P.O.V Rick Grimes:
- Hey Rick, ¿Estás bien?
Daryl hizo que interrumpiera mis pensamientos. Le observé aún distraído y negué con mi cabeza.
- No... no lo sé Daryl. En mi mente pasé una película tremenda, y precisamente era de lo que haríamos justo ahora.
Daryl se quedó observándome un buen rato y posó una de sus manos en mi hombro dando pequeños golpecitos en el mismo dando un poco de "animo." Se sentía real.
- Otro día vengamos y, con Alexandr...
Siquiera lo dejé terminar, pues me adelanté interrumpiéndole rápidamente.
- Siento sed Daryl, y esa sed es de total venganza. Vamos.
Seguí caminando sigiloso siguiendo el mismo camino que hace tan solo un rato había pensado, o más bien, vivido en sueño. El mismo siguió mi paso, y a diferencia de mi sueño Carl no venía con nosotros. Entramos por la puerta que estaba entre abierta y de inmediato me fijé en el suelo, sangre. Río de sangre.
- ¿Que carajos...?
Dije en murmuro. Miré detrás de mi y el camino por el cuál venía se cerraba con una neblina, pero no una cualquiera, si no una bastante extraña que vendría siendo negra. Analicé el lugar intentando buscar a mi compañero pero no había rastro de él.
- ¡Rick! ¡Sigue mi dedo, por favor! ¡Aquí estoy, di algo!
Escuché un par de ecos en los pasillos, fruncí mi ceño sin comprender nada y al apenas dar un corto paso sentí un fuerte ardor en mi hombro. Gruñí quejándome y tomé el mismo frotándome formando un circulo no-perfecto.
- ¡Daryl aquí estoy!
Grité y me quejé, el hombro dolía cada vez más. Saqué mi mano de allí y observé la misma, la sangre goteaba y ahora mi camisa se llenaba de lo mismo. ¿Que mierda está pasando?
Casi arrastrándome caminé por los pasillos, y ya desangrado y sin energía (obviamente), logré divisar un cuerpo. El entorno se había vuelto blanco, los pasillos habían desaparecido y el cuerpo que logré ver era yo mismo. Y era bastante extraño, pues MI cuerpo estaba recostado pero a la vez ¿flotando? Tenía mi brazo en el hombro y los gritos que escuché en un principio se escuchaban más fuertes y con eco.
- Pa, reacciona por favor...
Carl ahora murmuraba, y con frustración seguí arrastrándome hasta llegar a mi cuerpo que estaba "Flotando." Negué con mi cabeza y de nuevo esa sensación de querer gritar de furia o de tristeza se apoderaba de mi cuerpo, no podía evitar sentirme mal a escuchar a Carl así. No de nuevo.
Con fuerzas me levanté y toqué mi propio cuerpo, no había nada, era solo un reflejo. Pero una sensación bastante extraña hizo que mi mano se adormeciera al tocarle, así que no dudé más y me senté en la banca fantasma que sostenía mi cuerpo fantasma. Me recosté de igual manera y en una fracción de segundos el lugar se fue a negro; no había luz, no había neblina ni tampoco la brisa helada.
P.O.V Carl Grimes:
- Pa, reacciona por favor...
Murmuré casi sollozando, Daryl solo observó hacia atrás y luego fijó su mirada adelante. Íbamos en el auto el cual tomé para seguirlos en su momento.
- Presionale fuerte.
Daryl me mandó, cosa que no dudé en acceder, y presioné con fuerza su herida de bala. Rick empezó a dar unos pequeños saltos, que terminaron en fuertes convulsiones.
- ¡Daryl! ¡ESTÁ CONVULSIONANDO!
Le grité, pero este no respondió ni observó pues la puerta de Alexandria se hacia presente. Este comenzó a hacer un cambio de luces entre el auto y el guardia y la puerta estaba abierta ya a solo unos metros de distancia de nosotros. Entró sin quitar el pie del acelerador, hasta que ya fuera de lo que era la enfermería, frenó de golpe y se bajó ayudándome a levantar el cuerpo de mi papá quien seguía dando unos saltos bruscos.
- Está intentando despertar...
Pensé. Con Rick en nuestros brazos corrimos hasta el hogar en donde se quedaba la enfermera y de golpe abrimos la puerta, unos fuertes pasos se hicieron presente en la escalera y se vio a la misma envolviendo su cuerpo en una bata.
- Trae un impacto de bala y varios golpes encima. En el auto estaba convulsionando... por favor, AYUDALO.
Terminó gritando Daryl y afirmándose la cabeza mientras caminaba de lado a lado. Hice su mismo gesto pero me puse de cuclillas observando como la chica le rajaba la camisa y con su mano hacía presión.
- El botiquín está en la cocina, ¡Rápido!
Gritó ella y corrí hasta la misma revolviendo todo vasos y platos que tenía en los cajones. Con el botiquín en mis manos corrí nuevamente hasta donde estaba la chica y mi padre, dejé el ya nombrado en la mesa que estaba a un lado de nosotros y ella rápidamente sacó un par de vendas. Hizo un gesto con sus manos para así poder ayudarle a cambiarle de posición a una más cómoda, sentarlo medio recto, su herida necesitaba estar en alto.
Con el par de vendas que sacó hizo presión y negó con su cabeza, perdía mucha sangre.
- De aquí en adelante me encargo yo. Luego les aviso del avance.
La chica habló echándonos disimuladamente. Daryl con enojo pateó la puerta y salió del hogar sentándose en la entrada de la misma. Su rostro se deformó un poco, estaba afligido y la fuerza que oponía para no llorar se le estaban yendo.
- Fue mi culpa, yo decidí acompañarlo; yo seguí todas sus indicaciones por que sí... ambos queríamos venganza. Pero Rick... Rick de mierda es demasiado terco y no quiso esperar a ir con todo Alexandria, nooo.
Por segunda vez veía como Daryl se lamentaba por la decisión que había tomado. Negué con mi cabeza y posé una de mis manos en su espalda, negué con mi cabeza e intenté consolarle.
- ... además, tú no tienes la culpa. No te tienes que cegar con la idea de que el disparo fue tú culpa o que aceptaste su propuesta para vengarse. Claro que no.
Hablé pacifico, aunque por dentro ardía en llanto y en furia, pero no por Daryl; si no en general a la situación.
- Es una H E R I D A de B A L A, ¿Sabes el riesgo que corre ahora, carl?
Se levantó furioso y desapareció por las calles de Alexandria. Solté un ultimo suspiro hasta que una voz femenina me interrumpió.
- Rick no es el herido de bala, ¿Verdad Carl?
Era _____ (tn) con una chaqueta de mi padre envolviendo sus hombros. Mierda.
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La última horda. | Rick Grimes & Tú.
Horreur"Vamos a pelear, no nos queda otra opción. Y morirán más amigos, puede que muchos, tal vez uno de nosotros. Aun así, valdrá la pena." - Rick Grimes.