When the stars fall. (Brallie The Fosters FanFiction)

Ahora vienen las consecuencias.

*POV Brandon.

Quizás debería haberme tomado un respiro con Talya antes de que nada de esto pasase. Pensándolo bien, nunca me había sentido tan confundido en lo relativo a ella, como con Callie. Además, ella y yo no compartíamos igual sangre… y aún no había sido adoptada.

¿Me gustaba? Posiblemente, pero aún no estaba seguro. Si no fuese así, nunca la habría besado como hice. Ni hubiera mantenido el beso, si no hubiese sido por su hermano. Mis sentimientos no hacían más que oscilar de un lado a otro constantemente.

-¡Brandon!- Respiré.- ¿No ha sido precioso?

Talya no se había dado cuenta de nada aún. Jude no había abierto la boca, y Callie hacia horas que estaba desaparecida. Era aproximadamente la hora de la cena.

-Sí.- Mentí.- Sin duda.

Ella levantó una ceja en señal de desaprobación. Me conocía muy bien.

-¿Qué te pasa?

Negué, pero ella empezó a taconear en el suelo, impaciente. ¿Debería contárselo? Una parte importante de nuestra relación siempre había sido la confianza. Pero esto era sin duda demasiado difícil de confesar. Lo estropearía todo… absolutamente.

-Brandon, dímelo.

Entonces, unas palabras salieron de mi boca, totalmente inconscientes.

-Creo que deberíamos darnos un tiempo.

Ella abrió mucho los ojos, y pude ver como apretaba los puños a ambos lados de sus caderas. Una lágrima se deslizó por su mejilla. Luego me miró.

-¿Qué estás diciendo?

-Eso…- Apenas podía respirar. Ya no había vuelta atrás.- Que quizás lo mejor es que pasemos un tiempo separados el uno del otro. Llevamos mucho tiempo juntos, y bueno, a lo mejor necesitamos un respiro….

-¿Ha pasado algo?

Uno, dos, y tres suspiros. No me podía creer lo que estaba haciendo. Estaba cortando con Talya, nunca me había imaginado haciéndolo. De hecho, varias veces había pensado que ella misma sería la persona con la que compartiese el resto de mi vida. Dos años es mucho tiempo.

-No.- No podía verla llorar.- Es simplemente que ahora me tengo que concentrar más en los estudios… van a llegar los finales, y apenas soy capaz de leer tres o cuatro líneas sin perderme.

Era la excusa más tonta que había oído en toda mi vida. De hecho, es que no tenía ningún sentido.

-¿Es por Callie?

Sí.

-¡No!- Volví a mentir. No podía dejar que pensase eso. Desde que Callie llegó a casa, no dejaba de acusarla de que le gustaba. Decirle lo que había pasado no haría más que confirmar sus sospechas, y odiarla aún más.

-Callie es mi hermana, no sé cómo tengo que decírtelo. Ella.- Recalqué- no tiene nada que ver con todo esto. Déjala fuera por una vez, ¿vale?

Más lágrimas. Luego Talya empezó a correr por el pasillo, hasta salir por la puerta principal.

*POV Callie.

Hacia ya más de tres horas que me había alejado de casa de los Fosters, con la mochila que mi madre me regaló de pequeña, y la poca ropa que llevaba conmigo de casa en casa de acogida; cuando me paré en seco a observar el panorama.

Tres o cuatro prostitutas estaban haciendo la calle en mis narices. Y no sabía exactamente dónde estaba. Una de ellas, se quedó mirándome, y se acercó a mí.