Piers Nivans y Tú (Resident Evil)

Parte 11- Una pareja extraña

Rumanía, Constanza. Julio de 2012

Me había ganado una semana de vacaciones y elegí un destino diferente, un lugar en el que nunca antes había estado. Mi vuelo llegó puntual y un taxi me llevó hasta mi destino, una ciudad costera llamada Constanza, donde había alquilado una casa al borde de un acantilado. Las vistas eran surrealistas y el clima agradable. Dejé mi maleta en el salón y salí a un enorme porche trasero con vistas al mar. Respiré profundamente y me dispuse a salir para dirigirme a una pequeña cala cerca de allí. Cogí mi bañador y una toalla y me marché a la playa. Apenas acomodé mi toalla sobre la arena cuando me percaté de que allí no había casi nadie, parecía un sitio privilegiado. Me tumbé boca arriba sobre la toalla y cerré los ojos. Apenas llevaba unos minutos tumbada al sol cuando una sombra cubrió mi rostro. Abrí los ojos de forma inmediata.

Justo delante de mis narices había un tipo alto, de piel clara y ojos azules claros como el cristal. La cicatriz de su mejilla y su corte al cero pelirrojo eran bastante llamativos. Llevaba un bañador azul marino y tenía ambas manos sobre sus caderas mientras me miraba desde arriba sin disimulo alguno. Yo conocía a aquel tipo, lo había visto en los informes que Chris me hacía leer para estar al tanto de todo.

-Jake Muller-dije de forma despreocupada-¿Te han dado vacaciones?

-Sarah Hunter ¿Te han echado agua caliente para alejarte de Redfield?

Mostré una sonrisa escéptica y volví a cerrar los ojos. Jake lanzó su toalla a pocos centímetros de la mía y se tumbó de medio lado, sin dejar de mirarme. Mis nervios no tardaron en enervarse, aquel tipo podía llegar a ser realmente molesto, Chris me había hablado de él. Era un buen tío, pero demasiado plasta para su gusto.

-¿Cómo me has encontrado?-pregunté, sin abrir los ojos

-Digamos que me deben algunos favores. Te llevo siguiendo unos meses, pero como dije antes, eres la sombra de ese grandullón con cara de pocos amigos

Abrí los ojos y lo observé con el ceño fruncido.

-No hables mal de Redfield

Mostró una sonrisa y se tumbó boca arriba. Allí estábamos los dos, tirados al sol, en silencio. Al cabo de cinco minutos me incorporé y miré a Jake.

-¿Por qué me has seguido? Estoy segura de que no ha sido para que charlemos de forma amistosa mientras tomamos margaritas en un pub de playa

Ahora Jake soltaba una risa sonora mientras me observaba con sus cristalinos ojos.

-No quería meter a Sherry en esto, ella tiene cosas mejores que hacer y esto puede ser peligroso

No dejé de mirarlo, interesada en el tema.

-Tengo información de un tipo, Yaroslavl Petrov, un ruso con muy mala leche. Lleva unos días aquí y oculta una potente vacuna que produce mutaciones horribles. Obviamente yo soy inmune a ella, pero el resto del mundo no. Tengo que encontrarla y llevarla de vuelta a casa-explicó Jake con total tranquilidad

-¿Me estás diciendo que incluso de vacaciones debo luchar contra el bioterrorismo?-respiré resignada

-Será divertido, Hunter. Ese tipo maneja mucho dinero y dará una fiesta mañana por la noche. Tengo dos invitaciones y no puedo entrar solo, llamaría mucho la atención

Arqueé mi ceja mientras le dedicaba una mirada un tanto molesta. Debía informar de ello a mi superior, hacer esto sin permiso solo podía traerme problemas si algo salía mal.

-Necesito hablar de esto con mi capitán

-No puedes, es un trabajo secreto del gobierno. He confiado en ti, así que no lo eches a perder. Les dije a esos capullos trajeados que llevaría a alguien competente, no me dejes por mentiroso