Nueva hermione

Capitulo 8: Ron

A la mañana siguiente ambos jóvenes se levantaron con otros ánimos, ambos tenían en claro como serían a partir de ese día luego de su noche llena de pensamientos.

Hermione se levantó muy temprano para ir a ducharse, el calor aún no se había ido para ella, se vistió rápidamente con su nuevo uniforme, encontró cierto agrado al verse al espejo que se encontraba en su baño, se acomodó su cabello en trenza, su cabello ya no era rebelde pero aun así estaba acostumbrada a dejarlo suelto, al bajar por la escaleras se encontró con la sorpresa de una taza de chocolate caliente con dos malvaviscos sobre la mesita de la salita.

-Espero que te guste mi elección para ti.- Draco estaba a un lado de la sala recostado sobre la pared.- Buenos días leona.-

-Muchas gracias, Draco, me encanta y buenos días igualmente, aunque debo decir que ya no soy leona.- Hermione mostraba una gran sonrisa, aquel detalle le había alegrado el día.

Draco era consciente de que la chica ya no pertenecía a Gryffindor y por eso respondió.- Créeme que estoy muy consciente de ello, pero el apodo de leona va mucho más allá de ello.- Draco se fue acercando a ella a paso pausado.- Eres valiente, muy fuerte, te sabes defender muy bien y mi nariz lo afirma...además de la pared de la sala común, tu gran melena ahora rubia.- Draco ya estaba bastante cerca de Hermione y la miraba de manera penetrante.- Puedes ser Slytherin ahora pero para mí eres una leona.-

-Draco...gracias.- Hermione tomo de la pequeña taza con la mirada penetrante de aquel rubio encima.

-Nunca es una molestia para mi decir lo que pienso.- Draco pasó por su lado.- Apura pequeña para comer algo en el comedor, además, si mal no me acuerdo tu tenías que hablar con Harry ayer.-

-¡Demonios! Tienes razón, vamos.- Hermione se tomó toda la taza de una y salió corriendo.

-Ay Hermione, siempre sorprendiéndome.- Salió Draco a paso largo, pero sin perder su postura.

Hermione se encontró con Pansy a la cual saludo con la mano y salió de nuevo rápidamente mientras Draco iba llegando rápidamente.

-¿Qué pasa con Hermione?- Pansy no salía de su desconcierto aún por la manera de comportarse de Hermione.

-Se acaba de dar cuenta que plantó anoche a Potter.-

-¿Estamos hablando de Hermione Griffin alias el amor de tu vida?-

-Hermione, sí, pero no podría atribuirle tan título tan rápido eso.-

-Me acabas de confirmar que te gusta Draco Malfoy.- Pansy llevaba una sonrisa de oreja a oreja, aunque ella había tenido un flechazo con el joven se dio cuenta que no era para ella por sus diferentes personalidades.

-Pansy no tengo tiempo para acusaciones, me voy te veo en el comedor.-

-Como digas Draquito.- Pansy sabía muy bien que a él no le gustaba que le llamaran así.

Draco al retomar su camino tuvo que apurar su paso si quería alcanzar a la rubia que había desaparecido del panorama, luego de unos minutos llego al gran comedor donde vio que estaba a punto de comenzar una acalorada discusión entre Hermione y Ron, lo cual le parecía muy fuerte, Hermione parecía que se iba a lanzar encima del pelirrojo a golpearlo mientras el chico estaba rojo de furia, lo peor del caso es Harry no hacía mucho por separarlos o detenerlos, actuaba de lo más normal.

-Ron no sé cómo más puedo decir el motivo por el cual me he retrasado.- Hermione tenía una ganas de golpear a su supuesto amigo.

-No hay forma que lo pruebes, no significa nada.- Le respondió Ron desde su asiento sin moverse.