schizophrenia ★ yuwin

twenty one: yuta.

5 años después.

El clima de hoy se encontraba muy pesado para mí gusto, hubo un diluvio hace unas horas y la humedad no tardó en hacerse presente.
Detestaba la humedad, hacia me qué sudara la cara, y mi pelo se convertía en un desastre. Además, la universidad me dejaba completamente exhausto, así que considero que hoy no sería un muy buen día.

Éstas fechas eran las peores para mí, y para mi salud mental. Años atrás pasaron cosas que hicieron que quedara peor de lo que yo ya estaba.
Ahora mismo me encontraba yendo al cementerio a visitar la tumba de Hyejoo, ¿quién diría que hoy se cumplen cinco años de su muerte? todo me sigue pareciendo tan irreal, tan falso. Ojalá ella estuviera acá conmigo, tenía tanto por vivir y muchas metas que lograr.

Había comprado un ramo de sus flores favoritas; las petunias. Fue difícil conseguirlas, y que no sean falsas, normalmente ese tipo de flores crecen en América del Sur, interesante, ¿no?

Iba caminando por los pasillos de aquél tranquilo lugar, los pajaritos cantaban, y se sentía el aura muerta que emanaba.
¿Nunca les pareció interesante el por qué de la muerte de todas éstas personas? porque a mí sí, principalmente al ver tumbas de niños pequeños. ¿Por qué ellos?

El lugar estaba vacío, en comparación a años anteriores, lo cuál me hace sentir mejor. Siento que ésta vez mi visita va a ser más íntima, sólo Hyejoo y yo... Y los cientos de otros muertos.

Estaba a unos pocos metros de mi destino, cuando lo ví. Estaba arrodillado frente a su tumba, llorando.
Y no pude evitar yo también.

Desde que lo alejaron de mí, no lo había visto nunca más. Sus padres no me quisieron dar explicaciones, me echaban la culpa del destino de su hijo. Y así fue por las primeras semanas, luego, se les perdió todo el rastro, a ellos y a Sicheng.
Me costó salir adelante completamente solo, antes por lo menos tenía a dos amigos que me acompañaban, pero ahora no. Me tenía a mi mismo, y así debía ser.