The Demon Next Door (Mi vecino es un demonio) - KAISOO TRAD. ESPAÑOL

11 - ¿Puedo ir al baño?

Clasificado como M por el momento que todos estaban esperando.

Aish, cerebrito@s pervertid@s~

"¡J-Jongin!"

"Espera, ya casi."

Un gemido salió con el "casi." "¡Jongin, d-detente! ¡Duele!"

"¡Lo sé! Casi termino, solo espera un segundo más..."

"¡Jongin!" Kyungsoo gritó.

El menor no esperó el manotazo en la cabeza y Kyungsoo le frunció el ceño, con los dientes apretados silbando entre ellos. Jongin solo arqueó una ceja.

Nota mental: nunca dejes que Jongin te saque una astilla. Kyungsoo estaba muy seguro que la maldita astilla estaba más enterrada que antes y no gracias a Jongin con su patética asistencia.

Kyungsoo no supo de donde la sacó, quizás de la rama que recogió mientras iban caminando por el parque. Pero como fuera que llegó ahí, el maldito palito de madera estaba en su piel y dolía como la chingada.

Y Jongin, hasta ahora, no había sido de ayuda, no del todo.

"Solo es una astilla, pequeño llorón." Jongin pellizco la mejilla de Kyungsoo.

El mayor apretó su pulgar, tratando de hacer que la astilla saliera. "Me duele."

"No, jodas. Cuando regresemos, vamos y te la quito con unas pinzas."

Kyungsoo sostuvo su pulgar adolorido en su pecho. "No confió en ti."

Jongin se rio. "¿No confías en mí?"

Y la franqueza de Kyungsoo no fue tan agradable. "No."

"Sí, claro." Jongin alcanzó la otra mano de Kyungsoo. "Vamos a caminar un poco más y hagamos cosas que no requieran de tu mano derecha, aunque desafortunadamente, tacha la numero uno en mi lista."

"¿Y qué es?"

La sonrisa de Jongin era amplia y cursi, Kyungsoo solo rodó los ojos, pues su pulgar punzaba con tanto dolor como para continuar con las pendejadas de Jongin.

"Jodete, Jongin."

"No, de hecho al revés, yo iba a joderte."

Kyungsoo lo hubiera golpeado de nuevo, sino fuera porque su mano derecha no estaba de humor y su izquierda no era tan fuerte. Era un día de suerte para Jongin.

Caminaron alrededor del parque tomados de la mano y las personas los observaban. Pero a Kyungsoo ya no le importaban. Déjenlos que vean, déjenlos que vean lo feliz que soy a comparación de ellos.

Le había tomado un tiempo ignorar los chismes que se esparcían como fuego. Había pensado en discutir con algunas personas, en especial en la escuela, pero de nuevo, no puedes combatir fuego con fuego.

Jongin siguió parloteando sobre algo, pero Kyungsoo se perdió en algún momento de la conversación, poniendo más atención a observar el escenario a su alrededor.

Las hojas estaban cambiando en una gran variedad de múltiples colores. Rojo mezclado con amarillo, naranja esparcido por todo el lienzo. Algunas hojas ya se habían sacrificado desde su árbol anfitrión, cayendo al suelo, perdiendo cualquiera que fuera su color anterior pasando a un café chocolate.

Kyungsoo hacia una mueca cada vez que su pie aplastaba una hoja en el suelo, sintiendo culpa por razones desconocidas. Quizás el solo saber que había vida muerta debajo de su pie lo hacía estremecer.