Amor ♡ | Dybatini

7

"Meeting"

Narra Paulo.

Me había recostado sobre el sillón a esperar a que suene el timbre esperando que sea Oriana, ya eran la una de la tarde, los minutos se me hacían eternos.

Pasaron unos dos minutos, cuando me exalté al escuchar unos suaves golpes en la puerta. Bufé al estar seguro de que no iba a ser la persona que yo esperaba, era imposible que pase sin que yo le haya abierto la puerta principal.

Abrí la puerta con desgano, mi cara cambió completamente a sorpresa cuando vi que la persona que había tocado la puerta era Oriana.

- ¡Hola! -dije evidentemente sorprendido.

- ¿Hola, todo bien? -dijo ella mientras me daba un beso en el cachete.

- Pasa. -dije mientras la invitaba a pasar.- ¿Cómo entraste? Si yo no te abrí la puerta.-pregunté mientras ponía mis manos en mis bolsillos.

- Me encontré a tu sobrina en la entrada y ella me dejo pasar. Dolores, creo que era su nombre. -respondió mientras sujetaba su cartera con fuerza.

-Ahh si, esta pendeja. -dije y reímos al mismo tiempo. - Dejá la cartera en el sillón, si queres.

Yo no era muy bueno en la cocina, por lo que le ofrecí para pedir delivery, a lo que ella acepto con gusto.

En la comida estuvimos muy callados, cruzamos algunas palabras, pero solo hablamos de lo que habíamos hecho estas dos semanas sin vernos ni hablarnos.

Luego de terminar de almorzar, me paré para levantar los platos y ella inmediatamente imitó mi acción para ayudarme.

-¿Esta es tu casa? -preguntó mientras tomaba un repasador para secar un plato.

-Nono, yo no tengo casa en Buenos Aires, es la casa de un amigo mio. -respondí mientras agarraba un vaso para lavarlo.

Mientras estaba lavando un vaso, se me cae, por lo que se rompe. Me quejé al sentir una molestia en mi mano, y cuando la miro veo que me corte el dedo índice.

- La puta madreee. -me quejo mientras cierro la canilla como puedo.

Oriana deja lo que estaba haciendo para hacercarse a mi.

-¿Te cortaste? -dijo mientras tomaba mi mano para mirarla. - Que boludo. -dijo mientras vió la cortadura que me había hecho.

-Encima este tarado ni una curita debe de tener acá. -dije mientras ponía mi dedo en la canilla para retirar la sangre que se escurría por el.

-Yo tengo. -dijo Ori mientras iba hacia su cartera y sacaba una curita de su billetera.

Me la colocó en el dedo con cuidado, era tan delicada.

-Gracias. -contesté a lo que ella asintió sonriendo.

Luego de eso nos sentamos en el sillón y seguimos hablando.

-¿Cómo llegaste a Juventus? -preguntó la morocha.

-Primero jugué en Instituto, en Córdoba, y me ficharon en Palermo, donde jugué un año. Después me llamaron para jugar ahí. Yo no lo podía creer, mi sueño siempre fue jugar en un club tan importante como Juventus, además de jugar en la selección argentina. También estoy contento por haberle cumplido el sueño a mi viejo, el quería que alguno de sus tres hijos juegue profesionalmente al fútbol. -contesté mientras ella me observaba muy atenta.

- Debe de estar re orgulloso de vos. -dijo mientras me miraba a los ojos.

- Ojalá que si, me encantaría que este acá para que lo pueda ver y vivir. -dije mientras hacia media sonrisa con mi boca.

- Ay, perdón, no sabia. -dijo mientras llevaba su mano a su boca. - Si queres no hablamos del tema.

-Nono, esta bien, no me jode. -dije mientras colocaba una mano en mi pierna. - Murió cuando tenía 15 años, tenia una enfermedad muy grave.

- Por lo que me imagino eran muy unidos.

-Si, lo éramos. El hizo un montón de esfuerzos para que yo este donde estoy ahora. Es por eso que todo se lo debo a él.

Hablamos muchísimo rato más, es increíble lo buena persona que es.

- Creo que ya me tengo que ir, ya es tarde. -dijo mientras se levantaba del sillón y tomaba las tazas de café para llevarlas a la pileta.

- Te llevo. -dije mientras tomaba las llaves de mi auto.

- No hace falta, no quiero romperte las bolas. Me tomo un Uber. -dijo mientras desbloqueaba su celular.

- No seas boba, dale que te llevo. No me jodes. -dije mientras abría la puerta.

En el trayecto a su casa nos reímos mucho, cantábamos las canciones que pasaban en la radio y ella también las bailaba. Era tan linda.

Cuando llegamos, antes de bajar del auto busco sus llaves en su bolso.

- Chau. -dijo mientras colgaba su cartera en su hombro.

- Chau. -respondí y acto seguido me dió un beso en el cachete para luego bajarse del auto.

-Ori. -la llamé y se dió vuelta para mirarme. - La pase re bien con vos hoy.

- Yo también Pau. -dijo causando una amplia sonrisa en ambos.

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Holaaa feliz navidat, ojalá la hayan pasado hermoso.

Trate de hacer extenso este capítulo, así q si les gusto voten.

Como quieren que sea la próxima vez que se vean?
Tirenme ideas xq estoy re oxidada jajsjaj