tienen razón. –suelto una pequeña risita– ¡Nos vemos!

Al llegar al trabajo fui directo a mi oficina y como tenía demasiado sueño me preparé un café. Nunca me despierta, ya estoy más que acostumbrado, pero de igual forma me encanta.

Luego de un rato golpean la puerta.

–Adelante, Ernesto.

Nos pusimos a conversar del negocio que tenía él y mi padre y también cosas no tan importantes.

–Uf si, mi hijo está buscando trabajo, porque dice que quiere tener su propia plata.
–Si, lo entiendo yo era igual. ¿Qué está estudiando tu hijo? –pregunto interesado
–Quiere ser algo de empresa así como yo, contador o administrativo.
–Oh, mira. –sonrío– ¿Cuántos años tiene?
–Erick tiene 17 años.

Erick, lindo nombre.

–Claro es menor todavía, yo preciso alguien pero... ¿Cuándo cumple sus 18?
–En 3 meses.
–Ok, aquí conmigo en 3 meses puede conseguir trabajo pero obvio tiene que esperar a que cumpla sus mayoría.
–Que bueno, me alegro. Estoy un poco preocupado porque como es él trabajaría en cualquier lugar y yo quiero uno bien para él.
–Lo entiendo.

Luego de hablar y terminar unos negocios, me pasó el número de Erick, para que cualquier cosa le escriba. Y tenlo por seguro que eso haré.

–Bueno adiós Joel, un día de estos puede venir a casa, me encantaría que mi hijo te conozca. Aparte ya podemos cerrar nuestro negocio allí para estar más tranquilos.
–Adiós Ernesto. Me encantaría, nos vemos luego.

Al irse yo seguí haciendo alguna que otra cosa y luego me fui a casa.

Al llegar pregunto por los chicos y me dicen que estaban en la sala de juegos. Que es el sótano pero es genial! Como dije en una parte hay una barra de bebidas, el pool y al costado están los otros juegos.

–¡Voy contra el que gane! –anuncio, al ver que están jugando al pool

Pasamos un buen rato hasta que ya eran las 19:00 y teníamos mucha hambre así que subimos en busca de comida.

Luego de comer, gracias a mi nana, que hizo algo muy rico para nosotros. Nos quedamos charlando, descansando.

–¡Hey brothers! Lamentablemente, ya debo irme a casa, están mis hermanos solos y mamá no viene hasta el lunes. –comunica Rich
–Dale, no hay problema. Cualquier cosa que necesites, no dudes en escribirme.

Se fue, y al rato Christopher. Ya que el último quiere nuevamente salir, me ha invitado, pero rechacé la salida, ya que tengo bastante trabajo. Además no soy de salir mucho, tal vez, una sola vez por semana.

Al ya no estar ninguno en casa, terminé algunos asuntos pendientes. Para luego acostarme a dormir, ya que el cansancio estaba pudiendo conmigo.

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Segundas Oportunidades ~ JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora