Seven

1.8K 222 31
                                    

Quiero verte sonreír, pero sonreír para mí, porque soy un egoísta con el plan más idiota, que solo te quiere a ti.

Entré casi corriendo y entre tropezones hacia el instituto, las miradas de los escolares iban dirigidas a mí pero, por primera vez no me importaba, lo único que anhelaba era llegar a un lugar seguro, antes de que el moreno me encontrará

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Entré casi corriendo y entre tropezones hacia el instituto, las miradas de los escolares iban dirigidas a mí pero, por primera vez no me importaba, lo único que anhelaba era llegar a un lugar seguro, antes de que el moreno me encontrará. Mi corazón latía cada vez más rápido, mis mejillas se sonrojaron al recordar todo. Todo se estaba yendo a la mierda y tenía miedo.

Sentir sus manos en mi cintura, mi camisa siendo abierta dejando que el aire frío de la noche congelara mi cuerpo, pero sentir sus manos cálidas abrazar mi cuerpo quitando todo el frío existente, mi camisa de seda de color negro fue tirada lejos, y me atreví a descender hasta llegar a su pecho y desabrochar su camisa color blanco dejando a la vista su ancho y apenas tonificado cuerpo moreno, coloque mis manos en sus hombros dejando caer por completo la prenda, su piel era tan suave y brillosa que me sentí sucio a su lado. Él era todo mientras que yo era nada.

Su mano tomó mi mentón, obligándome a mirarlo a los ojos, estos me miraban tiernos y con un brillo especial, ¿Así se sentía ser el novio del chico más inteligente y guapo del instituto? ¿Así se siente amarte, Kim Namjoon?

— Quiéreme fuerte, Min Yoongi, aunque te canses de mí, quiéreme más que ayer pero menos que mañana — me acomode más en su regazo, y lo abracé.

Tenía miedo de que todas sus palabras fueran mentira, que este noviazgo falso sea parte de un juego. No quiero volver a sufrir por el mismo hombre.

¿Namjoon? ¿Tomaste más de la cuenta? — bromeó, mi corazón latía como loco, temía que lo escuchara.

— Creo que si — su rostro mostraba incomodidad, pero sonrió.

— Yo también quiero que me quieras — respondí escondiendo mi cara en su pecho.

Me besó, dulce y tierno como siempre lo hacía, tan lento como su voz, tan provocador como su cuerpo, Kim Namjoon era un demonio vestido de ángel, mientras que yo era un ser humano dispuesto a caer en los brazos de aquel ser maligno vestido de criatura celestial.

¿Qué mierda me has hecho?

Me encontraste cayendo demasiado bajo, porque te estoy dejando entrar a mi corazón, cuando juré no volver a hacerlo.

¿Por qué te sigo amando?¿Por qué me sigo ilusionado con algo que tarde o temprano acabará?

¿Seremos como dos extraños después de esto? Namjoonie no me dejes, no me abandones como hace dos años.

Un golpe seco me sacó de mis pensamientos más recientes. Últimamente pensaba demasiado y aquello no era bueno para mi salud, hacía que escribiera cosas que no deseaba escribir.

— Dime ¡¿Cuándo pensabas contarme que tú y Kim Namjoon ya se habían dado su buen polvo ¿Por qué me enteré primero por terceros en vez de por ti? ¿Y qué tal es? ¿Quién fue el pasivo tu o Namjoon? —adoptó una postura indignada.

ᴏʟᴠɪᴅᴀʟᴏ, ɴᴀᴍᴊᴏᴏɴ © (YOONNAM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora