CAPÍTULO 11

3.1K 232 78
                                    

CAPÍTULO 11

-¿Vas a salir hoy con nosotros?- me preguntó Matt por teléfono.

Vacilé un poco antes de responder y opté por decir que no me apetecía salir, pero Matt se dio cuenta de que ya tenía algo que hacer.

-¿No te apetece salir o ya tienes planes?

No respondí. Durante esa semana que llevaba sin salir con los chicos, había estado saliendo con otros chicos de mi instituto. No era la gente con la que me encantaba estar, pero me ayudaba a distraerme.

Matt suspiró y dijo:

-¿Puedo ir a tu casa y hablamos?

-Claro, ven- contesté.

Llegó en unos 15 minutos y fue directo al grano.

-¿Cómo es que antes salías con nosotros y ya ni te vemos? Lucía, dime qué ha pasado con Nash y Taylor, porque antes ellos eran con los que mejor te llevabas y ya no. Y, ¿por qué Tay y Nash casi ni se hablan?

Tragué saliva y dije:

-Te lo voy a contar porque necesito la opinión de un chico en este tema, pero no puedes decírselo a nadie.

-Vale.

Le conté todo, cómo me sentía con Taylor y Nash, lo de la apuesta con Taylor, lo del beso. Él escuchó hasta que hube terminado de dar cada detalle.

-Bueno- dije cuando hube terminado, ya que él no decía nada -, ¿no vas a decir nada?

-Creo que estás enamorada de Taylor, pero no quieres aceptarlo por miedo a hacer daño a Nash, al que le gustas mucho- contestó muy serio.

Le sostuve la mirada un momento. Iba a negar que estaba enamorada de Taylor, pero, ¿y si lo estaba? No, era imposible, no le conocía tanto como para estar enamorada. Aunque dicen que no hace falta tanto tiempo, pero, ¿cómo iba a saberlo?

-No sé- dije a la vez que destensaba los hombros y me dejaba caer en el sofá del salón.

Cogí un cojín y me tapé la cara con él. Lo aparté y miré a Matt, que no dejaba de mirarme.

-¿Qué hago, Matt?- le pregunté.

-Yo creo que deberías hablar con Taylor y decirle lo que sientes por él, porque por lo que me has contado, a él no le importas poco. Le gustas mucho, Lucía, y se nota.

Sonreí al escuchar que yo le gustaba a Tay.

-En cuanto a Nash- prosiguió -, no te digo que le hagas daño, pero si Taylor te gusta mucho, no puede haber nada que te frene de estar con él.

Me quedé pensativa mirando a la pared. Matt tenía razón. En ese momento me di cuenta de que Taylor me gustaba de verdad. No sabía si estaba enamorada de él, pero lo sabría con el tiempo. No perdía nada intentando saberlo.

-Tienes razón, Matt. ¿Has venido en coche?

-No, ¿por qué?

-Quiero hablar con Taylor. ¿Me acompañas a su casa?

-Claro.

El camino se me hizo larguísimo. ¿Qué le iba a decir? ¿Se habría cansado de intentar algo conmigo? Pensé en mil frases para decirle, pero sabía que se habrían olvidado para entonces.

-Venga, llama al timbre. Yo ya me voy.

-Gracias Matt- me había ayudado con ese tema. Gracias a él me había decidido a intentar algo con Taylor. Le di un abrazo y me despedí de él.

Llamé al timbre y esperé nerviosa a que la puerta se abriera. Después de un rato que se me hizo eterno, la puerta se abrió y, detrás de ella, apareció Taylor, sin camiseta, con unos pantalones ajustados y una bandana roja alrededor de su cabeza.

-Taylor- dije en cuanto lo vi.

Parecía sorprendido de que estuviera allí. Me miró fijamente y se quedó muy quieto. Le sonreí ligeramente, un poco asustada.

Seguía sin hacer nada. Dejé de sonreír y abrí la boca para decirle todo lo que le quería decir, pero entre nosotros las miradas bastaban para decirnos lo que quisiéramos, así que no dije nada.

Vacilé un momento, pero al final me lancé a sus brazos y le rodeé el cuello con los míos. Al principio no respondió a mi abrazo, pero luego me rodeó él a mí con sus brazos y posó su cabeza en la mía. Levanté la cabeza para mirarlo y esperé a que él hiciera el siguiente movimiento.

Me miró fijamente a los ojos durante un rato y levantó las cejas interrogante. Asentí, me acerqué a Taylor poco a poco, al igual que él hacía, y posé mis labios en los suyos.

El beso fue breve. Cuando nos separamos lo miré y dije:

-Lo siento, Taylor. En serio, no sabes lo tonta que he sido.

-Da igual- respondió sonriente -, el caso es que has vuelto.

Me volvió a besar, esta vez con más intensidad. Agarró mi cintura con más fuerza y me atrajo hacia él. Mientras nos besábamos a la puerta de su casa, yo jugaba con su pelo. Cada vez que parábamos para respirar, sonreíamos con mi frente apoyada en la suya.

-Te quiero, Lucía- soltó en ese silencio.

-Y yo a ti, Taylor- contesté después de darle un pequeño beso en los labios.

-¿Vamos dentro?

-Claro.

Me cogió de la manó y lo seguí para entrar en su casa.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 20, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Life with MagCon boysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora