《Episodio 49》 El coliseo de la defunción al destino

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Ruby: Hermanita mía...
- De un tierno abrazo de oso -
tu jamás serías capaz de asesinar a tu propia familia, venga paremos esta pelea absurda y como las hermanas que somos conversemos con calma y familiaridad
Estas de acuerdo conmigo...?

Yang: - Le da palmaditas su cabecita -
Esta bien requiero darme un respiro, últimamente la presión social no a parado de comprimirme y creo que llegó la hora de resolver las complicaciones por medio del dialogó y a golpes
- Suspira de muy mala gana -

Las dos colegas sentadas en el piso del pasillo dialogaban intercambiando opiniones y contándose los momentos y situaciones que habían vivido a lo largo de estos meses de más o menos casi dos años de implacables de contratiempos que motivaron inconcientemente a la apresurada maduración psicológica de la forma de ser de ellas adquiriendo el sentido de responsabilidad equiparadas a las de un adulto, como también el sentido amar y proteger una persona de una gran significación para sus vidas.

Lo de la noticia respecto al bebé dejo a Yang extremadamente impactada al no poder creer que después de que la pelinegra se esfumara del reino de los dragones y repentinamente de la nada aparece con una novia 100% humana, mas encima embarazada de un crío en la qué ella sería la tía, el hecho de que su híbrida hermana se hubiese asociado con la princesa del reino humano le daba muy mala espina sobre el peligro que podría significar esa relación y el impacto significativo que tendría en la sociedad, era contraria a eso a lo que tampoco le agradaba la idea de que su hermana adoptiva anduviera a la cola de esa princesa, tenía un recelo insostenible hacia esa persona no conocida por el temor de que le hiciera daño a lo que más amaba y en cuento al futuro hijo casi le da un ataque al corazón que desde ahora estaría al pendiente de el por si algo salía mal no tendría piedad en arrebatarselo a su madre y huir con Ruby a su tierra.

Yang: Lo que me acabas de contar...
o sea... o sea... o sea... o sea...
- Tartamudeado de la estupefacción
que no podía continuar -
Lo que me dijiste aquella vez antes de abadonarnos yo jamás pensé...
JODER QUE SE HARÍA REALIDAD !!!!

Ruby: No grites que me rompes los tímpanos !!!
Además no mientas que tu también te enamoraste de una mujer
- De brazos cruzados mostrando una mueca -

Mientras conversaban una gatita y una rehén se habían arrimado a unirse a la conversación

Blake: Oigan siento interrumpirlas pero...

Yang: Se me olvidó presentarte a mi novia y camarada
- Con su brazo alrededor de su cuello causandole un
leve sonrojo -
Ella es Blake Belladona la sublider del Colmillo Blanco y mi salvadora de morir de hipotermia es aquel día de tormenta

Ruby: Guau...
- Estrecha su mano -
Un gusto conocerte y espero que la tonta de mi hermanita revoltosa y enojona no te haya causado muchos problemas

Blake: - Más sonrojada -
No... ella...
Se ha portado muy bien con el equipo
- Sonríe nerviosa -

Ruby: Y ella es la rehén de la que me hablaste...
No...?
- Apuntando a Akame -

Yang: Si como lo mencioné anteriormente se trata de la mismísima ladrona intentó saquear una de las reliquias más inapreciables para el Colmillo Blanco al infiltrarse descaradamente en la guarida aunque al menos conseguimos frustrar sus planes a tiempo, recibiendo así las consecuencias
de sus actos ratreros de desempeñar el papel de perrito faldero obligada a revelarnos las rutas de mejor eficacia con el fin de colarnos sin ser descubiertos
- Le clarifica -

Ruby: Hablando de rutas y conquistas, lo de iniciar una rebelión sin antes pensar en las consecuencias que está
conllevaría...?

Dijo en una entonación que manifestaba solemnidad y de interrogancia que no ostentaban contentamiento

 🐉La sangre Dragonial🐉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora