Capítulo #1 ; Primer Beso.

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Narra Nate.

Habían pasado cinco semanas desde que Felix le había roto el corazón a Sarah. Cinco semanas donde ella sufrió, lloró y hasta intentó vengarse del chico rompe-corazones. Cada día intentaba acercarme más a ella, en forma amorosa. Le recordaba todos los días lo hermosa que era, y que no importaba lo que diga el resto. Le decía que la quería y que me tenía a mi para todo lo que necesitara.

Era viernes por la noche y yo me encontraba en la habitación de Sarah, junto con ella, mirando una película. Sally había salido y Zack se había conseguido una cita. Era la primera vez que pasábamos tiempo solos en mucho tiempo. Estábamos acostados en la cama, uno al lado del otro, mirando una película romántica. Hacía frío, ese mismo día empezábamos las vacaciones de navidad. Faltaba una semana para la cena del 24 a la noche, donde nos juntaríamos con su familia, mi familia y la de Zack para festejar. Ella tenía su cabeza apoyada en mi hombro, por lo tanto yo había aprovechado para pasar mi brazo al rededor de su cadera. Era una posición romántica y me encantaba. Ella emanaba un rico aroma a perfume, que me embobaba.

Quería besarla. Quería hacerlo. Era mi oportunidad perfecta, ¿no era así?

—Sarah... -susurré, a lo que ella levantó la mirada, y sonrió de lado-. ¿Te he dicho que me encanta cuando tienes tu cabello recogido en un rodete?

—No... -dijo ella, sonrojada-. De hecho... yo creo que estoy toda despeinada.

—Estás hermosa. -susurré. Nuestros rostros estaban muy cerca. Estábamos tan pegados que nuestros labios se podrían rozar en cualquier momento. Era mi oportunidad perfecta-. Lo siento...

— ¿Qué es lo que sientes, Nate? -me preguntó, arrugando la nariz, gesto que le causó ternura.

—Lo que estoy apunto de hacer.

Y antes de que ella pudiera responder algo, uní nuestros labios en un beso. En un principio, ninguno de los dos hizo nada, pero luego de unos segundos, ella continuó el beso.

Era el mejor beso que había dado en mi vida, y eso que tenía mucha experiencia en ese área. Era suave, lento y cariñoso. Era sensacional.

Luego de unos minutos, ella se alejó de mi. Su rostro se transformó y sus ojos se volvieron llorosos.

Lo había arruinado.

Había arruinado nuestra amistad.

—Yo... -empecé a decir, afligido-. Lo siento, Sarah...

—No... -dijo, negando con la cabeza-. Yo...

No dijo nada más. Simplemente se levantó y se metió en el baño. La esperé unos minutos, antes de levantarme y tocar la puerta.

—Sarah... -dije, con los ojos llenos de lágrimas-. Sarah... lo siento. No quería que te pusieras mal. Sarah... -me apoyé contra la puerta-. Lo siento. No quiero arruinar nuestra amistad. Pero la verdad es que me encantas, siempre lo hiciste. No sé cómo no te has dado cuenta nunca... yo... lo siento.

Suspiré hondo y me fui de la casa de Sarah.

Había arruinado todo.

***

Narra Sarah.

Escuché como Nate se iba de mi casa. Salí del baño y observé cómo se subía al auto.

Me había besado.

Mi mejor amigo me había besado.

Y la peor parte, es que me había encantado. Me había hecho sentir cosas que nunca antes había sentido. Cosas que con Felix no había sentido.

No me podía gustar Nate. ¿O si?

La mejor opción era esperar a Sally y hablar sobre esto. No podía hacerlo por mi misma. No podía desenamorarme tan fácil de Felix y sentir cosas por Nate, ¿no es así?

No. Imposible.

^^^

Me desperté al otro día, acostada en el sillón de la pieza de Sally. Ella estaba acostada en su cama, toda destapada. Yo me acerqué y la tapé. Ella se movió levemente y abrió los ojos con lentitud.

—Sar... -empezó y abrió los ojos de golpe. Se sentó en la cama y me miró con ojos acusadores-. ¿Qué sucedió anoche con Nate?

— ¿Qué...? -empecé y me hice la tonta-. No sé de qué hablas.

—Algo sucedió. -sentenció y sonrió de lado-. Por esa razón te has venido a mi habitación. Has estado esperando que venga para hablar conmigo.

—Yo... -empecé y ella me fulminó con la mirada. Mi gemela me conocía tan bien-. Se podría decir como que... Mm... Nate y yo quizá... él... ¿me besó?

Sally gritó, emocionada.
No sabía que mi hermana podía gritar tan fuerte y agudo.

— ¡No lo puedo creer! -exclamó con felicidad-. ¡Ya era hora! ¿Y tu que hiciste?

—Bueno... yo... -empecé y me sonrojé-. Le seguí el beso.

— ¿Y...? -me preguntó, para que siga.

—Me ha encantado. -terminé, y suspiré-. Sally... no quiero sentir lo que siento... Me han lastimado... y mucho. Además, ¿puedes dejar de amar a una persona en tan sólo cinco semanas y sentir cosas muy profundas por otra?

—Sarah. Voy a decirte la verdad. -me dijo, al momento que yo me sentaba a su lado en la cama-. Tu nunca has estado enamorada de Felix. Siempre te ha gustado Nate. Y ahora, finalmente después de mucho tiempo, te has dado cuenta.

— ¿Cómo es eso posible? -pregunté y arrugué la nariz-. Felix...

—Vamos, Sarah. No te engañes. -me dijo mi hermana-. Sólo te sentías atraída por Felix, pero nunca te ha gustado. Nate, en cambio, siempre lo ha hecho. Te he visto como lo miras y como tus ojos se iluminan al escuchar tu nombre o cuando te dice lo hermosa que estás. No puedo creer que no te hayas dado cuenta.

—Entonces... -empecé y cerré los ojos un momento antes de agregar-. ¿Siempre estuve enamorada de Nate y sólo recién ahora me doy cuenta? -mi hermana asintió y yo golpeé mi frente-. Oh, rayos. He cometido un grave error.

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¡Nuevo capítulo! Espero que les guste :)

Estaré haciendo un especial de navidad, así que subiré dos capítulos más en el transcurso de hoy y mañana.

Ahora si,
¡Disfruten!

Ju💜

¡No! Te amo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora