Capítulo 16

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06 de octubre del 2000

Me había descubierto, de alguna forma ya sabía sobre la plataforma online de ajedrez, es decir, era una detective y no es que me preocupe. De todas maneras, no tiene forma de descubrir lo que hago más que jugar, pero me intriga cómo lo habrá descubierto, ¿Selene le habrá dicho? O quizá se le ocurrió revisar el historial de su propia computadora, lo cual no tendría mucho sentido. Sea como sea lo sabía, y tendré que hacer como que nada ha pasado y hacerme el ofendido por sus investigaciones, no queda de otra.

Lo realmente importante es que Cloe había vuelto y necesitaba hablar con ella, así que me dirigí a su casa luego de leer el mensaje, lo que sí me extrañó es que no había nadie allí, así que decidí volver, ponerme algo abrigado –porque vaya el frío que hace– y mirar televisión.

Hace mucho que esta caja de ignorancia no me atrapa, así que quise distraerme de alguna forma, mañana podría hablar con Cloe y espero esta vez no se escape.

07 de octubre del 2000

Efectivamente la encontré, estaba archivando unos papeles cuando entré a la oficina.

–¿No eras tú o no quisiste responderme? –Fue directa, lo que no era tan típico en Cloe.

–No quise responderte, ¿acaso tiene algo de malo que juegue ajedrez? –La desafié con mis palabras.

–¿Sólo juegas ajedrez? –Otra vez al clavo.

–¿Me estás interrogando? –Quise jugar su juego, responder preguntas con más preguntas.

Intenté evadirla y así fue, terminé enfrentando sus propias angustias, haciendo que confesara el hecho de investigarme, o en realidad dijo "investigar" simplemente, ya que era detective y quería que por favor no se lo dijera a nadie. La verdad no es que quiera meterme, es que sé que busca algo en mí, es así de simple, pero si puedo ser honesto con mis propios pensamientos, debo decir que me encanta la situación, ella quiere jugar así que se lo voy a permitir, pues también quiero jugar y claramente no se lo haré fácil.

Después de todo lo ocurrido la esperé afuera de la oficina a fin de turno, quise ir por última vez a su casa a ver si podía encontrar algo más, pero no me dejó, por el contrario, quería conocer la mía.

No pensé mucho en la situación, pero acepté. Pronto veremos qué pasa.

08 de octubre del 2000

Finalmente llegamos a mi casa, ella se paró frente a la puerta y quedó estupefacta mirando fijamente a mi madre sentada en el sillón.

–Decidió volver señora Laura. –Salió forzadamente de sus labios.

–Ya resolví mis asuntos querida, y Joe me estaba esperando. –¿Mi madre daba explicaciones? Fue lo más extraño que haya escuchado, conversaron unos minutos mientras mi mente reflexionaba.

Lo primero que pasó por mi cabeza fue lo obvio... Cloe había llamado a mi madre por su nombre, el cual definitivamente no era Laura.

Invité a Cloe que pasara a la cocina para preparar algo de comer, ella aceptó y buscó algo entre las cosas de su cartera, se veía un tanto angustiada e incómoda.

Cenamos para saciar el hambre y de Cloe no salía ni una sola palabra, mi madre seguía en el sillón y Cloe con la mirada un tanto perdida comenzó a notar sus nervios.

–No quiero importunarte, creo que ya debería irme. –El tono de su voz era inseguro.

–Y ¿no viste nada de mi casa? Creí que querías buscar algo, no lo sé. –Me expresé con ironía.

–Sólo quería conocer como era un poco más, además estar contigo un rato. –Mintió claramente, se veía en la mueca que formaba en la parte superior de sus labios.

–¿Segura que no te falta nada? Te ves muy nerviosa, ¿te puedo ayudar? –Intenté parecer amable.

–Nadie puede. –Fue cortante.

–Al menos déjame dejarte en la puerta y trata de calmarte Cloe, se ve a lo lejos. –Sus manos comenzaron a temblar y ella rápidamente las ocultó bajo la mesa.

El día no fue muy productivo, pero sí ocurrió algo antes de que ella se fuera de mi casa y tenía que ver con mi madre.

Cloe se acercó para despedirse, por lo que se veía, bastante tensa e incómoda.

Madre intentó ser cautelosa, pero yo la vi. Tomó la muñeca de la chica e hizo como que le daba un beso en la mejilla, sin embargo, le susurró algo que aún desconozco, y con la otra mano echó una pequeña cajita azul con blanco en la cartera del abrigo de Cloe, la cual tenía escrito "Carbamazepina" en la cubierta, ya sabré de qué se trata, por ahora decidí acompañar a Cloe, no estaba en condiciones de manejar.

Para que quede claro, madre insistió.

12 de octubre del 2000

Pasaban los días y pensé en preguntarle directamente a Cloe qué le había dicho mi madre, pues ella jamás me diría ninguno de sus planes. Rápidamente descarté la idea cuando no llegó al trabajo.

Por otra parte, investigué un poco más sobre lo que ya sabía... Ese psicofármaco que le dio mi madre a Cloe seguramente es lo que estaba ella buscando en su cartera, pero ¿por qué lo tendría mi madre? Me resulta muy extraño no haber visto nada antes.

Ese medicamento es recetado para el trastorno bipolar, pero al indagar más me di cuenta de que se le puede dar otros usos, como para supuestas "crisis maníacas", imagino que esta chica tiene más cambios de humor que una persona con el otro trastorno, debe ser grave así que por algo la medicaron y/o necesitaba esas pastillas de alguna manera, ¿su psiquiatra le habrá dado respuestas? Como sea, por ahora solo queda esperar.

Tomé todas mis cosas y me retiré antes. Cuando llegué a casa todo volvía a ser un caos, la ropa tirada por todas partes, mi madre durmiendo en el sillón y el polvo dándose ver entre los muebles.

Comencé a limpiar todo, fue agotador, no entiendo por qué volvió, necesito que se vaya, es muy molesta. 

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